miércoles, 31 de diciembre de 2014

Quijotescos planes matutinos

¡Buenos días!

Otra fresca y soleada mañana de invierno para quedarse ensimismado en las más variopintas ensoñaciones, y ponerse a hacer algo, lo que sea, para disfrutar de todo lo que nos rodea y la vida nos regala. Manos a la obra, planifiquemos nuestros anhelos, y a por ello con renovadas ilusiones, que seguro saldremos victoriosos de la justa. Con suaves heladas de madrugada nos hemos despertado de soñar dormidos para hacerlo despiertos, lo que viene a ser lo mismo, que la vida es sueño, que decía Calderón de la Barca.

Antes de ayer por la tarde estuve en el cine viendo "Kaplan" ("Mr. Kaplan"), de Álvaro Brechner, y con Héctor Noguera, Néstor Guzzini, y Rolf Becker. Es el segundo largo de este director uruguayo, de quien ya había visto su debut con "Mal día para pescar" (2009).

Kaplan es un anciano judío que en su adolescencia huyó de su Polonia natal para escapar del exterminio nazi y llegó a Sudamérica. Cabreado consigo mismo por ser viejo, se considera ya un estorbo para la familia y, aburrido de su anodina vida, no quiere morir sin antes haber hecho algo de mérito por lo que ser recordado por futuras generaciones. Junto con un obeso expolicía que su familia contrata como chófer suyo, se embarcará en la quijotesca aventura de investigar, capturar y entregar a la justicia a un viejo alemán que vive en un chiringuito playero y que sospecha que fue un antiguo criminal de guerra nazi huido.

Una estupenda película esta comedia negra sobre un peculiar Quijote (gordo escudero incluido), con algún toque de western, que me encantó por su particular mirada a las cosas y su modo de narrar. Una reflexión sobre la vejez, que nunca debería dejar perder la ilusión por vivir, teniendo algo que hacer; y que también habla de malentendidos y sobre nuestros deseos de dejar algún rastro de mérito en nuestro efímero paso por la vida, a veces tan extravagante y absurda como para reírse de ella, a veces tan fascinante como para entusiasmarse con cualquiera de sus insignificancias.

Ahora algo de sabiduría ajena, que espero no nos sorba demasiado el seso, más bien lo contrario, nos lo llenará de mejores ideas e ideales:

 - "El cerebro no es un vaso por llenar, sino una lámpara por encender".  (Plutarco).

 - "La imaginación hace cuerpo de lo que es visión".  (Refrán).

 - "Verdad son los sueños mientras duran, pero, ¿qué es vivir sino soñar?".  (Alferd Tennyson).

 - "Cada uno acepta lo que va descubriendo de sí mismo en las miradas de los demás, se va formando en la convivencia, se confunde con el que suponen los otros y actúa de acuerdo con lo que se espera de ese supuesto inexistente".  (Juan Carlos Onetti).

 - "Cuando me dicen que soy demasiado viejo para hacer una cosa, procuro hacerla enseguida".  (Pablo Picasso).

 - "El arte de envejecer es el arte de conservar alguna esperanza".  (André Maurois).

 - "La dicha de la vida consiste en tener siempre algo que hacer, alguien a quien amar y alguna cosa que esperar".  (Thomas Chalmers).

Besos y abrazos,

Don.
_____

domingo, 28 de diciembre de 2014

Allanamiento de matutinos

¡Buenos días!

Difícil llevar a efecto el título de hoy, que esta morada matutina está abierta de par en par a todo el que quiera entrar, matutinos que reparan mis eventuales heridas nada más pasar su umbral, recomponiendo mi ánimo de cara a mi vuelta al mundo. Día de sol y nubes, que ha tenido algún eventual y tempranero chaparrón mañanero, no sé si primaveral, pues hace frío, que el invierno no se deja allanar ahora que cada vez se va haciendo más fuerte, y hasta es posible que termine por amoratarnos la piel.

Ayer por la noche no estuve en el cine, que no pude llegar debido a un monumental atasco de entrada a Madrid, cosas de las navidades, así que vi una peli enlatada, en dvd, del año 2006, y que no vi en su día. Se trató de "Breaking and entering", de Anthony Minghella, y con Jude Law, Juliette Binoche, Robin Wright, y Vera Farmiga. De este director inglés, fallecido hace 6 años, tan sólo había visto uno de sus anteriores films, "El paciente inglés" ("The english patient", 1996).

Un afamado arquitecto, que vive con su novia y la problemática hija de ésta que dificulta su vida en pareja, y que junto a su amigo codirige una empresa de urbanismo y paisajismo encargada de restaurar el deprimido barrio londinense de King's Cross, harto de los continuos robos que sufre en su empresa, se queda vigilando por las noches para tratar de desenmascararlos. Persiguiendo a uno de los ladrones llega hasta su apartamento, donde el adolescente vive con su madre, una refugiada bosnia con la que iniciará una relación amorosa a escondidas de su pareja formal.

Una buena película en general, con sus más y sus menos, este melodrama glamouroso, de estupenda factura visual, que se deja ver, con su punto de emoción e intriga, y que trata sin mucho éxito de meternos en una situación de realismo social de buenas intenciones y sentimientos, eclipsado por las disquisiciones del triángulo amoroso que se nos retrata. Conforme avanza hacia el final se me fue desinflando. En el film se postula que algunas cosas necesitan romperse antes de poder arreglarlas.

Ahora algo de sabiduría ajena, que seguro nos allana nuestro tránsito vital:

 - "El sabio no se sienta para lamentarse, sino que se pone alegremente a su tarea de reparar el daño hecho".  (William Shakespeare).

 - "Nunca es tarde para el arrepentimiento y la reparación".  (Charles Dickens).

 - "La Ley, en su magnífica ecuanimidad, prohibe, tanto al rico como al pobre, dormir bajo los puentes, mendigar por las calles y robar pan".  (Anatole France).

 - "Una amistad reanudada requiere más cuidados que la que nunca se ha roto".  (François de la Rochefoucauld).

 - "A perdonar solamente se aprende en la vida cuando a nuestra vez hemos necesitado que nos perdonen mucho".  (Jacinto Benavente).

Besos y abrazos,

Don.
_____

sábado, 27 de diciembre de 2014

Pintureros y pasteleros ojazos vespertinos

¡Buenos días!

En esta dulce y fría tarde de invierno, con máximas que apenas superan los 5ºC, sin heladas todavía, aunque en pocos días las habrá, luce un sol con los ojos abiertos de par en par, como yo mismo cuando miro ojiplático la belleza casi pictórica de los paisajes aún otoñales que me rodean, que trato de aprehender sin llegar a quedármela, que está a disposición de todos, y de la que trato de aprender todo lo que quiera mostrarme.

Antes de ayer por la tarde estuve en el cine viendo "Big eyes", de Tim Burton, y con  Amy Adams y Christoph Waltz. De este magnífico y muy peculiar director he visto todos sus largos, salvo su debut con "La gran aventura de Pee-wee" ("Pee-wee's big adventure", 1985), a saber:

 - "Frankenweenie" (2012).

 - "Sombras tenebrosas" ("Dark shadows", 2012).

 - "Alicia en el país de las maravillas" ("Alice in Wonderland", 2010).

 - "Sweeney Todd: el barbero diábolico de la calle Fleet" ("Sweeney Todd: the demon barber of Fleet Street", 2007).

 - "La novia cadáver" ("Tim Burton's corpse bride", 2005).

 - "Charlie y la fábrica de chocolate" ("Charlie and the chocolate factory ", 2005).

 - "Big fish" (2003).

 - "El planeta de los simios" ("Planet of the apes", 2001).

 - "Sleepy Hollow" (1999).

 - "Mars Attacks!" (1996).

 - "Ed Wood" (1994).

 - "Batman vuelve ("Batman returns", 1992).

 - "Eduardo Manostijeras" ("Edward Scissorhands", 1990).

 - "Batman" (1989).

 - "Bitelchús ("Beetlejuice", 1988).

Historia basada en la vida real de un matrimonio de pintores norteamericanos que durante fines de los años 50 y primeros 60 alcanzaron una enorme popularidad con sus cuadros, cursis y pasteleros, en los que había siempre niñas o niños, y eventualmente mascotas domésticas, de desproporcionados ojos de triste mirada, y que ella pintaba enclaustrada en su casa, mientras él firmaba alegando su manifiesta habilidad para el marketing, lo que terminó por hacerles muy ricos, dando el pelotazo cuando él inventó la masiva comercialización del arte popular. Ella, mujer tímida y mojigata, minusvalorada y sin mucha autoestima, aceptaba sumisamente los dictados de su manipulador marido, quien se llevó toda la fama... hasta que se descubrió el pastel.

Otra estupenda película de este director que me encanta, esta historia sobre uno de los mayores fraudes artísticos de fines del s.XX, durante la era del pop-art, y cuando a las mujeres todavía no se las tenía en cuenta para casi nada, poco más que para casarse y hacer caso a su marido en todo. Reflexión sobre la mentira en el arte y de como unas tendencias artísticas lo petan y otras no (cosas de la borregada que sigue los delirios de algún iluminado). También sobre la mentira en la familia, en un matrimonio con una mujer don nadie y que nada podía hacer sin consentimiento del muy parásito marido, pero cuya sumisión cargada de soterrada frustración constante acaba por devenir en femenina emancipación a través de la liberación de contar la verdad. Y por supuesto sobre talento artístico (o presuntamente artístico) versus comercial, que no todos poseen de ambos, y que a veces hay que saber conjugar en varias personas, por supuesto sin trampantojos, con la verdad por delante.

Ahora algo de sabiduría ajena, que tal vez nos abra más los ojos para estar prevenidos ante la mentira:

 - "Cuando los labios callan, los ojos hablan".  (Refrán).

 - "En general, los hombres juzgan más por los ojos que por la inteligencia, pues todos pueden ver, pero pocos comprenden lo que ven".  (Nicolás Maquiavelo).

 - "¿A quién va usted a creer, a mí o a sus propios ojos?".  (Groucho Marx).

 - "Vale más fracasar honradamente que triunfar debido a un fraude".  (Sófocles).

 - "Un pintor es un hombre que pinta lo que vende. Un artista, en cambio, es un hombre que vende lo que pinta".  (Pablo Picasso).

Besos y abrazos,

Don.
_____

miércoles, 24 de diciembre de 2014

A vueltas con este pinturero matutino

¡Buenos días!

Bueno, tampoco me voy a complicar mucho la vida con este matutino que voy a escribir y no sé si pintar graciosamente, que estamos casi de nochebuena, y buena seguro que será, porque casi ni helará. El día, como de bucólica pintura romántica, lejos de cualquier tempestad, en la que hay puesto un tibio solazo que invita a salir por ahí a solazarse cual cabritilla retozona y a disfrutar de las deliciosas temperaturas (máxima prevista para hoy de 10ºC).

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo "Mr. Turner", de Mike Leigh, y con Timothy Spall (sobresaliente actuación). De este veterano director había visto hasta ahora cinco de sus anteriores films, todos sobresalientes y recomendabilísimos: "Another year" (2010), "Happy,un cuento sobre la felicidad" ("Happy-go-lucky", 2008), "El secreto de Vera Drake" ("Vera Drake", 2004), "Todo o nada" ("All or nothing", 2002), y "Secretos y mentiras" ("Secrets & lies", 1996).

Se nos narran los últimos 25 años de la vida del excéntrico pintor británico J. M. W. Turner (1775-1851), cuando ya era rico y famoso, aunque no todos celebraban su arte, pues le criticaban, incluida la realeza. Hosco, de carácter áspero y difícil trato, vive con su padre y su ama de llaves, que le ama, pero él no le hace ni caso, aunque en ocasiones se aproveche sexualmente de ella. No reconoce a dos hijas que tuvo con una antigua amante de juventud. Visita burdeles y alterna con la aristocracia. Viaja con frecuencia para inspirarse artísticamente. La muerte de su padre le afecta mucho, y se aísla del mundo, cambiando su vida cuando intima con la dueña de una pensión al borde del mar, en la que se aloja durante sus viajes.

Buena película que ofrece retazos, cual sueltas pinceladas impresionistas, de este extravagante artista, precursor del impresionismo. Sin embargo, no empaticé con este film, un biopic poco o nada convencional, compuesto por unos pocos episodios sueltos de su vida, pues me pareció tan atormentado y caótico como la propia vida interior y últimas obras del personaje retratado (seguramente concebido así, adrede, por su sobresaliente director). No obstante, esos episódicos cuadros sueltos contienen montones de bellísimos encuadres cinematográficos casi pictóricos.

Ahora algo de sabiduría ajena, que seguro nos ayuda a pintar algo (o mucho) en la vida:

 - "Un cuadro de un museo es, posiblemente, el que tiene que escuchar más tonterías en todo el mundo".  (Edmond de Goncourt).

 - "No vemos las cosas como son. Vemos las cosas como somos nosotros".  (Confucio).

 - "El ojo recibe de la belleza pintada el mismo placer que de la belleza real".  (Leonardo da Vinci).

Besos y abrazos,

Don.
_____

martes, 23 de diciembre de 2014

Matutinos que se casan con todo el mundo

¡Buenos días!

Sí, pues aunque pueda parecer que no se casan con nadie, que mantienen cerrilmente sus posturas, aceptan el que haya otras posibilidades. Nobleza obliga. Por lo demás, en este segundo día de invierno de calendario, seguimos de tiempo otoñal, soleado y de temperaturas agradabilísimas mientras haya sol, y no demasiado frías por la noche. Parece que tras haber pasado ayer por el umbral del solsticio hubieran contraído meteorológicas nupcias invierno y otoño, ambos llevándose estos días la mar de bien a pesar de sus naturales diferencias.

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo "Dios mío, ¿pero qué te hemos hecho?" ("Qu'est-ce qu'on a fait au Bon Dieu?"), de Philippe de Chauveron, y con Christian Clavier, Chantal Lauby, Ary Abittan, Medi Sadoun, Frédéric Chau, Noom Diawara, Frédérique Bel, Julia Piaton, Émilie Caen, Pascal Nzonzi, y Élodie Fontan (guapísima). Es el primer largo que veo de este director.

Un matrimonio burgués de provincias del interior de Francia, muy tradicional, conservador y católico, de los de toda la vida, tiene cuatro hijas casaderas. Las tres mayores, para desgracia de sus padres, se fueron casando por lo civil, con un musulmán, un judío, y un chino, respectivamente. Tratan de tener un talante más o menos abierto y tolerante con sus yernos, pero depositan todas sus esperanzas en la muy guapa hija menor, para que se case por la iglesia con un chico católico. Por fin, les anuncia que se casará, y con un católico, pero "olvidó" mencionarles un pequeño detalle...

Una buena comedia sobre las diferencias de raza o religión, ligera, para echar unas risas sobre los tópicos en cuestión (las diferencias multiculturales), con la que me eché algunas carcajadas y pasé un rato entretenido. Además, obviando la cuestión multiétnica, podría verse como una comedia sobre cualquier familia de lo más "normal", en la que los patriarcas no ven a menudo con muy buenos ojos a sus yernos y nueras, aunque traten de disimularlo con peor o mejor fortuna, ni tampoco el resto de la parentela política entre sí. Ha sido todo un taquillazo en Francia, de similar nivel a nuestra "Ocho apellidos vascos", de Emilio Martínez Lázaro, que trata de parecidos temas y que vimos casi todos este mismo año.

Ahora, algo de sabiduría ajena, tanto para no casarnos con nadie, como con todo el mundo, según nuestra personal elección, como tiene que ser:

 - "Bien se diferencian dos huevos, si uno es grande y el otro pequeño".  (Refrán).

 - "Encuentro tanta diferencia entre yo y yo mismo como entre yo y los demás".  (Montaigne).

 - "Si no podemos poner fin a nuestras diferencias, contribuyamos a que el mundo sea un lugar apto para ellas".  (John F. Kennedy).

 - "Una velada en la que todos los presentes estén absolutamente de acuerdo es una velada perdida".  (Albert Einstein).

 - "La educación es la capacidad para oírlo casi todo sin perder tus modales ni la confianza en ti mismo".  (Robert Frost).

Besos y abrazos,

Don.
_____

lunes, 22 de diciembre de 2014

Heroicos festines matutinos

¡Buenos días!

Sí, ya se acerca la Navidad, época de grandes banquetes familiares en el que nuestros estómagos, especialmente si ya han sido castigados por el transcurso del tiempo, se convierten en grandes superhéroes tratando de triturar las malvadas viandas que amenazan con devorarnos a nosotros. De momento siempre salimos vencedores de tal encuentro. Y el invierno, por el que entramos esta misma madrugada a través de su solsticio, de momento no nos devora de frío, con días soleados, de suavísimas heladas nocturnas (levemente por debajo de los 0ºC), y con máximas acariciando por arriba los 10ºC. Así que todavía no nos somete a tan duras pruebas como para que tengamos que utilizar nuestros superpoderes para combatirlo.

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo una de animación por ordenador. Se trató de "Big Hero 6", de Don Hall y Chris Williams. De este segundo ya había visto otra de animación por ordenador, codirigida con Byron Howard: "Bolt" (2008).

En la megalópolis de San Fransokyo, mezcla San Francisco y Tokio, vive un chico de 14 años, un prodigio de la robótica. Su querido hermano mayor, estudiante de ingeniería robótica, muere en un extraño accidente. Junto con el peculiar robot hinchable creado por su hermano, y los cuatro amigos y compañeros de éste, investigará el misterio de ese accidente, encontrándose con la oposición de un malvado supervillano enmascarado, así que con los conocimientos de los seis crearán un equipo de grandes superhéroes para enfrentarle.

Muy buena película esta comedia aventurera, primera adaptación de un cómic de la Marvel por parte de la Disney, un híbrido con un poco de cada, con mucha acción y emoción, muy divertida, de guión algo tópico y previsible, pero también con sus puntos fuertes y loables, como el ensalzamiento de la educación, o el carismático robot, adorable personaje, más bien achuchable, y algún otro personaje friki más... y esa portentosa técnica de animación digital, cada vez mejor, más hiperdetallista, que no cesa de progresar, llegando a tales cotas que va a llegar un momento en que nos van a colar esta realidad virtual por real realidad, si es que tal existe, y no nos vamos a dar ni cuenta.

A este film le hizo de telonero el corto de animación "Buenas migas" ("Feast"), de Patrick Osborne, en el que se nos narra como a un joven le regalan un perro y a través de los ojos de éste vemos como evoluciona la vida amorosa del joven según va cambiando lo que come el perro. También muy buena película, y muy divertida.

Ahora algo de sabiduría ajena, alimento para nuestras entendederas, especie de herramienta que nos puede dar intelectuales superpoderes:

 - "Un héroe es todo aquel que hace lo que puede".  (Romain Rolland).

- "Creer que un enemigo débil no puede dañarnos es creer que una chispa no puede causar un incendio".  (Proverbio hindú).

 - "El placer de los banquetes debe medirse no por la abundancia de los manjares, sino por la reunión de los amigos y por su conversación".  (Cicerón).

Besos y abrazos,

Don.
_____

sábado, 20 de diciembre de 2014

Matutino hiperconectado

¡Buenos días!

Casi cada mañana me engancho (sin engancharme demasiado) a estos matutinos, tan reales y virtuales a la vez, que me permiten conectarme a la realidad a través de su fantástica interfaz, lo que no obsta para que casi nunca pierda la toma de tierra a la vida cotidiana mientras navego por ellos, para así, cuando salga, no cortocircuitarme mentalmente. Otro soleado día de otoño tenemos, con sus nieblas nocturnas y de madrugada, y ya sabéis ese refrán de "mañanitas de niebla, tarde de paseo"; días que salvo por las suaves temperaturas (máximas de unos 11ºC y sin heladas madrugadoras por los madriles) conectan con los de invierno a punto de llegar por calendario, que pasado mañana lunes, de madrugada, será el solsticio invernal.

Antes de ayer por la tarde estuve en el cine viendo "Hombres, mujeres y niños" ("Men, women & children"), de Jason Reitman, basado en una novela homónima de Chad Kultgen, y con  Adam Sandler, Jennifer Garner, y Rosemarie DeWitt, entre muchos otros más, que es un film coral. Es el sexto largo de este director, de quien había visto sus cuatro primeros (no vi el quinto), todos espléndidos y muy recomendables cuando menos: "Gracias por fumar" ("Thank you for smoking", 2005), "Juno" (2007), "Up in the air" (2009), "Young adult" (2011); y la que no vi, "Una vida en tres días" ("Labor day", 2013).

Un grupo de estudiantes de instituto, y sus padres, adolescentes todos, unos por edad y por adolecer de esto y de aquello, y los otros sólo por esto segundo, viven conectados a la tecnología más moderna, las más de las veces perdiendo comunicación y contacto con la realidad, intentando sin demasiado éxito soslayar sus problemas cotidianos: un matrimonio aburrido de su relación que busca nuevas experiencias en internet, y su hijo enganchado al porno virtual; la amiga de éste, animadora que sueña con ser famosa y su madre (modelo frustrada) le hace fotos eróticas que cuelga en su book virtual para facilitarle la labor; una madre obsesivamente protectora que espía todo lo que su hija hace en internet, quien se enamora de un compañero desolado por la fuga de su madre con otro hombre, tanto como su padre, y que está enganchado a juegos de rol online, abandonando por ello el equipo de fútbol del instituto; una animadora del equipo, amiga de la anterior, con graves problemas de autoestima y que busca "solucionarlos" en ciertas páginas web nada recomendables; etc.

Una estupenda película que me encantó, y que os recomiendo, desoladora casi todo el rato pero con un punto de esperanza final, punteada con gotas de irónico humor y gran crítica social. Una certera mirada, afiladamente analítica, sobre el impacto de las nuevas tecnologías en nuestra sociedad y los problemas para relacionarse con la vida real (y con familias y amigos) de todos sus desolados personajes, con bastante deje sexual, muchos de los cuales se aíslan en la virtualidad de las TIC, especie de nueva droga que no los soluciona, aunque no por ello haya que demonizarlas ni prohibirlas, pues su utilidad es inmensa (correctamente utilizadas). Un problema de dosis, como cualquier sustancia química, la que sea, que no son ni buenas ni malas per se, que todo depende de eso, de la dosis administrada, cada una la suya propia. También sobre la influencia, consciente o inconsciente, que los padres ejercen sobre los hijos, sea positiva o negativa, cuyos efectos pueden ser los esperados o justo los contrarios, incluso perversos, jamás se sabe, que puede haber más factores fuera de control.

Ahora algo de sabiduría ajena que nos ayude a mejor conectar con lo que sea menester:

 - "La televisión ha demostrado que los seres humanos están dispuestos a mirar cualquier cosa antes que mirarse unos a otros".  (Ann Landers).

 - "Y entonces, habiendo sido privados de la cercanía de un abrazo o de una mesa compartida, nos quedarán «los medios de comunicación»".  (Ernesto Sábato).

 - "Internet es mucho más que una tecnología. Es un medio de comunicación, de interacción y de organización social".  (Manuel Castells).

Besos y abrazos,

Don.
_____

jueves, 18 de diciembre de 2014

Matutino fenomenal

¡Buenos días!

Otro extraordinario matutino más, ni más ni menos sobresaliente que el resto, en este exuberante día de otoño, plácido, dulce, soleado y con algunas nubes, de máximas ligeramente por encima de los 10ºC por los madriles, que nos hace estar pletóricos de todo tipo de bienes, de esos que jamás se deprecian, que no hay mercado para ellos, pues los producimos, damos y recibimos totalmente gratis, ya sabéis, el cariño, la alegría... y demás.

Antes de ayer por la tarde estuve en el cine viendo "Los fenómenos" ("Os fenómenos"), de Alfonso Zarauza, y con Lola Dueñas, Luis Tosar, Juan Carlos Vellido, Miguel de Lira, y Antonio Durán Morris. Es el primer largo que veo de este director.

Una mujer lleva varios años viviendo en una furgoneta junto a su pareja en la costa del sur de España, dedicándose a vender pulseras y collares a los turistas. Un día él la abandona, llora, recoge sus cosas y vuelve con su bebé a su pueblo natal en Galicia. De mala gana se reencuentra con su pasado, del que huyó. Necesita trabajar, y lo único que encuentra es trabajo como peón de obra en una constructora. Trabajo duro en un mundo de hombres en el que le costará encajar. Con coraje consigue hacerse valer y congeniar con su cuadrilla, siendo apodados por su constructor (de maneras caciquiles) como 'los fenómenos' debido a su gran capacidad para construir lo más rápido posible. Con esfuerzo ganará mucho dinero (para ser peón), aspirará a comprarse casa nueva para que su hijo esté mejor, lo hará hipotecándose hasta las trancas en el momento cumbre de la fiebre inmobiliaria, pero la crisis económica está cerca de empezar y el boom del ladrillo a punto de desmoronarse pendiente abajo.

Buena película este melodrama con cuadrángulo amoroso de un único vértice, la protagonista, y también social, pues está narrado con el trasfondo de la crisis del ladrillo, estafa piramidal en la que cayó la mayoría de la gente humilde, cegada por el oropel que le vendieron las clases económico-políticas más pudientes (España no iba tan bien). Crisis económica que condiciona la vida personal de los aplastados por ella, casi siempre los más desfavorecidos, zarandeados como peleles.

Ahora algo de sabiduría ajena, pensamientos de gente fenomenal que tal vez nos ayuden a mejorar y no tropezar dos veces en la misma piedra... ya veremos:

 - "Un genio es el que es capaz de ver la idea en el fenómeno".  (Arthur Schopenhauer).

 - "Cuando las personas tienen libertad para hacer lo que quieren, por lo general comienzan a imitarse mutuamente".  (Françoise Sagan).

 - "En las grandes crisis el corazón se rompe o se endurece".  (Honoré de Balzac).

Besos y abrazos,

Don.
_____

martes, 16 de diciembre de 2014

Matutino de Jauja

¡Buenos días!

Sí, en estos ideales y paradisíacos matutinos es donde mis fantasías e ilusiones se desbocan, especie de Arcadia en la que me solazo cada mañana, y casi me pierdo, pero encuentro la salida a la realidad gracias a mis bien amadas hadas y ninfas, faros que me guían en ambos mundos, en todos los posibles que podamos imaginar. Y solazo, precisamente solazo, no hay esta mañana, oculto tras las nubes, pero cada vez se van abriendo más y terminará por lucir a raudales, haciéndonos concebir esperanzas, nada ilusorias, de que todo prosperará.

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo "Jauja", de Lisandro Alonso, y con Viggo Mortensen y Viilbjork Malling. Es el quinto largo de este director argentino, y primero suyo que veo, que ganó un premio en Cannes. Jauja es una ciudad peruana que existe realmente y que quedó como símbolo de tierra mitológica de abundancia, felicidad y ausencia de enfermedades, dada la fertilidad de sus tierras y los ríos de plata que corrían por sus montes (en realidad vetas superficiales de ese metal). Poco a poco la leyenda fue creciendo desmesuradamente... y todos los que se fueron a buscar ese paraíso terrenal jamás volvieron.

A finales del siglo XIX, en la Patagonia, durante una campaña genocida del ejército argentino contra la población aborigen de la región, un capitán danés llega, junto a su hermosísima hija de 15 años, para trabajar como ingeniero en un remoto destacamento militar en medio de la nada. Ella se enamora de uno de los soldados y una noche huyen juntos. Al despertar, el padre iniciará en solitario la desesperada búsqueda de su hija.

Una película de muy buenas hechuras formales, preciosa fotografía, y tan crípticamente simbólica que apenas pude sacar nada de ella, que nada me dijo, y eso que intenté ver la desesperada búsqueda sin éxito de quimeras amorosas (de pasiones juveniles, de padres hacia sus hijos que piden a taciturnos gritos la emancipación, etc.). Ni siquiera el éxtasis contemplativo de sus imágenes me sacó de la atonía de su trama sin sentido, del incomprensible y metafísico viaje de su protagonista, casi alucinatorio. Otra vez, formato sin fondo, lo que hizo que se me deshilachara hasta desvanecerse por entre mis neuronas y corazón, que ni me emocionó ni interesó intelectualmente. Vacua pérdida de tiempo, salvo por la fotografía de monumental belleza.

Ahora algo de sabiduría ajena, que seguro nos ayuda a ser algo más felices y a conseguir nuestros logros, sin vanas ilusiones:

 - "La tierra de Jauja, donde se come, se bebe y no se trabaja".  (Refrán).

 - "Nuestra experiencia se compone más de ilusiones perdidas que de sabiduría adquirida".  (Joseph Roux).

 - "Nuestras ilusiones no tienen límites; probamos mil veces la amargura del cáliz y, sin embargo, volvemos a arrimar nuestros labios a su borde".  (René de Chateaubriand).

 - "Prefiero pasar por necio o estúpido, con tal de que mis faltas me den placeres o ilusiones, que ser sabio a rabiar".  (Horacio).

 - "La dicha está sólo en la esperanza, en la ilusión sin fin".  (Guy de Maupassant).

 - "Un instante de lucidez, sólo uno; y las redes de lo real vulgar se habrán roto para que podamos ver lo que somos: ilusiones de nuestro propio pensamiento".  (Emil Cioran).

Besos y abrazos,

Don.
_____

lunes, 15 de diciembre de 2014

Señorío matutino y demás servidumbres

¡Buenos días!

Estos distinguidos matutinos a los que me debo tienen sobre mí el poder de hacer conmigo lo que quieran; el caso es que ellos también a mí me sirven, en una perfecta relación biunívoca que nos hace casi uno solo, a pesar de algunas disputas que a veces nos separan, disociándome de ellos y viceversa, pero pronto volvemos a encarnarnos en lo mismo, que lo mismo somos. Y en este día de otoño, con elegante señorío, lluvias y nubes van cediendo poco a poco el paso al sol, en un continuo juego de quien tapa a quien, y con el que todos salimos ganando.

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo "La señorita Julia" ("Miss Julie"), de Liv Ullmann, y con Jessica Chastain, Colin Farrell, y Samantha Morton. De esta veterana actriz y directora noruega no había visto hasta ahora ninguno de sus pocos films como directora, aunque sí la había visto en unos cuantos suyos como actriz. Está basado en la obra teatral homónima del dramaturgo sueco August Strindberg "Fröken Julie".

A finales del siglo XIX, durante la noche de San Juan, en ausencia de su padre, Julia, una joven noble, acude a bailar a la fiesta de los sirvientes, bebe, se divierte, y trata de seducir a (y es seducida por) uno de sus criados, en un continuo juego de dominio, entre clases sociales y sexos, con momentos de atracción y otros de repulsión, tanto sexual como socialmente hablando, dejándose ambos llevar por una pasión desbocada. En estos vaivenes terminarán por encontrar una terrible salida a los problemas surgidos a causa de su desenfreno.

Buena película este drama, especie de tragedia griega, que trata de las clases sociales, del amor, la pasión, el sexo, la servidumbre, y las guerras de poder entre los sexos y las clases sociales; pues ella, altiva y caprichosa, ejerce poder sobre él, porque es de una clase social superior; sin embargo, él, educado, tosco y con aspiraciones, tiene el poder sobre ella porque es un hombre, y en esa sociedad las mujeres no pintan casi nada y tienen casi siempre las de perder. Y sobre todos planea la presencia ausente del poderoso padre.

Ahora algo de distinguida sabiduría ajena, que espero nos sirva de algo:

 - "¡Cuántas personas son como los perros, que parecen buscar un amo!".  (Madame de Swetchine).

 - "La peor forma de extrañar a alguien es estar sentado a su lado y saber que nunca lo podrás tener".  (Gabriel García Márquez).

 - "Amor es aquella cosa que pone en servidumbre a los libres y da libertad a los siervos".  (Ramón Llull).

 - "Nadie tiene dominio sobre el amor, pero el amor domina todas las cosas".  (Jean de la Fontaine).

 - "La pasión de dominar es la más terrible de todas las enfermedades del espíritu humano".  (Voltaire).

Besos y abrazos,

Don.
_____

domingo, 14 de diciembre de 2014

¡Qué cruz de matutino!

¡Buenos días!

Más bien todo lo contrario, que estos matutinos no suponen para mí la más leve carga, ni por supuesto son imposición de nadie, ni siquiera de mí mismo, pues a pesar de alguna dificultad que otra que conllevan los hago con suma liviandad, dadas las alegrías y bondades que me reportan. El otoño sigue fluyendo con naturalidad, esta vez gracias a las lubrificantes lluvias que le son propias, en este día gris y tristón, gracias al cual refulgen con mayor intensidad los hermosísimos colores del otoño, invitándonos a caminar con jubiloso ánimo por entre las casi infinitas veredas que nos depara. Carpe diem.

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo "Camino de la cruz" ("Kreuzweg"), de Dietrich Brüggemann, y con Lea van Acken, Franziska Weisz, y Florian Stetter. De este director alemán es el primero de sus largos que veo.

María, una adolescente de 14 años que vive en el seno de una intolerante familia ultracatólica va a recibir el sacramento de la confirmación. Atizada por las charlas catequistas del radical párroco, aspira a convertirse en una santa mientras, prisionera en su particular vía crucis, se debate entre sus profundas convicciones religiosas y sus naturales anhelos de adolescente, autoreprimidos, y reprimidos por su intransigente madre y el opresivo entorno eclesial, consecuencia de esa exacerbada moral católica del valle de lágrimas y de venir sólo a sufrir a este mundo, coronas de espinas y cilicios no sólo físicos sino también mentales... y morales... mundo que por cierto es el único que hay, que del otro no tenemos noticia alguna, salvo algún delirante iluminado.

Una muy buena película, de gran belleza formal, sobria, seca, tensa, dramática, y de una absoluta desolación (en todas las acepciones de la RAE), sobre las terribles consecuencias de la religión llevada al extremo. Estructurada en 14 capítulos, 14 tomas de un tirón, con los mismos títulos que las 14 estaciones del vía crucis católico, nos va sometiendo con su exposición sin tomar partido a la misma presión que esta atribulada y confundida niña padece, para que los hechos hablen por sí solos y pongan de manifiesto este absurdo. Comenzando por su aberrante adoctrinamiento, y hasta abocarla a su delirante final, en un perfecto remedo del vía crucis, cual si María, nuestra protagonista, fuera Jesús. Este film me recordó, especialmente en su parte final, a "Camino" (2008) de Javier Fesser.

Ahora algo de sabiduría ajena, que seguro nos eleva a los altares del conocimiento total, a través de los más variados caminos que esta vida nos ofrece:

 - "Todos los caminos conducen a Roma".  (Refrán).

 - "En esta vida en que estamos todos somos peregrinos del cielo, aunque caminamos por diferentes caminos".  (Antonio Mira de Amescua).

 - "La religión está en el corazón, no en las rodillas".  (Douglas Williams Jerrold).

 - "La cruz, en los pechos; y el diablo, en los hechos".  (Refrán).

 - "Lleva tu cruz cantando y no suspirando. En todo mercado vale más una sonrisa que mil lamentos".  (Charles Lamb).

Besos y abrazos,

Don.
_____

sábado, 13 de diciembre de 2014

Mis santos matutinos de todos los días

¡Buenos días!

Estos matutinos, dechado de virtudes, e incluso defectos, que tanto bien me procuran, lo hacen sin darse importancia, como tiene que ser, con cotidiana abnegación que no espera canónico premio alguno, porque sí, porque les apetece hacerlo. Por lo demás, este bondadoso otoño hoy se nos ha puesto tristón, gris y lluvioso. No sé muy bien que hacer para que le retorne la sonrisa. Santa paciencia, disfrutemos de la melancolía otoñal, que ya volverá a lucir el sol.

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo "St. Vincent", de Theodore Melfi, y con Bill Murray, Melissa McCarthy, Naomi Watts, Jaeden Lieberher, Chris O'Dowd, y Terrence Howard. Es el debut en el largo de este director.

Vincent es un viejo cascarrabias jubilado, mezquino, alcohólico y ludópata. Se instalan como nuevos vecinos suyos una madre recién separada con su hijo de once años. Dado que ella tiene que trabajar mucho para poder mantenerse ambos, no le queda otra que dejar a su hijo al cargo de tan lamentable e insoportable vecino. Enseguida ambos conectarán, y el debilucho aunque muy despierto niño empezará a ver más allá que el resto de la gente, que su muy peculiar canguro tiene su corazoncito.

Una muy buena película esta tragicomedia, con su puntito de originalidad a pesar de sus lugares comunes, que a veces bordea e incluso se introduce en el sentimentalismo, sobre todo hacia el final, pero que se hace llevadera por la descreída socarronería de este malencarado viejo sin ilusión por vivir y que encierra dentro de sí a una bella persona. Historia sobre el proceso de aprendizaje y maduración del chavalín... y del gruñón anciano, y de cómo con su contacto provocan ambos un cambio en las vidas del otro; y cuento sobre esa gente que merecería ser santificada por hacernos la vida mejor con sus cotidianos cuidados (madres, padres, hijos, familiares, amigos y vecinos).

Ahora algo de sabiduría ajena que espero nos haga mejores de lo que ya pudiéramos ser:

 - "De devociones absurdas y santos amargados, líbranos, Señor".  (Santa Teresa de Jesús).

 - "Haced el bien a cuantos más podáis, y os sucederá frecuentemente el hallaros con caras que os infundan alegría".  (Alessandro Manzoni).

 - "No busques premio, porque tú tienes una gran recompensa en esta tierra: tu alegría espiritual, que sólo el justo puede gozar".  (F. Dostoievski).

 - "Al bien hacer jamás le falta premio".  (Miguel de Cervantes).

 - "La raíz escondida no pide premio alguno por llenar de frutos las ramas".  (Rabindranath Tagore).

 - "No eres más santo porque te alaben, ni más vil porque te desprecien. Lo que eres, eso eres; y no puedes ser más grande de lo que Dios sabe que eres".  (Tomás de Kempis).

Besos y abrazos,

Don.
_____

viernes, 12 de diciembre de 2014

Otro realmente divino matutino que me sale de dentro

¡Buenos días!

Sí, y los amo sobre todas las cosas, aunque a veces diga su nombre en vano, bueno, no sigo más pues no voy a poner aquí todo el decálogo de mandamientos matutinos, que casi ni sé cual es, pero desde luego el que seguro sí que sigo es ese de que amaré al prójimo como a mí mismo, y dado lo bien que me quiero, pues imaginaros. Hoy seguimos con otro día de esplendoroso y agradabilísimo otoño, soleado y con alguna nube, que se vendrán a más a partir de mañana, pues los augurios meteorológicos vaticinan, a través de sus profetas los hombres del tiempo, que lloverá sábado y domingo. Amén.

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo "Exodus: dioses y reyes" ("Exodus: gods and kings"), de Ridley Scott, y con Christian Bale, Joel Edgerton, Aaron Paul, Sigourney Weaver, Ben Kingsley, John Turturro, María Valverde, Ben Mendelsohn,  Golshifteh Farahani, y Hiam Abbass. De este veterano director había visto la mayoría de su larga filmografía, con sus altibajos, desde su debut con la sobresaliente "Los duelistas" ("The duellists", 1978), siguiendo por la estupenda "Alien, el octavo pasajero" ("Alien", 1979), y por esa obra maestra absoluta que es para mí "Blade runner" (1982); y terminando por la ultima suya que vi, su penúltima hasta ahora, "Prometheus" (2012).

Moisés, que desconoce su origen judío pues ha sido criado como hermano, no de sangre, del hijo del faraón, se cae del guindo, se enemista con su hermano ya faraón, es desterrado al desierto, sufre delirios por falta de agua y comida y cree ver a Dios (vamos, un espejismo del desierto de los de toda la vida), se vuelve un iluminado y lidera el éxodo en busca de una tierra no sé si prometida o jurada, más bien emigración forzada por las naturales plagas que asolaron el Egipto de entonces y el maltrato de sus habitantes a los judíos, vamos, nada que no suceda, haya sucedido, y seguirá sucediendo mientras haya humanidad... y animalidad, que los animales también migran cuando escasea el alimento, y sin tanta disquisición mística. Como veis, peculiar sinopsis que os dejo del episodio bíblico, sin las mágicas recreaciones del dichoso libro testamentario, tal vez debida a mis clásicos desvaríos mañaneros cuando todavía no me liberé de los morfeicos éteres de la somnolencia.

Una buena película, con sus más y sus menos, espectacular como corresponde a una gran producción, y que nos muestra a un Dios cruel, vengativo y guerrero con los que no comulgan con él, todo un dechado de virtudes, vamos, que despliega por todo el Antiguo Testamento. Todo un tirano que exige obediencia so pena de terribles desdichas. O eso, o es una invención de mesiánicos gobernantes de antaño para tener así bajo su terrorífico yugo a dóciles hordas de plebeyos. ¡Ah!, también debería ver este film el actual pueblo de Israel, a modo de espejo que le muestre que ahora ellos hacen de egipcios con sus convecinos. ¿Qué fue de aquel mandamiento de "no codiciarás la casa de tu prójimo, no codiciarás la mujer de tu prójimo, ni su siervo, ni su criada, ni su buey, ni su asno, ni cosa alguna de tu prójimo"?... ¡Y cuanto mal hace eso del ojo por ojo!... Hace pocos meses vi otra adaptación de un episodio bíblico, "Noé" ("Noah") de Darren Aronofsky, que nada me gustó, así que la glosada hoy es mucho mejor, por comparación.

Ahora algo de sabiduría ajena, pensamientos que emigran de otras mentes hacia las nuestras, auténtico maná intelectual, comenzando y terminando por el más universal de los aforismos, presente en casi todas y cada una de las múltiples y diversas culturas que en el mundo son y han sido, y que he tomado en la forma más conocida para mí, porque me amamantaron con esa mitología, aunque no pueda amar a Dios sobre todas las cosas porque para mí está tan infinitamente alejado (o no próximo) que no existe:

 - "Ama al prójimo como a ti mismo".  (Evangelio de San Mateo 'Mt 22: 37-40', Nuevo Testamento, La Biblia).

Y yo amo a mis más allegados. Besos y abrazos,

Don.
_____

miércoles, 10 de diciembre de 2014

No concibo matutino alguno sin mácula

¡Buenos días!

Otro día de soleado frescor otoñal que nos ha engendrado esta fascinante estación en que nos encontramos, perfecta como siempre, incluso con la leve mácula de alguna que otra nube que quiere velarnos al dios Helios. Así que la inmaculada concepción no existe, es un espurio concepto, que en este mundo, el único posible de todos los que mente alguna pudiera concebir, lleno de polvo y de polvos, sin los cuales nadie existiríamos (que se lo digan a nuestras madres), las cosas son como son, aunque haya gente empeñada en creer que cierta mujer fue "empreñada" metafísicamente. Así que estos matutinos, por tanto, aunque paridos sin dolor, fueron concebidos con algún sucio defecto que otro, propios de los eventuales cortocircuitos de mis neuronas. Nadie es perfecto, y el que esté libre de pecado...

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo "Electrick children", de Rebecca Thomas, y con Julia Garner, Rory Culkin, y Liam Aiken. Es el debut en el largo de esta directora, y también guionista.

El día en que cumple 15 años una chica, que vive en una pequeña comunidad rural mormona fundamentalista, descubre un casete prohibido con música de rock, con el que queda fascinada al no haber escuchado antes nada igual. Tres meses después advierte que está embarazada y dice a todos que ha tenido una concepción inmaculada. Sus atónitos padres conciertan rápidamente un matrimonio para ella, así que huye a la gran ciudad más cercana, Las Vegas, para buscar al cantante de la canción de la cinta, pues cree que fue quien la embarazó por la gracia divina. Durante su viaje de descubrimiento se encontrará con sorprendentes revelaciones sobre su pasado, conocimiento oculto tras las místicas nebulosas de la mojigatería religiosa.

Este muy buen film, del año 2012, y que este pasado viernes se ha estrenado en la cartelera española casi de tapadillo, puede verse como una versión, ambientada hoy en día, del bíblico pasaje de la mariana inmaculada concepción, por supuesto con un bastante escéptico enfoque, no exento de soterrada y sutilísima socarronería. Dan bastante que pensar las inocentes y confundidas tribulaciones de esta niña en el mundo de hoy en día, y cuando todavía apenas se ha mitificado y mistificado su prosaica historia, posible germen de una nueva quimera, niña que durante su proceso de reveladores descubrimientos se hará de golpe, no sólo madre, sino también adulta, todo sin perder en apariencia sus creencias.

Ahora algo de sabiduría ajena, que tal vez limpie nuestras ofuscadas mentes de alguna telaraña que otra y ayudarnos a concebir mejor, mentalmente, por supuesto:

 - "El hombre cuya opinión nunca varía es semejante al agua estancada, y engendra reptiles en su mente".  (William Blake).

 - "Los grandes conocimientos engendran las grandes dudas".  (Aristóteles).

 - "Huye de los placeres que engendran tristeza".  (Solón).

 - "El sexo sólo es sucio si se hace bien".  (Woody Allen).

 - "La mentira más común es aquella con la que un hombre se engaña a sí mismo. Engañar a los demás es un defecto relativamente vano".  (Friedrich Nietzsche).

Besos y abrazos,

Don.
_____

martes, 9 de diciembre de 2014

Matutinos de compañía que no se casan con nadie

¡Buenos días!

Cada mañana me dan, y les doy, conversación a estos matutinos, pasando todos un buen rato, incluso haciendo fiesta si se tercia, pero desde luego mantienen, mantenemos, nuestras opiniones a pesar de las sugerentes pareceres que nos propongamos, aunque al final siempre acabamos bien avenidos. Tenemos hoy otro fresco y soleado día de otoño, que nos acompaña y da solaz, haciendo que todo sea más fácil en nuestra unión con lo que nos rodea.

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo "Mil noches, una boda" ("Party girl"), de Marie Amachoukeli-Barsacq, Claire Burger, y Samuel Theis, y con Angélique Litzenburger y Joseph Bour. Es el debut en el largo de este ménage à trois de directores franceses.

Una casi sesentona que siempre ha gustado de la noche, la fiesta y salir con hombres, se gana la vida en un night-club, sito en la frontera franco-alemana, como chica de compañía, haciendo que beban los clientes que allí acuden en busca de compañía femenina. El negocio va de capa caída. Un día, un antiguo cliente le pide la mano, y ella ve en este matrimonio una oportunidad para cambiar de vida. De cara a la ceremonia, reúne a sus cuatro hijos, de diversos padres, y a los que no crio y apenas vio, y va preparándose para la boda. Pero cual si fuera una primeriza (de hecho lo es, pues jamás se casó antes), le van asaltando las dudas conforme se acerca el día, y que plantea a hijos y amigas.

Una sobria y seca película, a ratos sórdida, a ratos poética, que me gustó intermitentemente, y las más de las veces no me dijo gran cosa. Muestra, en parte ficcionados, retazos de la vida de esta poco convencional mujer que sólo conoce la festiva noche y se plantea sentar la cabeza. En realidad, ella es la madre de la parte masculina de la trinidad de directores del film. Además, el resto de actores no profesionales se interpretan también a sí mismos, incluido el codirector. Realismo social con las maneras de un docudrama, documental dramatizado, que en cierto modo, y por el lado no cómico, me recordó al divertido y maternal díptico de Paco León: "Carmina o revienta" (2012), y "Carmina y amén" (2014).

Ahora algo de sabiduría ajena, que seguro nos hace compañía sin tener que casarnos necesariamente con ella:

 - "Allí donde se había soñado en compañía, resucitan dos soledades".  (Eugenio D'Ors).

 - "La compañía de la alpargata, que en el camino se desata".  (Refrán).

 - "La víspera de la fiesta vale más que ésta".  (Refrán).

 - "El noviazgo agrada más que el matrimonio, por la misma razón que las novelas son más divertidas que la historia".  (Chamfort).

 - "Un buen matrimonio sería aquel en que se olvidase, durante el día, ser amantes, y por la noche, ser esposos".  (Jean Rostand).

Besos y abrazos,

Don.
_____

domingo, 7 de diciembre de 2014

¡Mi madre, qué matutino!

¡Buenos días!

Bueno, otra vez ya buenas tardes. No creo que éste sea la madre de todos los matutinos, pero intentaré que sea lo mejor de lo mejor, como una madre lo es para casi todos nosotros. El fresco día de otoño, con máximas de 10ºC y con suaves heladas nocturnas de poco menos de 0ºC, que estamos teniendo en los madriles, me hace exclamar de puro gozo, por el bienestar que me produce su contemplación al pasear por doquier. Me siento cómodo y bien acogido por la madre naturaleza.

Ayer por la noche estuve en el cine viendo una excepcional película que desde ya os recomiendo que vayáis a ver. Un peliculón. Se trató de "Mommy", de Xavier Dolan, y con Anne Dorval, Antoine-Olivier Pilon, y Suzanne Clément (tres fenomenales actores). Quinto largo de este director de 25 años (empezó con 20), y primero suyo que veo; y desde ya me prometo intentar ver las cuatro anteriores.

Una viuda debe hacerse cargo de su muy problemático hijo de quince años, que padece un trastorno mental de hiperactividad y déficit de atención, y propenso a sufrir incontrolados arrebatos de furia. Ambos intentan conciliar su muy arisca relación de muy frecuentes altercados, punteada de esporádicos remansos de paz. La llegada de una misteriosa nueva vecina supondrá todo un bálsamo en su espinosa y dolorosa relación.

Portentosa película, por forma y contenido, que nos somete a continuas sacudidas emocionales, llevándonos casi hasta la bipolaridad, con la que también coquetean los personajes (unos más que otros). Todo es fabuloso, la música, la historia (perturbadora por momentos), el modo de narrar, la fotografía de formato cuadrado (1:1) en el que los personajes parecen encajonados, en lugar de la usual rectangular (4:3, 16:9, etc.), al que en un par de momentos se abre la imagen para mostrar sus más exultantes momentos de alegría vital, breves y fugaces como la vida misma.

Imprescindible drama que no deberíais dejar de ver, sobre una relación materno-filial, sobre el amor de una muy peculiar madre coraje, todo un personaje, con un muy estiloso formato, muy innovador por lo que a mí respecta, de gran belleza estética, particularmente en el caso de los más memorables momentos del film, acompañados por más o menos conocidas canciones. Ganó el premio del jurado del festival de Cannes de este año, inexplicablemente ex-aequo con ese infumable pestiño que fue "Adiós al lenguaje" ("Adieu au langage"), de Jean-Luc Godard, y que vi la semana pasada.

Ahora algo de sabiduría ajena, que espero sea la madre del cordero de algún que otro pesar que tal vez nos pudiese acaecer:

 - "Grande es siempre el amor maternal, pero toca en lo sublime cuando se mezcla con la admiración por el hijo amado".  (Ángel Ganivet).

 - "Jamás ha habido un niño tan adorable que la madre no quiera poner a dormir".  (Ralph W. Emerson).

 - "¿Cuál puede ser una vida que comienza entre los gritos de las madres que la dan y los lloros del hijo que la recibe?".  (Baltasar Gracián).

 - "Perdona a tu hijo si confiesa su falta, también si la oculta; pero no si la niega".  (Pitágoras).

 - "La madre es nuestra providencia sobre la tierra en los primeros años de vida, nuestro apoyo más firme en los años siguientes de la niñez, nuestra amiga más tierna y más leal en los años borrascosos de la juventud".  (Severo Catalina).

Besos y abrazos,

Don.
_____