miércoles, 23 de febrero de 2022

Matutino crucial

¡Buenos días!

No voy a hacerme cruces creyendo que este matutino será decisivo en mi futuro devenir (sea mañanero o existencial), porque no lo sabré hasta que eche la vista atrás con perspectiva vital, y podría ser tanto este mismo como cualquier otro de los que han sido, son y serán... o ninguno de ellos. Y por lo que a la meteorología respecta hoy tampoco parece que será un día trascendental, diferente, en el que vaya a cambiar algo, pues seguimos igual o casi tras muchos días, con sol a raudales, 7ºC al amanecer y 20ºC de máxima prevista por los madriles.

Antes de ayer por la tarde estuve en el cine viendo una película que me fascinó, y os recomiendo encarecidamente que vayáis a ver, o leáis la novela en que se basa, cosa que haré si cae en mis manos. Se trató de "Primavera en Beechwood" ("Mothering Sunday", 2021), dirigida por Eva Husson, basada en la novela homónima (en inglés) de Graham Swift ("El Domingo de las Madres", 2016), e interpretada por Odessa Young, Josh O'Connor, Sope Dirisu, Colin Firth, Olivia Colman, Emma D'Arcy, y Glenda Jackson. Es el primer largo que veo de esta directora francesa.

Domingo 30 de marzo de 1924 en Beechwood, Inglaterra. Es el Día de la Madre, y las criadas lo tienen libre para ir a visitar a las suyas. En la mansión de un matrimonio, que perdió a todos sus hijos en la I Guerra Mundial (1914-1918), y todavía muy apesadumbrados por ello, dan el día libre a la suya y ellos se disponen a ir a comer con otros matrimonios vecinos de su clase, quienes también sufrieron similares dolorosas pérdidas que intentan obviar, y donde se anunciará el compromiso matrimonial del hijo de uno de ellos, el único superviviente por ser adolescente cuando la guerra. Dado que la joven criada es huérfana, dice que pasará el día paseando en bicicleta, cuando en realidad va a reunirse con su amante secreto, con el que lleva siete años de relación clandestina, precisamente el hijo que se casará, en la casa familiar de él, vacía por el festejo, en el que tal vez sea su último momento de pasión amorosa (y carnal), antes de celebrarse la comida de compromiso y la posterior boda.

Excelentísima película (nota: 9), bellísima visualmente (y no solo por lo visual), este drama amoroso que me embelesó, por todo, por lo que se cuenta, por como se cuenta, por sus sensuales maneras que me acariciaron como la seda, de evocadora atmósfera embebida en melancolía, narrada no linealmente en tres momentos vitales de la protagonista, el día del título que orientó su vocación futura (el principal de la trama), unos años más tarde, y cuando ya es anciana, relato donde se entremezclan hechos vividos e imaginados, pensamientos y anhelos de la protagonista en un puzle temporal y existencial que hay que ir desentrañando. Además de esto, de trasfondo y casi de soslayo, nos habla de los traumas que quedan tras las guerras, del dolor tras la pérdida de seres queridos, y sobre todo, de literatura, de como salta la primera chispa de la vocación por ella y la del proceso creativo de narrar una historia. Insisto, una delicia me pareció, y os la recomiendo, o leed la novela, cosa que seguramente haré en cuanto se tercie.

Ahora llegamos al punto crítico de la sabiduría ajena, con estas citas que espero festejéis:

 - "La literatura nace del paso entre lo que el hombre es y lo que quisiera ser".  (Mario Vargas Llosa).

 - "La literatura, como cualquier forma de arte, es la confesión de que la vida no basta".  (Fernando Pessoa).

 - "En el proceso de la escritura la imaginación y la memoria se confunden".  (Adelaida García Morales).

 - "Un libro, como un viaje, se comienza con inquietud y se termina con melancolía".  (José Vasconcelos).

Besos y abrazos,

Don.

_____

martes, 22 de febrero de 2022

Maternal matutino perdido en la oscuridad

¡Buenos días!

Nos encontramos en otro luminoso día de invierno, muy bueno, bueno, en realidad de primavera, por mucho que el calendario diga que tiene que ser lo primero, soleadísimo, con 4ºC al amanecer y 20ºC de máxima prevista por los madriles... y no me pierdo tampoco ninguno de mis matutinos cuando toca, concibiéndolos al oscuro abrigo de la noche anterior, y dándoles a luz al amanecer, para dejarles ir a su albedrío, no para que se pierdan, sino para que se encuentren con quien toque y también consigo mismos, como toda buena madre haría, que malas no las hay, que esto depende de quien opine.

Este fin de semana estuve en el cine viendo "La hija oscura" ("The lost daughter", 2021), de Maggie Gyllenhaal, basada en la novela homónima (2006) de Elena Ferrante, y con Olivia Colman, Jessie Buckley, Dakota Johnson, Ed Harris, y Peter Sarsgaard. Es el primer largo como directora de esta también actriz y guionista.

Una mujer madura, profesora universitaria, viaja sola a una pequeña isla griega a pasar unos días de vacaciones, buscando tranquilidad. En su primer día en la playa observa a una joven madre y su niña que llegan junto con el resto de su muy bulliciosa familia, lo que le trae oscuros recuerdos de su propia maternidad cuando también era muy joven, y de sus dificultades para conciliar el cuidado de sus hijas con su proyección profesional. Se obsesiona con la joven madre y su hija, lo que hará que su comportamiento se torne algo extraño.

Una buena película en general (nota: 6), este thriller psicológico de atmósfera un tanto inquietante, una algo incómoda mirada a la maternidad, poco convencional, de complejos personajes femeninos, sobre todo el principal, que nos muestra sentimientos de maternidad culpable por haberse sentido desbordada, asfixiada, por la enorme carga de responsabilidad que le supone a la protagonista y que cree no podrá soportar ni compaginar con su faceta profesional. Excelentes momentos de cine, con otros que no tanto me gustaron.

¡Madre mía!, que llega el momento de la sabiduría ajena y todavía sigo perdido buscando cual elegir para que mejor ilumine nuestras entendederas. ¡Qué vais a pensar de mí si las que os pongo no os parecen bien aseadas! Bueno, ahí están:

 - "Vistas las cosas en la cámara oscura del recuerdo, toman un relieve singular".  (Théophile Gautier).

 - "El corazón de una madre es un abismo en el fondo del cual siempre hay un perdón".  (Honoré de Balzac).

Besos y abrazos,

Don.

_____

lunes, 21 de febrero de 2022

Acercarme a los matutinos

¡Buenos días!

Otra mañana más en la que me acerco a los matutinos, no huyendo de nada, sino por sentirme tan bien acogido por estos lares por el breve rato mañanero que paso con ellos, hasta que llegue el momento de irse, tras los besos y abrazos, fuga que no es de sentido único, pues siempre regresaré de nuevo por aquí cuando se tercie. El invierno parece haber huido de estas tierras tras tantas jornadas de sol, limpias de nubes, secas de agua, y de máximas más cerca de lo primaveral que de otra cosa. Hoy nos hemos levantado con 3ºC y se esperan 18ºC de máxima por los madriles.

Este fin de semana estuve en el cine viendo "Flee" ("Flugt", 2021), de Jonas Poher Rasmussen. Es la primera película que veo de este director danés, que es tanto documental como de animación, y que está nominada en los Óscar en tres categorías, tanto a mejor de habla no inglesa, como documental y de animación. Es la primera vez que ocurre esta triple nominación.

Un refugiado afgano residente en Dinamarca cuenta su historia a un amigo cineasta quien, para preservar su identidad, recrea la entrevista y la historia de su vida en imágenes animadas, ficcionando algunos pasajes, y con insertos de imágenes documentales reales para ir enmarcando el entorno histórico, desde que tuvo que huir de Kabul cuando niño a principios de los años 90, junto con su madre, hermanos y hermanas (su padre fue asesinado unos años antes), cuando los talibanes derrocaron al gobierno comunista y tomaron el poder, hasta hoy en día, cuando secretos que ha mantenido ocultos, y se anima ahora a desvelar, pueden poner en riesgo su relación con el hombre con el que pretende casarse.

Muy buena película (nota: 7) que, con un estilo de animación sencilla, sin florituras, fusionando ésta con documental y algo de ficción, trascendiendo géneros cinematográficos... y fronteras de todo tipo, sean geográficas o mentales, atrapó mi atención por la historia y el modo de narrarla, de un modo muy humano y empático. No solo habla del drama de los refugiados y las heridas físicas y emocionales que tal experiencia deja, sino también de huir de uno mismo, de encontrar tu lugar en el mundo... y a ti mismo, y demás intimidades.

Pues antes de irme, toca aproximarse a la sabiduría ajena, en la que a veces me refugio para intentar entender algo mejor lo que me rodea:

 - "Gato escaldado, del agua fría huye".  (Refrán).

 - "El retirarse no es huir ni el esperar es cordura si el peligro sobrepuja a la esperanza".  (Miguel de Cervantes).

 - "El hombre sueña con escapar, pero no debe correr para ser libre. Si uno huye de sí mismo, su prisión irá con él".  (Gustave Thibon).

Besos y abrazos,

Don.

jueves, 17 de febrero de 2022

Matutino que no da puntada sin hilo

¡Buenos días!

O al menos eso intento, que me quede bien hilvanado, aunque a veces se me deshilachen sin darme cuenta. Aunque bien mirado, algunos flecos sueltos por aquí y por allá podrían darle cierto toque de distinción, y poder salir a la calle (o al ciberespacio) arreglados pero informales, que diría la Martirio, y con la cabeza bien alta. Por lo demás, este invierno descafeinado ha vuelto a hacernos un traje, ha hecho de su capa un sayo, con otro día casi que primaveral, sereno, de madrugada no demasiado fría (5ºC), sol y algunas nubes, y máxima prevista por los madriles de 18ºC.

Antes de ayer por la tarde estuve en el cine viendo "Tailor (El sastre)" ("Raftis", 2020), de Sonia Liza Kenterman, y con Dimitris Imellos, Tamila Koulieva (bellísima mujer), Thanasis Papageorgiou, Stathis Stamoulakatos, y Daphne Michopoulou. Es el primer largo de esta directora griega de ascendencia alemana.

Un sastre soñador, meditabundo y meticuloso, que trabaja en la sastrería para hombre que fundó su muy anciano padre y vive solitario en el ático de encima de la tienda. Apenas le quedan ya clientes pues casi todos fueron muriendo y se enfrenta al embargo de su ahora ruinosa tienda. Además su padre enferma gravemente y le impele a intentar salvar el negocio familiar. Para ello, fabrica con piezas de desguace y vertedero un carromato y se dedica a recorrer con él, empujándolo y cargado telas, las calles y mercadillos de Atenas buscando nuevos clientes, pero nadie por allí quiere trajes de caballero, pasados de moda y muy caros, pues son gente humilde. Sin embargo las mujeres se interesan por trajes sencillos de vestir, y luego por trajes para boda y de novia que salgan bien de precio, pero no sabe muy bien cómo hacerlos, así que pide consejo y contrata a una vecina de su edificio, casada y con hija, que años atrás fue costurera, para que le eche una mano. Y vuelve a recorrer Atenas con su carromato, ahora tirado por una moto vieja y cargado con preciosos vestidos femeninos, que cada vez va vendiendo mejor y mejor.

Una buena película (nota: 6) esta tragicomedia con final esperanzador y maneras del cine mudo y del de Jacques Tati, aunque esté hablada, con su puntito de gracia, sobre un personaje que debe reinventarse, obligado por la realidad, que al principio le desconcierta y a la que tiene que salir desde su ensimismada burbuja de corte y confección masculina en la que ha vivido hasta ahora, pero no le queda otra que readaptarse. Parece toda una alegoría de la cruda situación socioeconómica por la que ha tenido que pasar Grecia en estos últimos años.

Ahora, con toda la intención del mundo, pongo el ojo en el ojal y os ensarto esta retahíla de citas de sabiduría ajena que seguro visten con elegancia nuestras entendederas:

 - "Aguja, hilo y dedal, os darán por medio real".  (Refrán).

 - "El sastre del Campillo, que cosía de balde y ponía el hilo".  (Refrán).

 - "Vivimos en un mundo donde los hombres se visten con trajes ya confeccionados. Peor para ti si tienes demasiada talla".  (Gustave Flaubert).

 - "El buen humor es el mejor traje que puede lucirse en sociedad".  (William M. Thackeray).

Besos y abrazos,

Don.

_____

martes, 15 de febrero de 2022

Matutino intranquilo

¡Buenos días!

Mi corazón se agita impaciente ante la expectativa de reencontrarme con mis bien amados matutinos cada mañana, remanso de paz que me deja como la seda tras una reconfortante sesión con ellos, listo para enfrentarme a los eventuales desasosiegos cuando de aquí salga. La algo turbulenta meteorología de ayer, sobre todo debido al viento desazonante y algo levantisco, que no levantino, que venía más de poniente, parece haberse sosegado un poco hoy, en esta fría madrugada (2ºC) con sol y algunas nubes, y una máxima prevista por los madriles de 13ºC.

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo "Un amor intranquilo" ("Les intranquilles", 2021), de Joachim Lafosse, y con Leïla Bekhti y Damien Bonnard. Noveno largo de este director belga, de quien había visto tres de sus anteriores, "Después de nosotros" ("L'économie du couple", 2016), "Los caballeros blancos" ("Les chevaliers blancs", 2015), y "Perder la razón" ("À perdre la raison", 2012).

Una restauradora de muebles antiguos y un pintor de cuadros forman una pareja que se quiere con locura, y al hijo de ambos. Sobrellevan lo mejor que pueden la bipolaridad que el artista padece, con brotes episódicos cada vez más frecuentes que hacen tambalear su estrecha relación, poniéndola a prueba.

Una buena película (nota: 6), incómoda de ver en muchos pasajes, este drama narrado sin efectismo, con naturalidad, sobre profundo compromiso amoroso, intimidades de pareja y sus conflictos, más que sobre bipolaridad, que queda de trasfondo y causa de sus problemas cotidianos, emponzoñando su relación, y cuyos arrebatos psicóticos influyen tanto en la mujer, que se siente impotente y desesperada, como en el hijo, aparte de sobre el propio enfermo.

Bueno, tranquilidad, no me seáis impacientes, que ya llega la sabiduría ajena, que tal vez ayude a serenar nuestro ánimo:

 - "El hombre es una animal encerrado en el exterior de su jaula. Se agita fuera de sí".  (Paul Valéry).

 - "Somos más sinceros cuando estamos iracundos que cuando estamos tranquilos".  (Cicerón).

 - "Un hombre no trata de verse en el agua que corre, sino en el agua tranquila, porque solamente lo que en sí es tranquilo puede dar tranquilidad a otros".  (Confucio).

Besos y abrazos,

Don.

_____

lunes, 14 de febrero de 2022

Matutino de regaliz

¡Buenos días!

Regalo feliz el que me hacen estos mis bien amados matutinos con solo estar conmigo cada mañana que se tercia, toda una regalía para mí en porciones mañaneras, pura golosina de la que disfruto cual recién adolescente picado de acné, cuando todo se vive con una intensidad tal que ya no volverá a sentirse así con el paso del tiempo. Vuelve a salir el sol tras el nublado fin de semana que no dejó caer ni una gota de las pronosticadas por los madriles... alguien se las debió de beber antes de llegar por aquí. La máxima prevista para hoy será de 13ºC.

Este fin de semana estuve en el cine viendo "Licorice pizza" (2021), de Paul Thomas Anderson, y con Alana Haim, Cooper Hoffman, Sean Penn, Tom Waits, Bradley Cooper, Ben Safdie, y Maya Rudolph. De este director había visto seis de sus ocho anteriores largos: la magistral "Magnolia" (1999), "Embriagado de amor" ("Punch-drunk love", 2002), "Pozos de ambición" ("There will be blood", 2007), "The master" (2012), "Puro vicio" ("Inherent vice", 2014), y "El hilo invisible" ("Phantom thread", 2017).

Año 1973 en una localidad californiana. Un adolescente de 15 años se enamora perdidamente de una joven unos años mayor que él y que conoce en el instituto. Se lanza a por ella con desparpajo e inician una peculiar relación con diversos vaivenes, soñando y corriendo juntos (o separados), uniéndose para diversos proyectos empresariales más o menos extravagantes que el avispado chaval va pergeñando, creciendo a medida que se van enamorando más profundamente el uno del otro, sin ser muy conscientes de ello al principio.

Buena película (nota: 6), que me gustó menos de lo que esperaba, a tenor de las expectativas que me creé tras ver su tráiler promocional, con las intrínsecas maneras de narrar de su director y guionista. Historia que exhala optimismo y ganas de vivir, de amores y emociones juveniles, de sus vivencias de descubrimiento casi que iniciático y de maduración, de sus ideales y sueños de vida futura, viviendo con sus brazos y corazones abiertos de par en par, siempre confusos. Comedia romántica muy poco o nada convencional, con algunos momentos sueltos realmente maravillosos, gracias al magnetismo que rezuman sus dos protagonistas, muy especialmente ella, realmente encantadora.

Ahora unas pocas porciones de sabiduría ajena que os regalo, de entre las que por ahí encontré:

 - "El regalo de la felicidad pertenece a quienes lo sacan de su envoltorio".  (Anónimo).

 - "Un corazón es una riqueza que no se vende ni se compra, pero que se regala".  (Gustave Flaubert).

 - "[...] Estás enamorado. Se ríe de tus versos.
Tus amigos se van, estás insoportable.
¡Y una tarde, tu adorada, se digna en escribirte...!
Y esa tarde... te vuelves al café, luminoso,
pides de nuevo jarras llenas de limonada...
Con diecisiete años no puedes ser formal,
cuando los tilos verdes coronan la alameda".  (Arthur Rimbaud).

Besos y abrazos,

Don.

_____

miércoles, 9 de febrero de 2022

¡Ojo, este matutino nos ama!

¡Buenos días!

Cuidadito, cuidadito, no vaya a ser que nos vaya a sacar los cuartos a poco que pequemos de ingenuos y caigamos rendidos ante sus amorosos encantos... aunque creo que no, pues lo hacen todo de buena fe, y gratis, "ars gratia artis", ya que ni cobran por sus servicios ni esperan donativo de buena voluntad alguno. Desde luego no "dei gratia", que seguro nos sonsacarían soberanamente lo que sea. Pues sigo sin quitar los ojos del radiante azul celeste que todos estos días nos bendice, no vaya a ser que atisbara alguna nube que presagiara algo de la tan necesaria lluvia, pero nada, más de lo mismo, con una máxima prevista para hoy por los madriles de 16ºC. Así que a disfrutar de este cielo raso en esta muy benevolente jornada que se nos presenta.

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo "Los ojos de Tammy Faye" ("The eyes of Tammy Faye", 2021), de Michael Showalter, y con Jessica Chastain y Andrew Garfield. De este director había visto uno de sus anteriores largos, "La gran enfermedad del amor" ("The big sick", 2017).

Tammy Faye es una joven de origen humilde con grandes inquietudes religiosas que conoce a un joven como ella. Se casan y comienzan a trabajar predicando de pueblo en pueblo y al poco entran a trabajar en una televisión religiosa creando un programa que enseguida tuvo gran éxito, donde lanzaban proclamas de amor, compasión, aceptación y prosperidad. Se independizan y al poco logran levantar casi de la nada la mayor cadena de televisiones religiosas, presente en muchos países del mundo, Sus ambiciones no se quedaron solo en la telepredicación, sino que también crearon un parque temático, hogares para gente necesitada... mientras se hacían inmensamente ricos con las donaciones recibidas para su iglesia. Pero todo este emporio se vino abajo debido a flagrantes irregularidades económicas (apropiaciones indebidas), y otros escándalos, cayendo en desgracia.

Película normalita (nota: 5), que sin embargo vi sin desagrado, este biopic sobre una famosa telepredicadora estadounidense durante los años 70 y 80. Ni el tema me atrajo especialmente ni su desarrollo fue más allá de lo convencional, salvo algunos momentos de sátira social, especialmente punzante contra las iglesias sacacuartos (todas) y su recalcitrante conservadurismo (misógino y contra homosexuales y demás) incapaz de aceptar al otro, lo que deviene en herejía de la palabra cristiana y su amar al prójimo como a uno mismo. Impresionante actuación de la Chastain, irreconocible tras capas y capas de maquillaje, que además cantaba, y muy bien, algunas canciones. Este retrato de una peculiar mujer estuvo varias veces, sobre todo hacia el final, al borde de caer en la tentación de ser un expiatorio de sus culpas, y con la duda me quedé de si fue así o no.

Pues ahí os dejo estas citas de sabiduría ajena, que espero miréis con buenos ojos:

 - "A los ojos de los hombres, el éxito es un dios".  (Esquilo).

 - "Cuando los labios callan, los ojos hablan".  (Refrán).

 - "Ten tus ojos muy abiertos antes del matrimonio, y medio cerrados después de él".  (Benjamín Franklin).

 - "No nos cansemos de sembrar en nuestro camino simientes de benevolencia y de simpatía. Se perderán muchas, sin duda alguna, pero con que una sola fructifique, perfumará nuestro camino y alegrará nuestros ojos".  (Madame de Swetchine).

Besos y abrazos,

Don.

_____

martes, 8 de febrero de 2022

Matutino discursivo

¡Buenos días!

Brindo por este matutino en el que hoy también desparramo mis reflexiones, cuando no mis desvaríos, y le deseo tan larga vida como a los que le precedieron, a los matutinos, que no a mi discurso, que si se alarga se hará pesado. Así que paso sin más a la crónica meteorológica, en la que poca novedad hay con respecto a pasadas jornadas, con otro día de calma chicha invernal, por decir algo, que casi más parece temprana primavera, con esta madrugada de cielo raso sin heladas, y sol radiante que elevará las temperaturas hasta los 17ºC previstos por los madriles.

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo "El brindis" ("Le discours", 2020), de Laurent Tirard, basada en la novela gráfica homónima (en francés) de Fabcaro (Fabrice Caro), y con Benjamin Lavernhe, Sara Giraudeau, Kyan Khojandi, Julia Piaton, François Morel, y Guilaine Londez. Es la primera película que veo de este director francés.

Un treintañero, un tanto hipocondríaco, neurótico e inmaduro y con cierta dificultad para relacionarse socialmente, y que todavía vive con sus padres, acaba de ser dejado por su novia, en principio por una temporada, para reflexionar sobre su relación, lo que le deja bastante abatido y sin saber qué hacer. Un mes después, mientras duda si retomar el contacto con ella, aunque está desesperado por hacerlo, en una comida familiar con sus padres, hermana y futuro cuñado, este le pide que haga el discurso principal en la inminente boda con su hermana, a quien le haría mucha ilusión... entra en pánico escénico pues tiene nulas habilidades sociales y elucubra sobre como librarse de tal engorro.

Una muy buena película (nota: 7), divertida, sin carcajadas, a lo sumo con sonrisas cómplices, que me gustó mucho por su tono, por su mirada sobre las cuestiones que trata y por sus ingeniosos diálogos. A través de su protagonista en crisis existencial, en cuya cabeza bullen caóticas ideas, que por momentos para la acción e interpela al espectador, y de una narración un tanto sincopada, nos habla de amor y desamor y de relaciones familiares y sus dimes y diretes.

Pues el discurrir de este matutino va llegando a su final, espero que se os haya hecho breve, así que ahí os dejo con estas citas de sabiduría ajena que espero nos hagan cavilar:

 - "Sermón, discurso y visita, media horita".  (Refrán).

 - "Es preferible confiarse a un caballo sin brida que a un discurso sin orden".  (Teofrasto).

 - "Suelen hacer falta tres semanas para preparar un discurso improvisado".  (Mark Twain).

 - "Los discursos dulces adormecen la conciencia y profundizan nuestra ignorancia, e ignorancia significa estancamiento y retroceso".  (Helena Roerich).

Besos y abrazos,

Don.

_____

lunes, 7 de febrero de 2022

Conduzco mis matutinos

¡Buenos días!

No permito que nadie más lo haga, pero ellos insisten en conducirse por sí mismos, incluso llevándome de acá para allá de cuando en cuando en cuanto me descuido, y me dejo hacer, que me guían y manejan con suavidad, sin brusquedades, hasta que me apeo tras los besos y abrazos. Pues por lo que respecta al invierno, que estamos en él según calendario, este se conduce fuera de ruta, por otros derroteros distintos a los esperados, con estos días casi que primaverales, muy soleados, de madrugadas ya lejos de la helada (4ºC hoy) y con máxima prevista por los madriles de 17ºC.

Este fin de semana estuve en el cine viendo "Drive my car" ("Doraibu mai kâ", 2021), de Ryûsuke Hamaguchi, basado en un relato corto homónimo de Haruki Murakami, y con Hidetoshi Nishijima, Tôko Miura, Reika Kirishima, Masaki Okada, Sonia Yuan, y Satoko Abe. Es la segunda película que veo de este director japonés, tras la que vi hace pocos meses, deliciosa, "La ruleta de la fortuna y la fantasía" ("Guzen to sozo", 2021).

Un afamado actor y director de teatro está felizmente casado con una guionista de series de televisión. Se quieren. Un día él la descubre por casualidad haciendo el amor con otro hombre, pero no le dice nada a ella, quien pocos meses después fallece tras sufrir un ictus. Dos años después es invitado a un festival de teatro en Hiroshima, donde montará una adaptación de "Tío Vania" de Antón Chéjov con actores de diversas nacionalidades, declamando cada uno en su lengua materna, y le asignan como chófer a una joven muy reservada. Durante los trayectos del hotel al teatro para los ensayos, y vuelta, él va repasando la obra ante el silencio de la conductora, pero poco a poco sus conversaciones irán a más, abriendo ambos sus corazones y enfrentándose a su doloroso pasado.

Buena película (nota: 6), que no me condujo hacia los altares cinéfilos que yo esperaba dadas las críticas recibidas y la excelentísima anterior película que vi de su director, ambas hechas con los mismos mimbres, pero esta no me acabó de funcionar del todo, y eso que el cineasta la manejó con la misma suavidad y dulzura que su precedente... Sin embargo disfruté de algunos excelsos momentos, intimistas, de su ritmo pausado y sutileza, de su elegancia, con los que mantuvo mi atención sin desfallecer a pesar de su desmedido metraje y conatos de vanidad, y no solo por la ósmosis de situaciones entre "Tío Vania", obra que vi en el teatro hace 20 años, y la película (para mi gusto, sobredosis de escenas de ensayos de la obra de Chéjov). Nos habla de duelos, de dificultades de comunicación (no necesariamente por usar distintos lenguajes) que nos abocan a la soledad, de la culpa (de la que asumimos intrínsecamente), y de perdonarse a uno mismo. También de como el arte puede llegar ser terapéutico y curar nuestras heridas del alma.

Pues paramos motores, que hemos llegado al destino por hoy, y os dejo con estas citas de sabiduría ajena, rematando con el principio del alegato final de "Tío Vania", dicho por su sobrina, no sin antes recordaros que volveré a recogeros una mañana de estas, así que ya me veréis llegar al volante del siguiente matutino:

 - "Espero que vivas una vida de la que estés orgulloso. Si descubres que no es así, espero que tengas la fuerza para empezar de nuevo".  (Francis Scott Fitzgerald).

 - "Como un día bien empleado procura un dulce sueño, así una vida bien utilizada conduce a una dulce muerte".  (Leonardo da Vinci).

 - "¡Qué se le va a hacer!... ¡Hay que vivir!... ¡Viviremos, tío Vania!... ¡Pasaremos por una hilera de largos, largos días... de largos anocheceres... soportando pacientemente las pruebas que el destino nos envíe!... ¡Trabajaremos para los demás, lo mismo ahora que en la vejez, sin saber de descanso!... ¡Cuando llegue nuestra hora, moriremos sumisos, y allí, al otro lado de la tumba, diremos que hemos sufrido, que hemos llorado, que hemos padecido amargura!... ¡Dios se apiadará de nosotros, y entonces, tío... querido tío... conoceremos una vida maravillosa... clara... fina!... ¡La alegría vendrá a nosotros y, con una sonrisa, volviendo con emoción la vista a nuestras desdichas presentes... descansaremos! [...]".  (Antón Chéjov).

Besos y abrazos,

Don.

_____

jueves, 3 de febrero de 2022

Matutino requetelimpio

¡Buenos días!

Otra mañana más que me meto en faena con otro de estos matutinos a ver si consigo dejarlo como los mismos chorros del oro. Así que con denodado esfuerzo, siempre satisfecho por los logros obtenidos, comienzo a dar a la tecla como si no hubiera un mañana, hasta los reconfortantes besos y abrazos del final, con los que me siento suficientemente pagado, que todo esto lo hago de gratis, por puro placer, que ya tengo otro trabajo que me mantiene. Pues con el cielo bastante limpio de nubes, si exceptuamos las neblinas que nos emborronan algo la vista, se nos ha despertado la mañana (4ºC), que espero que dé paso a otro radiante día de sol, más primaveral que invernal, de 18ºC previstos por los madriles, situación muy lejana a los cánones de la estación en la que se supone que estamos por calendario.

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo "En un muelle de Normandía" ("Le quai de Ouistreham", 2021), de Emmanuel Carrère, basada en la novela homónima de Florence Aubenas, periodista de investigación, y con Juliette Binoche, Hélène Lambert, y Léa Carne. Es la tercera película, y primera que veo, de este director francés, no tan director como escritor (ha ganado el premio Princesa de Asturias de las Letras de 2021) y guionista.

Una reconocida autora quiere escribir un libro sobre la precariedad laboral y dar a conocer al gran público esta situación, y para documentarse decide trasladarse a una ciudad portuaria del norte del país, donde nadie la conoce, y vivir esa realidad por ella misma, así que se inscribe en una oficina de empleo, donde acredita nula experiencia laboral previa, y lo único que pueden ofrecerle es trabajar como limpiadora en una empresa del ramo. La despiden a los pocos días por protestar por las condiciones laborales y consigue otro trabajo, como limpiadora de camarotes y baños de los ferrys que cruzan el Canal de la Mancha, el peor trabajo posible del sector, al que acuden los que no tienen otra opción mejor, con un horario infernal, un trabajo desbordante y extenuante, a destajo, y cobrando el salario mínimo, lo que obliga a mirar cada céntimo ingresado y gastado para llegar a fin de mes. A pesar de su durísima experiencia, se reconfortará en la solidaridad y estrecha amistad que encontrará entre sus compañeras.

Estupenda película (nota: 8) que me fue ganando poco a poco, con el sudor de su frente, a base de sincera realidad y corazón, potente historia, espléndidamente escrita, que rezuma autenticidad por todos y cada uno de sus poros y que todo el mundo debería ver. Salvo la Binoche, el resto del elenco son actores no profesionales, incluso algunos representándose a sí mismos. Especie de docudrama, realismo social que nos habla de explotación laboral y en el que subyace el principio de incertidumbre, según el cual el investigador siempre estará en la duda de si su observación no estará condicionando el comportamiento de lo observado en lo que se inmiscuye.

Bueno, esta jornada matutina está a punto de finalizar, no sin antes unas pocas citas de sabiduría ajena de propina:

 - "Los buenos escritores tocan la vida a menudo. Los mediocres la rozan rápidamente. Los malos la violan y la abandonan a las moscas".  (Ray Bradbury).

 - "El escritor sólo puede interesar a la humanidad cuando en sus obras se interesa por la humanidad".  (Miguel de Unamuno).

 - "El corazón, limpio, y la cabeza, alta".  (Anónimo).

Besos y abrazos,

Don.

_____

miércoles, 2 de febrero de 2022

Me salió bien este matutino

¡Buenos días!

Este y todos, que entraron y salieron de mi vida, y de los que disfruté mientras estuvieron conmigo por el breve lapso que nos tocó compartir. Luego nos despedimos y a veces revisito a alguno de ellos, donde quiera que estén, en nombre de todos los demás. Pues estos días de invierno parece que no van demasiado bien, según lo que se espera de ellos, porque aunque las madrugadas son frías, una pizca por encima de la helada, el mediodía más parece radiante primavera que otra cosa. Por ejemplo, hoy por los madriles nos hemos despertado con 3ºC y la máxima prevista será de unos muy inusuales 20ºC, con sol a raudales.

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo "Todo ha ido bien" ("Tout s'est bien passé", 2021), de François Ozon, basado en la novela homónima de Emmanuèle Bernheim, que retrata un pasaje de su vida, y con Sophie Marceau, André Dussollier, Geraldine Pailhas, Charlotte Rampling, Eric Caravaca, Hanna Schygulla, y Grégory Gadebois. De este espléndido director había visto diez de sus anteriores largos, a saber: "Verano del 85" ("Été 85", 2020), "Gracias a Dios" ("Grâce à Dieu", 2018), "El amante doble" ("L'amant double", 2017), "Frantz" (2016), "Una nueva amiga" ("Une nouvelle amie", 2014), "Joven y bonita" ("Jeune & jolie", 2013), la magistral "En la casa" ("Dans la maison", 2012), "Potiche, mujeres al poder" ("Potiche", 2010), "Swimming Pool (La piscina)" ("Swimming pool", 2003), y "8 mujeres" ("8 femmes", 2001).

Emmanuèle, una novelista con una vida feliz, recibe la llamada de su hermana diciéndole que el octogenario padre de ambas está ingresado en el hospital tras haber sufrido un severo ictus. Cuando este despierta y toma conciencia de su debilidad e invalideces causadas por el derrame cerebral le pide a su hija que le ayude a morir.

Buena película (nota: 6), que no me gustó tanto como otras anteriores de este brillante director, buena parte de ellas excelentes para mí. Además de mostrarnos la peculiar relación de un padre con sus dos hijas, desbordadas emocionalmente por su petición, con una madre bastante ausente, nos habla, obviamente de eutanasia, de muerte voluntaria asistida, y de sus dilemas morales, con un tono muy contenido, nada melodramático y con su puntito de humor, muy negro, el que aporta el personaje del padre de la protagonista con su retranca, gran personaje espléndidamente interpretado.

Ahora, antes de irnos buenamente de este matutino, ahí os dejo este par de citas de sabiduría ajena, creo que bastante estoicas, como la actitud del personaje del padre en la película:

 - "La filosofía no promete asegurar nada externo al hombre: en otro caso supondría admitir algo que se encuentra más allá de su verdadero objeto de estudio y materia. Pues del mismo modo en que el material del carpintero es la madera, y el del escultor el bronce, el objeto del arte de vivir es la propia vida de cada cual".  (Epicteto).

 - "Necesitamos la vida entera para aprender a vivir, y también -cosa sorprendente- para aprender a morir".  (Séneca).

 - "Lo mismo es nuestra vida que una comedia; no se atiende a si es larga, sino a si la han representado bien. Concluye donde quieras, con tal de que pongas buen final".  (Séneca).

Besos y abrazos,

Don.

_____

martes, 1 de febrero de 2022

Todos matutinean, ¿verdad?

¡Buenos días!

Quizá no tantos, seguro que yo y alguno más de los que pasen por esta barriada matutina, en la que todo me parece de color de rosa aunque, no nos engañemos, el resto de colores ya los veré cuando salga de esta burbuja matutina en la que por un rato habito. Mientras tanto seguiré indagando por entre sus recónditos recovecos a ver que averiguo más de ellos. Por lo demás, seguimos de días de invierno que parecen mentira, al menos en torno al mediodía, con ese radiante sol y máximas superando la quincena, la niña bonita, queriendo aparentar ser despampanante primavera con pimpollos vegetales ya apuntando maneras.

Este fin de semana estuve viendo una serie de televisión, en Movistar+. Se trató de "Todos mienten" (2022), creada y dirigida por Pau Freixas, e interpretada por Irene Arcos, Natalia Verbeke, Eva Santolaria, Miren Ibarguren, Leonardo Sbaraglia, Juan Diego Botto, Ernesto Alterio, Jorge Bosch, Lucas Nabor, Carmen Arrufat, Berta Castañé, y Amaia Salamanca. Consta de una temporada de 6 capítulos de en torno a 50 minutos de duración cada uno, que vi en dos arreones.

Cuatro amigas desde la infancia viven con sus respectivas familias en una lujosa urbanización de chalets a orillas del Mediterráneo. Sus idílicas vidas se ven zarandeadas cuando circula por las redes un vídeo en que una de ellas, profesora en el instituto local, y uno de sus alumnos, de apenas 18 años cumplidos e hijo de otra de ellas, mantienen relaciones sexuales. Todos la repudian, incluida su propia familia, pero la cosa se complica aún más cuando aparece al fondo de un acantilado el cadáver de un joven de la urbanización... misterio difícil de resolver porque preguntes a quien preguntes todos mienten.

Una estupenda serie (nota: 8), muy divertida con sus golpes de humor, entretenidísima, con la que me lo pasé pipa, crecientemente adictiva, como el comer pipas, que te engancha y mantiene en vilo todo el rato, este enrevesado thriller que va destapando los secretos que sus protagonistas intentan ocultar a base de una mentira tras otra, consciente e inconscientemente dichas, pequeñas y grandes mentiras, incluso piadosas, tanto para engañar a los demás como a ellos mismos, según los casos y el momento, quizá dichas para aparentar. A la par que se critican ciertos aspectos de nuestras relaciones sociales, de trasfondo, y hacia el final, subyace el tema de los abusos sexuales. Grandes actuaciones de sus protagonistas. Os la recomiendo, seguro que os lo pasaréis tan fenomenal como yo.

Ahora ahí os dejo estas citas de sabiduría ajena que, en verdad os digo, me han enamorado, y os garantizo que resuelven algún enigma que nos pudiera inquietar:

 - "Porque tienen de su parte
mucho poder las mentiras
cuando parecen verdades".  (Pedro Calderón de la Barca).

 - "A veces pienso —reflexioné en voz alta— que se miente por incapacidad de pedir a gritos que los demás te acepten como eres".  (Carmen Martín Gaite).

 - "El hombre prefiere que se digan cien mentiras acerca de él, a que se divulgue una sola verdad que desee tener oculta".  (Samuel Johnson).

Besos y abrazos,

Don.

_____