martes, 28 de febrero de 2017

Navegación matutina en psique y alma

¡Buenos días!

Dejo volar mi imaginación por tierra, mar y aire, y sin mover mi material ser, a bordo de estos matutinos, desparramo sobre lo que sea y me desparramo por doquiera que se me antoje... y sin necesidad de nada más que no sean los naturales psicotrópicos producidos por mi animada actividad cerebral... Así que, casi abducido de mi cuerpo, apenas siento el viento que da sensación de mayor frescor en esta mañana de invierno que en los pasados días de tibieza de la semana anterior. Desde luego sin llegar a ver grajos volando bajo, pues no hace un frío del carajo, que la máxima prevista para hoy será de 14ºC, con mínimas bastante lejos de las heladas, ya olvidadas hace mucho.

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo una de animación, para adultos. Se trató de "Psiconautas. Los niños olvidados", de Pedro Rivero y Alberto Vázquez, adaptación cinematográfica del cómic homónimo del segundo, y que hace un par de semanas ganó el Goya al mejor largo de animación. Es el primer film que veo de cualquiera de sus dos directores, de quienes tampoco había leído ninguna de sus historietas gráficas.

Tras un cataclismo medioambiental en la isla que habitan, dos chavales adolescentes, que en su día fueron novios, se rebelan contra el mundo que han heredado. Ambos han perdido a sus padres, los de él por fallecimiento, los de ella porque no la comprenden, y decide irse de la isla junto a unas amigas en busca de un mundo mejor. Él, abrumado por sus lúgubres pesares, intentará ayudarla en su propósito, mientras trata de luchar contra sus demonios internos y de huir de quienes le persiguen para matarle.

Ni me gustó ni me pareció gran cosa (nota: 3) este film de animación, ni por su guión deslavazado, con una historia principal y otras anejas sin demasiada conexión, informe amalgama de cosas, y también absurdo las más de las veces, y naif en otras, que apenas nada me dijo e hizo pensar en que su creador estaba bajo los efectos de alguna sustancia extraña. Además el dibujo era muy pobre y el montaje casi a trompicones, como vuelan los grajos cuando hace un frío de coj... según el chistoso aforismo rimado. Tan solo algunos breves destellos de interés en algunas tibias reflexiones que me indujeron sus metáforas. Historia bastante tétrica, de personajes que son animales antropomorfos, como en las de Disney, pero en las antípodas de su meloso acaramelamiento.

Ahora unas citas de sabiduría ajena, espero que buena brújula que nos marque una buena derrota (en su marinera acepción):

 - "Cuando más desquiciada está la vida de la mente, más abandonada a sí misma queda la máquina de la materia".  (Goethe).

 - "Para entender el corazón y la mente de una persona, no te fijes en lo que ha hecho, no te fijes en lo que ha logrado, sino en lo que aspira a hacer".  (Khalil Gibran).

 - "Nadie acierta antes de errar
y aunque la fama se juega,
el que por gusto navega
no debe temerle al mar".  (José Hernández).

 - "Los niños son el recurso más importante del mundo y la mejor esperanza para el futuro".  (John Fitzgerald Kennedy).

 - "Nunca será tarde para buscar un mundo mejor y más nuevo, si en el empeño ponemos coraje y esperanza".  (Alfred Tennyson).

Besos y abrazos,

Don.
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jueves, 23 de febrero de 2017

Matutino agarrado

¡Buenos días!

Pues ya que estamos no sé si ponerme a bailar con él algo romanticón, bien pegaditos, incluso cogiditos de las manos, para demostrarle el cariño de manual que les tengo por tanto bien que me dan, sin escatimar lo más mínimo en su desprendida generosidad. Las nubes parecen agarrarse cada vez más al sol, en mayor número conforme avance el día, y de tan estrujadas que parecerán estar, darán de sí desinteresadamente algunas gotas para esta tarde, dejándolas caer como si tal cosa. El día también nos regala unas tibias temperaturas, más primaverales que invernales, con 17ºC de máxima, que hacen que tengamos ganas de donar nuestros abrigos a quien sea menester.

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo "Manual de un tacaño" ("Radin!"), de Fred Cavayé, y con Dany Boon, Laurence Arné, y Noémie Schmidt. Es el cuarto largo de este director francés, de quien había visto su segundo, "Cuenta atrás" ("À bout portant", 2010). Además de los cuatro en solitario, participó dirigiendo uno de los episodios, el prólogo, de los que componían el film coral "Los infieles" ("Les infidèles", 2012).

El primer violinista de una orquesta es un redomado tacaño y bastante huraño, cuyo único objetivo en la vida es gastar lo menos posible. Pero su vida comenzará a cambiar el día que llega una nueva violonchelista a la orquesta, tímida y que le admira, de quien se acaba por enamorar. Además, ese mismo día se planta en su casa una hija adolescente que no sabía que tenía y que anhela conocerle. Ambas, que le quieren, no saben de su proverbial racanería, e incluso le creen un tipo generoso, lo que le obligará mentir para no quedar en evidencia ante ellas.

Una película normalita (nota: 5), entretenida comedia con un muy buen arranque, la presentación del personaje, de su más acusado rasgo, y algunos otros divertidos momentos repartidos por el metraje, que incluso me hicieron reír. El resto no me hizo especial gracia.

Ahora un par de citas de sabiduría ajena, de las que he ido agarrando por aquí y por allí, y que ahí os dejo bien juntitas para vuestro generoso disfrute:

 - "Es una gran locura la de vivir pobre para morir rico".  (Juvenal).

 - "La avaricia es un continuo vivir en la pobreza por miedo a ser pobre".  (San Bernardo de Claraval).

Besos y abrazos,

Don.
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miércoles, 22 de febrero de 2017

Sosegado libre albedrío matutino

¡Buenos días!

Otra soleada mañana de ¿invierno?, con algo de brisa, alguna nube en el cielo y máxima prevista para hoy por los madriles de 18ºC, más bien de encendida primavera, que invita a retozar tranquilamente... ¡qué carajo!, cual loca cabritilla por entre sotos y prados, y a disfrutar con entera libertad de lo que nos toca vivir, sin más ataduras que las que nos queramos poner a nosotros mismos, a veces más prietas y agobiantes que las del resto, con sus expectativas sobre nosotros, que suelen condicionar nuestras elecciones.

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo "Hedi, un viento de libertad" ("Inhebek Hedi"), de Mohamed Ben Attia, y con Majd Mastoura, Rym Ben Messaoud, Sabah Bouzouita, Hakim Boumessoudi, y Omnia Ben Ghali. Es el primer largo de este director tunecino.

Hedi es un tímido y apocado veinteañero que trabaja como agente comercial de un concesionario de coches, y que en menos de una semana va a casarse con la muy guapa novia que le buscó su madre y con la que lleva tres años de prometido. Pero en su viaje de trabajo de esa semana, se enamora de una de las animadoras del hotel en que se aloja, todo un flechazo, lo que le hará replantearse toda su hasta ahora resignada vida, profundamente desmotivado e insatisfecho con su situación laboral y personal, más dirigida por su tradicional madre metomentodo que por él mismo, e intentará rebelarse.

Una muy buena película (nota: 7), plena de silencios del introvertido protagonista, cuyo nombre significa calma, tranquilidad, que empezó no enganchándome demasiado, cosas de sus pocos aderezos formales, pero que conforme avanzaba fue ganando enteros para mí. Historia de un tipo bastante anodino, pelín ingenuo al principio, de su amor fulgurante y arrebatado, metáfora de todo un país, Túnez, y su primavera agostada que no acaba de florecer, que se debate entre trasnochadas tradiciones que les lastran pero que hacen sentir aparente seguridad y sus deseos de libertad que provocan miedo al abismo por no saber si sabrán volar libremente o caerán vertiginosamente.

Ahora unas citas de sabiduría ajena, soplos de aire fresco para nuestras entendederas, que las calmen cuando vayan a encenderse, y las reactiven cuando amaguen conformismo:

 - "El río Guadalquivir
se quejaba una mañana:
me tengo que decidir
entre Cazorla y Doñana
y no sé cómo elegir".  (Rafael Alberti).

 - "¿Qué hombre inteligente si le dieran a escoger entre vivir sin rosas o vivir sin berzas no correría a asegurar las berzas?".  (George Bernard Shaw).

 - "Cada elección tiene su anverso, es decir, una renuncia, por lo que no hay diferencia entre el acto de elegir y el acto de renunciar".  (Italo Calvino).

 - "Del cielo es la inclinación;
el sí o el no todo es mío;
que el hado en el albedrío
no tiene jurisdicción".  (Juan Ruiz de Alarcón).

Besos y abrazos,

Don.
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martes, 21 de febrero de 2017

Doliente entereza matutina

¡Buenos días!

A nadie he perdido, nada me duele, mucho menos cuando entro en estos divinos matutinos, que siempre me ayudan a mantener mi estado de ánimo con serena firmeza ante cualquier eventual pesar o regocijo. El tiempo de estos alegres días de plácido invierno, con sol a raudales y temperaturas al alza, cada vez más rayanas con las de la primavera, ayuda también lo suyo a que nos vengamos arriba para afrontar con la mejor de nuestras energías todo lo que tenga a bien depararnos nuestro devenir.

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo "Jackie", de Pablo Larraín, y con Natalie Portman (tan espléndida como siempre), Billy Crudup, Peter Sarsgaard, Greta Gerwig, y John Hurt. Es el séptimo largo de este director chileno, de quien había visto sus tres anteriores, "Neruda" (2016), "El club" (2015) y "No" (2012).

Una semana después del asesinato del presidente estadounidense John Fitzgerald Kennedy, su viuda, Jackie, concede una entrevista a un periodista, en la que hará un repaso de los sucesos acaecidos en los días inmediatamente anteriores a partir del trágico suceso y mostrará, solo lo que quería para proyectar la imagen deseada, el modo en que tal hecho afectó a su vida privada y pública, y la desconcertada desolación que le produjo, que trató de superar con la mayor de las dignidades.

Una muy buena película (nota: 7) este peculiar biopic, distinto, poco o nada canónico, de sobresalientes factura y modo de narrar, algo frío y distante a pesar de la íntima cercanía de la cámara con la protagonista, un esbozo de su vida, que casi la abarca en su total plenitud, de lo que pudo pasar por la cabeza de esta mujer en esos amargos días, retratada en tan solo un sutil trazo, una desconocida para la gran mayoría, aunque icono del s.XX, ya irreal y mitificado de serena realeza, alteza, que no altanería, de toda una diva, en el divino sentido del término, de lo más humana, que brevemente habitó en el Olimpo (o en Camelot).

Ahora unas citas de sabiduría ajena que, no me duelen prendas en reconocerlo, seguro hacen que vista con la mejor de las enterezas para abrigarme de lo que sea, sea o no prêt-à-porter:

 - "La vanidad nos persigue hasta en el lecho de la muerte. La soportamos con entereza porque deseamos superar su terrible grandeza y cautivar la admiración de los espectadores".  (Santiago Ramón y Cajal).

 - "Lo admirable es que el hombre siga luchando y creando belleza en medio de un mundo bárbaro y hostil".  (Ernesto Sábato).

 - "La vida es como una bicicleta. Para mantener el equilibrio tienes que seguir adelante".  (Albert Einstein).

Besos y abrazos,

Don.
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lunes, 20 de febrero de 2017

No me canso de reutilizar la chatarra matutina

¡Buenos días!

Sí, casi una mañana tras otra entro en esta madriguera matutina, husmeando entre los residuos de mis neuronas y sus más recónditos recovecos, que recojo y vierto aquí para sacar este extraño artilugio, como cualquier otro de mis matutinos, recomponiendo en un ciclo sin fin, que jamás desfallece, las veintitantas letras básicas de nuestro abecedario, o mis oxidadas ideas y reflexiones, dándoles, creo, nuevo lustre... como el que nos da cada día este radiante sol que hoy nos ilumina y relaja de nuestras fatigas, con temperaturas que ya huelen a primavera... 14ºC de máxima previstos en los madriles para hoy... y subiendo para próximos días.

Este fin de semana, además de la película glosada antes de ayer, estuve dos veces en el teatro. Pero vamos por partes. En primer lugar estuve viendo el espectáculo "Cármina Burana" de La Fura dels Baus, basado en la portentosa pieza musical homónima compuesta por Carl Orff, que ya oí en 2009, sin aditamentos teatrales, en el Palau de la Música de Barcelona, interpretada por una orquesta sinfónica y coro polifónico de Ucrania. Os recomiendo que cuando podáis vayáis a un auditorio a oírla en directo y os dejéis apabullar por los tropecientos intérpretes (voces y músicos), sobre todo por su inicio y clímax final, la pieza "O fortuna", que hasta los más legos en música conocemos.

Muy buen espectáculo (nota: 7), el primero que veo de "La Fura dels Baus", que bien podría traducirse como "el hurón del vertedero" y, cambiando algunas letras, como "la furia de los toros" ("la fúria dels bous"), y que ambas encajan muy bien con el alma del grupo, por sus artefactos sacados de husmear inquietamente entre la chatarra y sus furiosamente arrebatadas representaciones. Aunque esta estaba bastante domesticada. Además, se pierde parte de la potencia de la obra musical original, aquí arreglada pues no hay orquesta sinfónica, porque el coro no era de profesionales (coro universitario), y porque la performance distrae algo de la música. Además, está subtitulada para entender el texto en latín (y alemán y francés antiguo) de los poemas o cánticos medievales de los siglos XII y XIII que conforman la obra.

En segundo lugar estuve viendo la actuación del mítico dúo cómico Faemino y Cansado. Amén de las muchas en televisión, cuarta vez que los veo en teatro, siendo las tres anteriores en Burgos (2000, 2003 y 2009). Tan geniales como siempre con su humor de surrealistas absurdos reducidos desde la realidad, no me reí tanto como en anteriores ocasiones, no sé si porque ya no me sorprenden como antaño o porque no estaba con mi mente tan inquieta como otras veces. Muy buena actuación (nota: 7).

Ahora unas citas de sabiduría ajena, de las que no me canso de poneros aquí, y que encuentro rebuscando por ahí:

 - "El principio de la actividad es el amor. El amor llena con su presencia el universo entero, mueve sus resortes y les hace concurrir a un admirable concierto".  (Platón).

 - "Los hombres creen buscar sinceramente el reposo, y en realidad no buscan sino agitación".  (Blaise Pascal).

 - "Conclusión es el lugar donde llegaste cansado de pensar".  (Anónimo).

Besos y abrazos,

Don.
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sábado, 18 de febrero de 2017

Matutino que cura trivialidades

¡Buenos días!

Otra mañana más en la que por aquí me paso para tratar de sanar mis pequeños males, trascendentes o intrascendentes, según se mire, y aunque muchas veces esté convencido de que esto no es más que un placebo, parece funcionarme, lo que no garantiza en absoluto que lo haga en los demás, así que no lo recomiendo, allá cada cual. La mañana se nos ha aparecido con nubes y claros, ratitos de sol que nos masajean y alivian, y tal vez esta tarde llueva algo, revitalizante linimento que hará lo propio.

Este fin de semana estuve en el cine viendo "Lo que de verdad importa" ("The healer"), de Paco Arango, y con Oliver Jackson-Cohen, Camilla Luddington, Jonathan Pryce, y Kaitlyn Bernard. Es el segundo largo, y primero que veo, de este director mexicano, cuyos beneficios irán destinados en su totalidad a una fundación que cuida de niños con cáncer, o algo así.

Un joven inglés, todo un tarambana, ligón y manirroto, que regenta un pequeño negocio de reparación de electrodomésticos en Londres que está al borde de la ruina, "The healer" ("El curandero"), recibe la inesperada visita de un tío del que no sabía de su existencia, y que le propone saldar todas sus deudas a cambio de que se vaya a un pequeño pueblo de Canadá, lugar de origen de su familia, y permanezca allí al menos durante un año. Al poco de llegar, empezarán a suceder a su alrededor extraños fenómenos, como que la gente que está cerca de él se cura inexplicablemente de sus enfermedades con su mera presencia.

Tontorrona comedia romántica (nota: 2) de loables propósitos benéficos, y apenas nada más. Guión ramplón y sonrojante (sentí vergüenza ajena), sentimentaloide hasta la más instantánea de las ranciedades, de risas de lo más tontas (había gente en la sala que se reía no sé de qué). Especie de cuento fantástico con chirriante destilado de moralejas, creo que ni apto para niños, que suelen ser inteligentes, y no sé si para adultos de pocas luces que se dejen engañar por trileros emocionales. Y si no le pongo menos nota es porque hasta en los más densos pajares casi siempre se encuentra algún grano (o aguja) perdido, amén de por su rédito de beneficencia... una buena obra, no precisamente en lo que al cine respecta.

Ahora unas citas de sabiduría ajena, no sé si pastillas de azúcar, que pudieran curarnos de eventuales males, o producirnos una fofa diabetes:

 - "Para cualquier dolencia, es buena la paciencia".  (Refrán).

 - "El cura y el que cura no tienen la hora segura".  (Refrán).

 - "La intención es la que sana, que no el palo de la barca".  (Refrán).

 - "Entre la necedad y la ingenuidad hay diferencias. En la necedad, la idea es débil, el sentimiento fofo y la expresión vulgar, mientras que en la ingenuidad la idea es precisa, el sentimiento vigoroso y la expresión nueva".  (Ernesto Hello).

Besos y abrazos,

Don.
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martes, 14 de febrero de 2017

Dulces sueños matutinos... ¡Mamma mía!

¡Buenos días!

No, no me voy a poner a cantar por Abba, ni a pedir abba, agua quería decir, que ya dejó de llover y, tras varios días haciéndolo, ya no quiero más, no vaya a ser que además me haga pipí en la cama y mi mamá me regañe... zzzzz... No sé si sigo obnubilado por Morfeo o por las somnolientas legañas que todavía se me agarran a la vista, o a mis neuronas, y si aún (o aun) sueño despierto, cosa de lo más normal cada vez que me recojo en el regazo de estos afectuosamente maternales matutinos.

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo "Felices sueños" ("Fai bei sogni"), basado en el best-seller homónimo y autobiográfico de Massimo Gramellini, dirigido por Marco Bellocchio, e interpretado por Valerio Mastandrea, Bérénice Bejo, Guido Caprino, Barbara Ronchi, Nicolò Cabras, y Roberto Herlitzka. De este veteranísimo director italiano tan solo había visto uno de sus anteriores films, "Buenos días, noche" ("Buongiorno, notte", 2003).

Turín, 1969. Un niño de nueve años disfruta de una idílica infancia junto a su madre. Un día, al despertar, tras haberle deseado ella felices sueños la noche anterior, le dicen que ha muerto, y se rebela ante la noticia, no aceptando la realidad, manteniendo además una tensa y distante relación con su padre. La vida sigue, crece, se hace adolescente y luego adulto, convirtiéndose en periodista, primero deportivo, luego corresponsal de guerra en Sarajevo. En 1999, regresa al hogar familiar para venderlo tras la muerte de su padre, y los atormentados recuerdos de entonces le vuelven de golpe, tanto que comienza a sufrir ataques de pánico. Una doctora que le atiende en el primero de ellos, intentará ayudarle a superarlo.

Buena película (nota: 6) en general, este drama con claroscuras pinceladas de maneras expresionistas, y algunos toques de lúgubre humor algo oblicuo, construido como un puzle de saltos temporales, tanto a su infancia, adolescencia como a diversos episodios de su edad adulta, sobre este apesadumbrado niño necesitado de madre, incluso cuando ya casi es cuarentón, introvertido y solitario, incapaz de superar su prematura muerte. Empezó convencionalmente, sin decirme gran cosa, pero a base de momentos sueltos realmente brillantes, más conforme avanzaba la trama, consiguió engancharme, a pesar de descolocarme con otros, casi tanto como lo estaba su protagonista por el peso de la inesperada ausencia materna, que no acaba de superar, hasta que despierte a la vida de su largo sueño.

Ahora algo de sabiduría ajena, que no sé si nos ayudará a mejor conciliar el sueño o a despertar nuestras mentes:

 - "¿Acaso el sueño no es el testimonio del ser perdido, de un ser que se pierde, de un ser que huye de nuestro ser, incluso si podemos repetirlo, volver a encontrarlo en su extraña transformación?".  (Gastón Bachelard).

 - "Si es bueno vivir, todavía es mejor soñar, y lo mejor de todo, despertar".  (Antonio Machado).

 - "Las buenas acciones refrescan la sangre y dan sueños felices".  (Filippo Pananti).

 - "Aunque mis ojos ya no puedan ver ese puro destello, aunque ya nada pueda devolver la hora del esplendor en la hierba, de la gloria en las flores, no hay que entristecerse. Porque la belleza siempre permanece en el recuerdo".  (William Wordsworth).

Besos y abrazos,

Don.
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lunes, 13 de febrero de 2017

Colorido matutino a la luz de la luna

¡Buenos días!

Otro matutino más que ve la alegre luz del sol tras salir la noche anterior de la negra caverna de mis entendederas, y haber producido destellos a través de mis sinapsis neuronales, coloridas chiribitas que la iluminaban cual arco iris, tratando de no dejar de lado ningún color del espectro, ni lugar a tristeza alguna. Y la verá, si no en esta nubosa y lluviosa mañana, tal vez al atardecer, entre chubasco y chubasco. Desde luego, esta pasada noche, ni rastro de la pálida luz de la luna, arropada por la grisura nubosa, quizá parda, por eso de que por la noche todos los gatos son pardos.

Este fin de semana estuve en el cine viendo una hermosísima película que os recomiendo, distinta a la gran mayoría. Se trató de "Moonlight", de Barry Jenkins, y con Trevante Rhodes, Naomie Harris, Mahershala Ali, André Holland, Janelle Monáe, Ashton Sanders, y Alex Hibbert. Basada en la obra teatral de Tarell Alvin McCraney "In moonlight black boys look blue", es el segundo largo, y primero que veo, de este director.

En la década de los 80, en un barrio marginal de Miami, un chaval negro es perseguido por compañeros de clase para zurrarle. Se refugia en una casa abandonada y poco después es encontrado por un traficante de drogas a pequeña escala, que lo recoge y trata de llevar a su casa, donde vive pobremente con su madre drogadicta que no le hace mucho caso. El trato afectuoso del hombre, y de su novia, harán que el retraído muchacho los considere como a esa familia de la que carece afectivamente. A lo largo del tiempo, irá evolucionando, conociéndose y aceptándose a sí mismo, durante sus difíciles y problemáticas infancia, adolescencia y madurez.

Sobresaliente película (nota: 9), una preciosidad estructurada en tres capítulos, uno por cada fase de la vida del protagonista, de deslumbrante belleza formal, y una manera de narrar poéticamente superlativa, preñada de sutileza y sensibilidad, y cierta pátina de melancolía. Y si no le pongo el diez es porque, incluso conmoviéndome y emocionándome, le faltó esa indescriptible pizca para acabar de extasiarme y desbaratarme. Íntima historia, de sensaciones, sobre familia, amor, amistad e identidad, sea esta sexual o en general, que también va de en que persona llegamos a convertirnos, en función nosotros mismos y del azaroso entorno que nos va moldeando a través del tiempo, así como también las expectativas que los demás depositan sobre nosotros. No os la perdáis.

Ahora, algo más que citas de sabiduría ajena, un par, bien pura poesía, bien reflexión poética, nada más y nada menos que eso, que aporte a nuestra existencia algo de hermosa luz y color, por tenues que sean:

 - "Amistad nunca mudable
por el tiempo o la distancia,
no sujeta a la inconstancia
del capricho o del azar,
sino afecto siempre lleno
de tiernísimo cariño,
tan puro como el de un niño,
tan inmenso como el mar".  (José Zorrilla).

 - "En el majestuoso conjunto de la creación, nada hay que me conmueva tan hondamente, que acaricie mi espíritu y dé vuelo desusado a mi fantasía, como la luz apacible y desmayada de la luna".  (Gustavo Adolfo Bécquer).

Besos y abrazos,

Don.
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viernes, 10 de febrero de 2017

Dones matutinos

¡Buenos días!

A pesar de mis variadas facetas, y que a lo mejor pueda valer tanto para un roto como para un descosido, no creo que haya más de un yo por ahí pululando, más bien que estos matutinos me regalan (y relajan) continuamente, dándome siempre lo mejor de sí mismos. Como la meteorología que hoy nos toca, a saber, cielo gris, bastante, podría decirse que tirando a negro, y multiplicidad de regalitos en forma de gotitas de agua que nos caen cual maná del cielo, regándonos con sus bondades.

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo "Melanie. The girl with all the gifts" ("The girl with all the gifts"), basado en la novela homónima de Mike Carey, también guionista del film, dirigido por Colm McCarthy, e interpretado por Sennia Nanua, Gemma Arterton, Paddy Considine, y Glenn Close. Es el segundo largo de este director británico, y primero suyo que veo.

En un futuro cercano la humanidad ha sido asolada por una enfermedad fúngica muy contagiosa que la ha convertido en su mayoría en zombis permanentemente hambrientos de carne humana. Entre los pocos supervivientes, en un destacamento militar en el que se investiga una cura para la enfermedad, hay una niña muy especial que sobresale del resto, un grupo de niños, resistentes al hongo, que son mitad humanos y mitad zombis, y que son educados, con grandes medidas de seguridad, por una cariñosa y diligente profesora, mientras una investigadora los utiliza cual cobayas para elaborar una vacuna.

Una muy buena película (nota: 7), a pesar de algunos pesares más allá de la mitad de su metraje, y que trasciende de una convencional de este género, por su original planteamiento inicial. Tiene acción, y su ración de gore para alimentar descerebrados fans, pero sobre todo deja poso (nutre nuestro cerebro) y da que pensar en nosotros, los humanos, y nuestra sociedad, que deviene en xenófoba en cuanto el entorno aprieta, viendo la paja en el ojo ajeno antes que la viga en el propio, y ninguna de sus bondades.

Ahora algo de sabiduría ajena, obsequio de otras mentes que quizá nos ayude a ver las mejores cualidades de los demás:

 - "Creo que aquello en lo que nos convertimos depende de lo que nuestros padres nos enseñan en pequeños momentos, cuando no están intentando enseñarnos. Estamos hechos de pequeños fragmentos de sabiduría".  (Umberto Eco).

 - "Lo malo de los que se creen en posesión de la verdad es que cuando tienen que demostrarlo no aciertan ni una".  (Camilo José Cela).

 - "La ignorancia afirma o niega rotundamente: la ciencia duda".  (Voltaire).

 - "Raro y celestial don, el que sepa sentir y razonar al mismo tiempo".  (Vittorio Alfieri).

 - "El que no posee el don de maravillarse ni de entusiasmarse más le valdría estar muerto, porque sus ojos están cerrados".  (Albert Einstein).

Besos y abrazos,

Don.
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jueves, 9 de febrero de 2017

Matutino noqueado, no, que adora amar

¡Buenos días!

Con dulces caricias y palabras me enamoran estos matutinos, incluso con su mera presencia, sin mayores aderezos, y casi me hacen perder el sentido y obnubilarme, pero no, les miro de frente... y caigo rendido. Uno, dos, tres... y diez, knock out, perdí, pero me gané, y me ganaron con, su amor. El sol tampoco deja que las nubes le obnubilen, pues sin fajarse y con un gran juego de pies y cintura, consigue las más de las veces dorarnos un poquito y hacer que le adoremos por su tibio calorcillo, que tanto bien nos hace en estos días de invierno. Máxima de 10ºC previstos para hoy, con sutiles heladas de madrugada (-1ºC) por los madriles.

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo "El día más feliz en la vida de Olli Mäki" ("Hymyilevä mies"), inspirada en un breve momento de la biografía de este Olli Mäki, dirigida por Juho Kuosmanen, e interpretada por Jarkko Lahti, Oona Airola, y Eero Milonoff. Es el primer largo de este director finlandés.

En el verano de 1962, un humilde boxeador finlandés, panadero de profesión, aspira a conseguir el trono de boxeo del peso pluma ante el vigente campeón mundial estadounidense, todo un púgil profesional. El combate se celebrará en Helsinki, y con la ayuda de su persistente entrenador se prepara concienzudamente para el triunfo... pero surge un problema, se ha enamorado de una amiga, ambos convecinos del mismo pueblo, lo que empieza a desconcentrarle de su objetivo y a hacerle replantearse el sinsentido de su vida y anhelos hasta ese momento.

Una muy buena película (nota: 7), rodada cámara en mano y en blanco y negro, esta sencilla y preciosa historia de amor, con trasfondo pugilístico, de mirada levemente melancólica, entre socarrona y desconcertada, al circo de vanidades que muchas veces nos rodea. Va de lo verdaderamente importante en la vida, sin dejarse deslumbrar por el oropel de la victoria, o de la derrota, de dejarse guiar por lo que uno mismo quiere y no tanto por lo que quieren los demás con las expectativas que ponen sobre nosotros.

Ahora algo de sabiduría ajena, que tal vez nos ayude a encajar eventuales desdichas, comenzando por una del director del film glosado hoy:

 - "No se trataba de perder o ganar en absoluto, sino sobre encontrar el propio camino hacia la felicidad con independencia de las expectativas del exterior".  (Juho Kuosmanen).

 - "Algunas caídas son el medio para levantarse a situaciones más felices".  (William Shakespeare).

 - "La dicha de la vida consiste en tener siempre algo que hacer, alguien a quien amar y alguna cosa que esperar".  (Thomas Chalmers).

Besos y abrazos,

Don.
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martes, 7 de febrero de 2017

Matutino latente

¡Buenos días!

Conforme avanza la mañana el cielo está más gris, de momento no solo ocultando el sol, sino la previsible lluvia que casi seguro caerá a poco que sepamos mirar más allá del velo nuboso. De hecho, las sabias y certeras previsiones de los eruditos meteorólogos apuntan en esa misma dirección, así que escuchémoslas, tanto como los latidos de nuestro corazón, o los de nuestras entendederas, y seamos precavidos, cubriéndonos del aguacero, llovizna más bien, que nos caerá.

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo "Hotel Europa" ("Smrt u Sarajevu"), cuyo título original en bosnio significa "Muerte en Sarajevo", basada en la obra de teatro homónima (en español) de Bernard Henri Lévy, dirigido por Danis Tanovic, y con Snezana Markovic, Izudin Bajrovic, Jacques Weber, Vedrana Seksan, Muhamed Hadzovic, Faketa Salihbegovic, Edin Avdagic Koja, y Aleksandar Seksan. De este director bosnio había visto hasta ahora algunos de sus anteriores largos, en concreto tres: "En tierra de nadie" ("Ničija zemlja", 2001), su debut, con el que ganó el Óscar de ese año a mejor película de habla no inglesa; "Cirkus Columbia" (2010); y "La mujer del chatarrero" ("Epizoda u zivotu beraca zeljeza", 2013).

En el más importante hotel de Sarajevo va a conmemorarse el centenario del asesinato del Archiduque Francisco Fernando de Austria y de su mujer el 28 de junio de 1914 en esa misma ciudad, lo que dicen dio el pistoletazo de salida para la I Guerra Mundial, al que acudirán importantes líderes europeos. Mientras se hacen los preparativos, y una cadena de televisión local entrevista a eruditos sobre el asunto en la azotea del edificio, los empleados del hotel, que llevan dos meses sin cobrar, están cociendo una huelga y una manifestación para ese mismo día, que el director del establecimiento quiere boicotear como sea.

Película que no me acabó de llegar (nota: 5), aunque contiene muy interesantes reflexiones en formato metafórico sobre las sociedades, y sus latentes tensiones socio-políticas que estallan de cuando en cuando por mal cicatrizadas heridas y la estupidez humana, de Bosnia, la desintegrada ex-Yugoslavia, y en general de toda Europa, especie de fractales las unas de las otras. Reflexiones también sobre la explotación de los obreros, sobre lo absurdo de los enfrentamientos, guerras incluidas, y lo endeble, si no se remedia con mejores intenciones que las habidas hasta ahora, de las uniones entre orgullosas tribus (en cualquier escala). Se me escapaban muchas veces las referencias a la particular situación de los levantiscos eslavos del sur (antigua Yugoslavia).

Ahora algo de sabiduría ajena, que nos ayude a desvelar lo que se cuece ajeno a nuestra vista, comenzando por una cita del propio director del film hoy glosado:

 - "Discutimos de sinsentidos: Europa sí o no, derecha o izquierda, nacionalismos... y lo que hace falta son intelectuales, filósofos, pensadores que lean el mundo y nos digan cómo hacer que funcione".  (Danis Tanovic).

 - "Hay en el espíritu humano muchas fuerzas que permanecen latentes hasta que la ocasión las despierta y aviva".  (Jaime Balmes).

 - "El fútbol es un milagro que le permitió a Europa odiarse sin destruirse".  (Paul Auster).

 - "Cuando viajo por Europa paso bastante tiempo en la habitación del hotel, repasando la cultura local a través de los programas de televisión".  (Barbara Probst Solomon).

Besos y abrazos,

Don.
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lunes, 6 de febrero de 2017

A propósito de algún despropósito junto a los matutinos

¡Buenos días!

No sé si en este plácido y sereno entorno matutino pudiera haberlos cometido. En cualquier caso, ni debieron ser importantes, ni he debido darles demasiada importancia ni parecen haberme afectado, pues siempre regreso a ellos despreocupadamente, con el siempre bien cumplido afán de que me reconforten, sin el más leve atisbo de tormenta alguna. Tampoco en el no demasiado raso cielo de esta mañana de invierno, tras las algo huracanadas e intermitentes lluvias de este pasado fin de semana. Quizá en próximos días pudieran volver. Ya veremos.

Este fin de semana estuve en el cine viendo una película que desde ya os recomiendo que vayáis a ver. Se trató de "Manchester frente al mar" ("Manchester by the sea"), de Kenneth Lonergan, y con Casey Affleck, Michelle Williams, Kyle Chandler, y Lucas Hedges. Es el tercer largo, y segundo que veo, de este director, también guionista y dramaturgo, tras su también sobresaliente "Margaret" (2011).

El conserje y manitas de varios edificios de Boston, un tipo retraído y misántropo, debe regresar precipitadamente a su localidad natal, un pequeño pueblo pesquero, del que se fue hace varios años debido a un trágico accidente, al recibir la noticia de que su querido hermano está a punto de fallecer. Cuando llega ya está muerto y se encuentra con la sorpresa de que lo ha nombrado tutor legal de su hijo adolescente. Trata de evitarlo y regresar a su rutinaria y solitaria vida, pero no puede, y deberá enfrentarse a su pasado y a su ex-mujer.

Una sobresaliente película (nota: 9) este drama, con ramalazos de humor, serenas imágenes, hermosísimas, y pausado fluir, sobre el indescriptible dolor de su protagonista, de alma torturada e irredenta, a quien las circunstancias le obligan a volver a revivirlas, y nada parece aliviarle de sus traumas, tan profundos que parecen no tener cura (para él mismo). Historia compleja, profunda, con varias capas, contada a través de flashbacks que van revelándonos poco a poco su pasado, doloroso a partir de su error, del que se culpa y que devino en su autoexilio (de su pueblo, y de sí mismo). A destacar especialmente las escenas de los fugaces reencuentros entre el protagonista y su ex, casi todos de silencios y miradas, sutilísimos, muy especialmente esa en la que más que hablar balbucean torpes intentos de perdón, sin fruto alguno.

Ahora unas citas de sabiduría ajena, por cierto, creo que bastante a propósito de lo narrado en el film, como suelo:

 - "Puedo perdonar todos los errores, menos los míos".  (Catón).

 - "Los años arrugan la piel, pero renunciar al entusiasmo arruga el alma".  (Albert Schweitzer).

 - "El más terrible de todos los sentimientos es el sentimiento de tener la esperanza muerta".  (Federico García Lorca).

 - "Qué cerca sentimos a algunos que están muertos; y qué muertos nos parecen otros que aún viven".  (Wolf Biermann).

 - "Los errores fortalecen, a condición de no dejarse abatir por ellos, y enseñan lo que no se ha de hacer otra vez, lo que se ha de evitar".  (Noel Clarasó).

Besos y abrazos,

Don.
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domingo, 5 de febrero de 2017

Cartográficos retazos matutinos

¡Buenos días!

Bien podrían ser los matutinos esto mismo, alborotadas teselas del mosaico de mí mismo. Algún día no sé si alguien se entretendrá en ordenarlas, conseguir trazar una buena infografía vital, y pueda sacar algo en claro. Yo, desde luego, no podría, me falta perspectiva, la que tendría si pudiera salir lo suficientemente lejos de mi propio centro geodésico, y orbitar alrededor de él. Otros tendrán que ser los que rescaten mi memoria cuando me olvide de mi mismo.

Parece que dejaron de caer minúsculos y acuosos retales de nubes, pero pronto estas se desharán, en cuantito que salga el sol, y junto con el ventarrón que todavía hay, se evaporarán los perecederos mapas de charcos creados, y volverán a recomponerse de otro modo de cara a venideras lluvias, en continua evolución en su perpetua sucesión espacio-temporal.

Este fin de semana estuve en el teatro viendo la obra "El cartógrafo", escrita y dirigida por Juan Mayorga, y con Blanca Portillo y José Luis García Pérez. De este autor, y más recientemente, director teatral, había visto una magistral película francesa inspirada en su obra "El chico de la última fila" (2006), "En la casa" ("Dans la maison", 2012) de François Ozon; y también la versión que hizo de la inconclusa obra de teatro de Georg Brüchner "Woyzeck" (1837).

En la actualidad, la esposa de un diplomático de la embajada española en Varsovia, cuyo matrimonio está en crisis, escucha la leyenda de un mapa que un viejo cartógrafo judío y su nieta, todavía niña, trazaron del gueto de Varsovia en el que fueron recluidos durante la ocupación nazi. La tomará por cierta y procederá a una obsesiva búsqueda del viejo mapa. De camino, terminará por trazar el de su propia vida pasada y apagados recuerdos.

Estupenda obra (nota: 8), drama de prolijo conocimiento cartográfico que rememora el horror que allí y entonces se vivió, de puesta en escena radicalmente minimalista, que requiere de esfuerzo por parte del espectador para su comprensión, por el enmarañado de diversas situaciones dispersas por el espacio y el tiempo, brillantísimamente tramadas por el autor, dejando flecos al aire que el espectador debe terminar de anudar, y que cobran lúcido sentido al final. Las interpretaciones de ambos actores, que representan diversos personajes cada uno, excelentes, muy especialmente para mí ese portento de actriz total que es Blanca Portillo, por todo, por voz, por expresividad facial, y por encima de todo, y sin ningún aspaviento, por una expresividad corporal superlativa, que casi la transformaba físicamente en los personajes que interpretaba.

Ahora unas citas de sabiduría ajena, que representan la esencia del pensamiento de otros:

 - "El mundo, para nosotros, es representación, como decía Schopenhauer; no es una realidad absoluta, sino un reflejo de ideas esenciales".  (Pío Baroja).

 - "Los recuerdos tienen más poesía que las esperanzas, como las ruinas son mucho más poéticas que los planos de un edificio en proyecto".  (Jacinto Benavente).

 - "La belleza artística no consiste en representar una cosa bella, sino en la bella representación de una cosa".  (Immanuel Kant).

Besos y abrazos,

Don.
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viernes, 3 de febrero de 2017

Vividor noctambulismo matutino

¡Buenos días!

Trato de disfrutar de cada momento, sea de día o de noche, dentro y fuera de estos matutinos, gestados con disfrute en la noche previa a su alumbramiento cuando despunta el alba, viviendo siempre en el filo del instante que me toca, regido por mi conducta, no sé si buena o mala, aunque intente que sea buena, pero es lo que hay. Y hoy hay todavía más nubes, más grises y apretadas, tanto que se escurren unas a las otras y nos empapan, emborrachándonos de plenitud vital.

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo "Vivir de noche" ("Live by night"), basada en la novela homónima de Dennis Lehane, dirigida por Ben Affleck, y con él mismo, Brendan Gleeson, Sienna Miller, Zoe Saldana, Chris Messina, Chris Cooper, y Elle Fanning. Es el cuarto largo como director de este también actor, de quien además de unos cuantos suyos solo como actor, había visto dos de sus anteriores como director, "Argo" (2012) y "Adiós pequeña, adiós" ("Gone baby gone", 2007).

Un joven de origen irlandés que ha regresado de las trincheras europeas de la I Guerra Mundial al acabar esta, cuyo padre es un alto cargo de la policía de Boston, se dedica a pequeños atracos en timbas y bancos con un par de amigos tratando de quedar al margen de la guerra entre mafiosos irlandeses e italianos por hacerse con el control de la ciudad. Pero al enamorarse de la amante del capo irlandés y descubrirlo este, lo pierde todo, incluso casi su propia vida, y acaba en la cárcel. Al salir de allí varios años después, se ve obligado a ponerse a las órdenes del italiano para vengarse del otro. Es enviado a Florida para encargarse del contrabando de ron cubano durante la Ley Seca.

Una buena película (nota: 6), excelente visualmente, que empezó no diciéndome gran cosa, sin disgustarme, pero que cerca de su final ganó algo de profundidad y me gustó más. Historia de gánsteres, con un protagonista cuyo sentido ético y nobleza no parece encajar en demasía en ese mundo de hampones, lo que hace que esté siempre su vida en el filo de la navaja.

Ahora unas citas de sabiduría ajena, que tal vez nos saque de la noche de nuestras ignorancias, y que seguro nos ayuda a disfrutar más de la vida que nos toca:

 - Necesitamos la vida entera para aprender a vivir y también, cosa sorprendente, para aprender a morir".  (Séneca).

 - "Por mala senda en tenebrosa noche, sin saber a dónde voy, camino a ciegas, ignorante a la par de dónde vengo".  (Alphonse de Lamartine).

 - "Antes que nada sé verídico para contigo mismo. Y así, tan cierto como la noche sigue al día, hallarás que no puedes mentir a nadie".  (William Shakespeare).

 - "No se puede llegar al alba sino por el sendero de la noche".  (Khalil Gibran).

 - "Advertir la vida mientras se vive, alcanzar a vislumbrar su implacable grandeza, disfrutar del tiempo y de las personas que lo habitan, celebrar la vida y el sueño de vivir, ése es su arte".  (Doménico Cieri Estrada).

Besos y abrazos,

Don.
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jueves, 2 de febrero de 2017

Matutino de acogida

¡Buenos días!

Cuando me siento perdido, cual desvalido cachorrito lejos de su madriguera, corro a refugiarme de las inclemencias en estos matutinos, donde me siento acariciado y mimado casi como en mi casa, y tras los besos y abrazos de despedida, parto de nuevo a buscar lo que sea menester, ya con otro estado de ánimo, mucho más reconfortado. En el día de hoy parece como si el ya casi olvidado y perdido otoño regresara a la casa del invierno, en este muy lluvioso y gris día, estabilidad térmica entre 7 y 10ºC (mínima y máxima) para hoy, sin frío helador por tanto, a no ser las eventuales destemplanzas provocadas por las ráfagas de un viento que cada vez arrecia más.

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo "Lion", de Garth Davis, y con Dev Patel, Sunny Pawar, Rooney Mara (como siempre, toda ella un primor), Nicole Kidman, y David Wenham. Basado en una historia real, es el primer largo de este director australiano.

Un niño de cinco años que vive con su madre y dos hermanos en la más extrema probreza en una remota aldea de la India, jugando con su hermano mayor se pierde y se queda dormido dentro de un tren vacío, que le alejará más de mil kilómetros de su hogar, hasta la megalópolis de Calcuta. Deambulará y sobrevivirá solo por las atestadas calles durante varios meses, y tras varias vicisitudes acabará en un orfanato, desde donde será adoptado por un matrimonio australiano. Veinticinco años después, con la ayuda de Google Earth, se empeñará en reencontrarse con su familia biológica a pesar de sus muy difusos recuerdos.

Una muy buena película (nota: 7), a la que acudí con cierta prevención por sus posibles sobredosis melodramáticas, dada la historia contada, pero me encontré una cinta muy comedida, muy bien narrada, con tempo reflexivo, y con unas estupendas banda sonora y fotografía. Incluso me emocionó con sincera naturalidad en un par de escenas. Además, me gustó mucho más su primera parte, cuando las desoladas peripecias del perdido chavalín, casi sin diálogos de por medio, toda una excelente experiencia cinéfila, y toda una denuncia de la situación de montones de críos del tercer mundo, abandonados a su suerte, y de la miseria moral en su derredor y algo más allá. Viaje de ida y vuelta de pérdidas y reencuentros, incluso con uno mismo, con quien se es o quiere ser.

Ahora, por si os diera la sensación de estar perdidos, un par de citas de sabiduría ajena que he encontrado por ahí, aunque nada desvalidas:

 - "La felicidad es la certeza de no sentirse perdido".  (Jorge Bucay).

 - "No hay placer comparable al de encontrar un viejo amigo excepto el de lograr uno nuevo".  (Rudyard Kipling).

Besos y abrazos,

Don.
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miércoles, 1 de febrero de 2017

Multiplicidad matutina sin desdoblamiento

¡Buenos días!

Muchas son las caras de estos matutinos, pero están armoniosamente conjugadas, o eso creo, lo que los hace bastante versátiles para mí, pues me sirven -nos sirven-, eso creo, de muchas maneras, tantas que ni a veces soy consciente de ellas. Y este invierno hace lo propio, cambiando de aspecto casi cada día, últimamente, hoy de nuevo con plomizas nubes que parecen querer subdividirse en algunas gotas de lluvia. Para mañana, según las previsiones, lloverá más a conciencia, así que no seamos inconscientes y cojamos un paraguas por si acaso.

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo "Múltiple" ("Split"), de M. Night Shyamalan, y con James McAvoy, Anya Taylor Joy, Betty Buckley, Haley Lu Richardson, y Jessica Sula. De este estupendo director y guionista he visto casi todos sus films, en concreto: "La visita" ("The visit", 2015), la muy mala "After Earth" (2013), "El incidente" ("The happening", 2008), "La joven del agua" ("Lady in the water", 2006), la espléndida "El bosque" ("The village", 2004), "Señales" ("Signs", 2002), "El protegido" ("Unbreakable", 2000), y "El sexto sentido" ("The sixth sense", 1999).

Un hombre con trastorno de identidad disociativo, con 23 personalidades distintas, y otra mucho más bestial y sobrenatural a punto de emerger, secuestra a tres chicas adolescentes y las encierra en un zulo, mientras decide qué hacer con ellas y se debate entre cual de todas sus identidades acabará por dominar a las demás, a la par que su veterana psicoterapeuta intenta mantenerlo bien encauzado.

Una buena película (nota: 6), siempre con el excelente y muy inteligente buen hacer de su director, que me gustó porque me dio que pensar, a pesar de ser de terror, eso sí, muy suave, más en la línea del suspense de Hitchcock, y en las antípodas del efectismo, y con ligera pátina sobrenatural hacia el final -cosa que no me suele gustar e incluso me irrita y exorciza la bestia que llevo dentro-, pero que tiene su porqué en las reflexiones que me indujo, que nos indujo. Me hizo -nos hizo- discurrir sobre la naturaleza humana y sus complejidades identitarias, esos otros yo que escondemos para bien socializar con los demás, como ese monstruo que todos llevamos dentro -grrrrr-, más o menos evidente, y del que siempre estamos tratando de protegernos, a nosotros mismos, y como consecuencia, a los demás.

En la coda final hubo una autorreferencia a otro de sus films, "El protegido" ("Unbreakable", 2000), cameo incluido de Bruce Willis (de su personaje), muy al estilo de los avances de siguientes episodios de cansinas franquicias superheroicas o similares, toda una jocosa ironía y velada crítica a las superproducciones de mucho ruido y pocas nueces, ruido y furia que nada significan, que diría Shakespeare por boca de uno de sus personajes, de sus álter ego.

Ahora cuádruple ración de citas de sabiduría ajena, que os disocio de entre la multiplicidad de ellas que pululan por mis derredores:

 - "Una sabiduría múltiple no enseña la cordura".  (Heráclito).

 - "Hay otros mundos, pero están en este".  (Paul Éluard).

 - "Si no puedes hacer de tus pensamientos objetos externos, entonces haz de los objetos externos pensamientos".  (Novalis).

 - "El camino misterioso va hacia el interior. Es en nosotros, y no en otra parte, donde se halla la eternidad de los mundos, el pasado y el futuro".  (Novalis).

Besos y abrazos,

Don.
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