miércoles, 30 de septiembre de 2020

Automatutino

¡Buenos días!

No, no ha adquirido un coche este matutino, ni ningún otro de ellos, que ni falta que les hace, dado que no cesan de dejar volar su imaginación, y la mía propia. Más bien es que planean por sí mismos, a su libre albedrío, sin hacer mucho caso de los dictados de mis entendederas. En estos últimos días, el otoño desvaría un poco, no parece haberse desenganchado todavía de sus recuerdos de verano, en esta mañana con sol y nubes y máxima prevista de unos muy agradables 26ºC, no en vano es tiempo del veranillo de San Miguel, así que no desentona tanto como pudiera parecer.

Este fin de semana estuve en el cine viendo "Tommaso" (2019), de Abel Ferrara, y con Willem Dafoe, Cristina Chiriac, y Anna Ferrara. Es el primer largo que veo de la filmografía de este veterano director estadounidense.

Tommaso es un veterano cineasta estadounidense que vive en Roma junto a su bella mujer, mucho más joven que él, y su hija de tres años. Compagina su dedicada vida familiar con la escritura de guiones, la asistencia a reuniones de Alcohólicos Anónimos, sus ejercicios de yoga y meditación, el aprendizaje de italiano, y la impartición de clases de interpretación. Su relación de pareja poco a poco se va apagando, a lo que nada ayuda su desbordante imaginación que le hace confundirla a veces con la realidad, ni sus celos infundados.

Película muy regularcita (nota: 4), que no me interesó gran cosa, este autorretrato del director y guionista, donde Willem Dafoe interpreta al alter ego del cineasta... es más, las actrices que interpretan a la mujer e hija del protagonista son las del director en realidad. No tengo muy claro de que va esta película, interesante a ratos perdidos, sin embargo, aburriéndome en otros (los más), donde quedan plasmadas las neuras y demonios personales de tan peculiar artista.

Ahora unas citas de sabiduría ajena, buen vehículo, creo, para el autoconocimiento:

 - "Si la regla del arte es la belleza, tiene, como todas las reglas, una excepción: los retratos, en los que el artista no ha sido capaz de prescindir del parecido con el original".  (Óscar Wilde).

 - "Todos somos niños grandes a los que la crisis nos ha tirado de culo contra el suelo... Nos levantamos metiendo tripa y sonriendo, intentando aparentar cierta dignidad, queriendo tomarnos en serio a nosotros mismos... pero lo que tenemos enfrente, lo que mejor nos retrata, es un espejo de feria".  (Víctor García León).

 - "Afortunadamente, no tenemos por qué parecernos a nuestros retratos".  (Anatole France).

Besos y abrazos,

Don.

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lunes, 28 de septiembre de 2020

Matutina interrupción sin opciones

¡Buenos días!

Es inevitable, de cuando en cuando se interrumpe la regularidad en la aparición de estos matutinos, a saber el porqué, cosas del azaroso devenir de las cosas que no suele dejar opción, o bien pocas, así que supongo no queda otra que aceptarlo y tomar la mejor decisión posible con las pocas alternativas que se nos presentan. Así que se nos aparecen esporádicamente a su libre albedrío, que ellos saben mejor que nadie cuando deben asomar la cabecita a la luz matutina. Como así hace este solecito otoñal que viene al mundo, como cada día, ininterrumpidamente, da igual que lo velen nubes o no. Las de hoy tan tenues que apenas si lo tapan, con 21ºC de máxima prevista por los madriles.

Este fin de semana estuve en el cine viendo "Nunca, casi nunca, a veces, siempre", ("Never Rarely Sometimes Always", 2020), de Eliza Hittman, y con Sidney Flanigan y Talia Ryder. Es el tercer largo, y primero que veo, de esta directora.

Una joven de 17 años, introvertida, ensimismada, taciturna, aunque algo respondona, que vive en un pequeño pueblo de Pennsylvania con su madre, padrastro y hermanos pequeños, que estudia en el instituto y trabaja como cajera de supermercado, descubre que ha quedado embarazada sin desearlo. Tras pasar el shock inicial, decide abortar, pero no puede hacerlo en su Estado sin el consentimiento paterno, y no quiere decírselo a sus padres, por lo que junto a su prima, que la apoya, coge un autobús a Nueva York con la dirección de una clínica apuntada en un papelito, con poco dinero, y sin lugar donde pasar la noche, y deambulan por la gran ciudad, absolutamente desconocida para ellas.

Una muy buena película (nota: 7) este drama sobre los miedos y dilemas de una adolescente ante un embarazo no deseado, a los que se enfrenta casi sola, narrado con autenticidad, de manera sobria, y cierta pátina de melancolía, que aboga por el derecho de las mujeres a decidir por ellas mismas sobre su reproducción y salud. Sin embargo esta naturalista y seca historia sin aderezos, y que también deja caer de soslayo y sutilmente el tema del acoso sexual (en el colegio, en la familia, en el trabajo), huye de la suma crudeza, casi que tremendismo, de la espléndida película rumana que vi hace años, y a la que me recordó, "4 meses, 3 semanas, 2 días" ("4 luni, 3 saptamani si 2 zile", 2007) de Cristian Mungiu, por los paralelismos en su estructura esencial, a saber, chica embarazada que quiere abortar y lo tiene difícil en su entorno social, por lo que debe hacerlo de tapadillo, junto a una íntima amiga que hace por ella todo lo que sea necesario.

Pues, como siempre, antes de abortar este matutino tras los besos y abrazos, ahí os dejo unas citas de sabiduría ajena, que espero nos ayuden a barajar las mejores opciones posibles ante nuestros variopintos dilemas vitales:

 - "El hombre debe decidir qué es lo que no va a hacer; entonces podrá dedicarse con vigor a lo que debe hacer".  (Mencio).

 - "Al hombre se le puede arrebatar todo salvo una cosa: la última de las libertades humanas —la elección de la actitud personal que debe afrontar frente al destino— para decidir su propio camino".  (Viktor Frankl).

 - "Debemos decidir, actuar y ser silenciosos".  (Benjamin Constant).

 - "No tratéis de guiar al que pretende elegir por sí su propio camino".  (William Shakespeare).

Besos y abrazos,

Don.

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miércoles, 23 de septiembre de 2020

Matutino desmemoriado

¡Buenos días!

No me malinterpretéis, no he perdido completamente la memoria, es solo que olvido lo que no quiero almacenar en mis entendederas, nada más, así que recuerdo perfectamente, entre muchas otras cosas, el camino que cada mañana me lleva hasta estos matutinos. Y que no se nos olvide, desde ayer estamos en el otoño de calendario, y por mucho sol, con alguna nube descarriada, que haga hoy, y que la temperatura sea tibia y agradable (24ºC de máxima prevista para hoy), cada vez queda menos para las lluvias, caída de hojas, colorida explosión de ocres, y demás.

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo "Sin olvido" ("Tlmočník", 2018), de Martin Šulík, y con Jiří Menzel y Peter Simonischek. Es el primer largo que veo de este director eslovaco.

Un anciano eslovaco, judío, intérprete de profesión, un tipo circunspecto y retraído, llama a la puerta de una casa en Viena donde cree que vive el oficial nazi que mató a su padre, y a buena parte de su familia, con la intención de cobrarse venganza. Quien le abre la puerta dice ser el hijo, un profesor jubilado, despreocupado y vividor, bebedor, ligón empedernido de jovencitas, y que no se siente culpable por los crímenes de su padre, de quien está muy distanciado. Tras el frío y tenso encuentro entre ambos ancianos, sendos hijos de víctima y verdugo, el segundo le propone al primero, quien acepta si le contrata por 100 € al día más gastos pagados, que le ayude a buscar pistas del paso de su padre por Eslovaquia durante la II Guerra Mundial, así que ambos emprenden camino en busca de supervivientes de aquella época que puedan darle referencias.

Una buena película (nota: 6) este drama con toques cómicos, también road movie que transcurre sin prisas, sobre dos hombres antagónicos que durante su periplo, y encuentros con diversas gentes, y roce mutuo, van comprendiendo y comprendiéndose, mientras van en busca de respuestas, descubriendo cosas del pasado en general, de su pasado en particular, que ambos desconocían. Historia que nos habla de memoria, de perdón, de conocimiento y toma de conciencia para que tan horrorosos hechos no vuelvan a repetirse.

Ahora, antes de que se me olvide con la despedida, ahí os dejo unas citas de sabiduría ajena, hoy más bien un monográfico de extractos de poemas de un mismo autor:

 - "Para dialogar,
preguntad primero,
después... escuchad".  (Antonio Machado).

 - "Vivir es desatinar:
tejer para destejer:
aprender para olvidar;
amar para recordar
amor que no puede ser
o la alegría de ayer
que nunca vuelve a pasar".  (Antonio Machado).

 - "Cuando recordar no pueda,
¿dónde mi recuerdo irá?
Una cosa es el recuerdo
y otra cosa es recordar".  (Antonio Machado).

Besos y abrazos,

Don.

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martes, 22 de septiembre de 2020

Matutino colegiado

¡Buenos días!

No, no voy a arbitrar partido deportivo alguno, sino que me uno a todos y cada uno de mis matutinos, con los que comparto intereses comunes, principalmente durante las mañanas, para defender conjuntamente nuestras inquietudes, mediando con los demás, en este día a caballo entre el verano que termina y el otoño de calendario que comienza, pues hoy pasamos por el equinoccio de otoño, con sol, alguna nube y 24ºC de máxima prevista por los madriles.

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo "Uno para todos" (2020), de David Ilundain, y con David Verdaguer, Patricia López Arnaiz, Ana Labordeta, y Clara Segura. Es el segundo largo, y primero que veo, de este director.

Un profesor interino debe sustituir, con el curso ya empezado, a una maestra de sexto de primaria (chavales de 11 años), por su baja por maternidad, en un colegio público de un pueblo, al que llega por primera vez. Al poco debe asumir la tarea de reintegrar a un alumno de la clase, enfermo de cáncer, tras haber superado la quimioterapia. El problema, y gordo, está en que casi ninguno de sus compañeros de clase quiere que vuelva, estaban mejor sin él.

Una buena película (nota: 6) este drama escolar que nos habla con naturalidad de acoso en las aulas, de pedir disculpas, aceptarlas, perdonar, y aceptarlo, en la que se ensalza la figura del maestro, del buen maestro, con independencia de las cuitas que estos pudieran tener, que las tienen como todo hijo de vecino, en la que el protagonista, además de enseñar a sus alumnos, él también aprende lecciones por el camino que aplicar a su algo desastrada vida personal.

Bueno, ahora toca la sabiduría ajena, y espero que estemos todos a una con ella, que seguro algo aprenderemos:

 - "Ninguno hay que no pueda ser maestro de otro en algo".  (Baltasar Gracián).

 - "La mejor enseñanza es la que utiliza la menor cantidad de palabras necesarias para la tarea".  (María Montessori).

 - "Largo es el camino de la enseñanza por medio de teorías; breve y eficaz por medio de ejemplos".  (Séneca).

 - "La enseñanza que deja huella no es la que se hace de cabeza a cabeza, sino de corazón a corazón".  (Howard G. Hendricks).

Besos y abrazos,

Don.

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lunes, 21 de septiembre de 2020

Matutino empinado y encarnado

¡Buenos días!

Como todo travieso matutino que se precie, casi siempre empinado sobre el abismo, comienza mi despertar correteando y retozando despreocupadamente, a mi libre albedrío, y sin centenero guardián que vele por mí, mientras van creciendo mis concienciadas miras conforme el sol encarnado asoma su narizota desde el horizonte hasta llegar a su cenit del mediodía, tan redondo y orondo de haber logrado su objetivo de cada día, apenas empañado por alguna díscola nubecilla, según las previsiones, como las de los 23ºC de máxima para hoy por los madriles. Y me da en la nariz también que mañana pasamos por el equinoccio otoñal.

Este fin de semana estuve en el cine viendo "Pinocho" ("Pinocchio", 2019), de Matteo Garrone, basado en el célebre cuento de Carlo Collodi, y con Federico Ielapi, Roberto Benigni, Rocco Papaleo, Massimo Ceccherini, Marine Vacth, y Gigi Proietti. De los nueve anteriores largos de este director italiano tan solo había visto sus cuatro más recientes: "Dogman" (2018), "El cuento de los cuentos" ("Tale of tales" o "Il racconto dei racconti", 2015), "Reality" (2012), y "Gomorra" (2008).

Geppetto, un viejo y humilde carpintero, crea una marioneta a partir de un leño, y lo hace con tanta dedicación y amor que acaba por cobrar vida, convirtiéndose en un niño de madera que desea ser de carne y hueso. Lo llama Pinocho y lo cría como su hijo. Pero como todo niño que se precie es inocente y travieso, siempre escogiendo el peor camino. Se escapa del colegio y vive azarosas aventuras en las que poco a poco va perdiendo su inocencia y aprendiendo duras lecciones de la vida, siempre protegido por un hada que le ha prometido convertirlo en persona si consigue portarse bien.

Una muy buena película (nota: 7) que os recomiendo, que vi con sumo agrado, dicen que más fiel adaptación al cuento original que otras anteriores, de una gran belleza formal. No es de dibujos, ni es de animación por ordenador. Es de acción real con actores, algunos muy maquillados para parecer los personajes. Es una historia de iniciación a la vida y aprendizaje, oscura, con su puntito grotesco, y que encierra bastante sabiduría.

Sabiduría como la que también contiene estas citas, muy refraneras hoy, que espero nos ayuden a vislumbrar con claridad los narigudos crecimientos de quienes pretendan embaucarnos, incluso los nuestros propios:

 - "Engañóme porque no me mintió; que si me mintiera, engañarme no pudiera".  (Refrán).

 - "Ruin habilidad, meter mentira para sacar verdad".  (Refrán).

 - "Errando se aprende a herrar".  (Refrán).

 - "Para aprender, es menester padecer".  (Refrán).

Besos y abrazos,

Don.

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jueves, 17 de septiembre de 2020

El padre, el hijo y el espíritu matutino

¡Buenos días!

Andan estos matutinos por ahí, flotando sobre mi cabeza, o dentro de ella, cual ente incorpóreo, y cuando los veo no sé si son visiones internas o externas, así que para no desquiciarme los plasmo negro sobre blanco (o sobre gris clarito). En cuanto al sentido paterno-filial de la relación que mantengo con ellos, no sé si yo les creé a ellos o ellos hicieron de mí, en parte, la persona que ahora soy, pero ¡qué más da!, que somos uno y trino, "bino" quería decir, que no vino, pues no comulgo con el alcohol. El espíritu otoñal parece querer aparecerse en esta mañana muy gris y en la que algunas gotas cayeron, aunque hasta mañana las temperaturas no se acercarán a lo otoñal, pues la máxima prevista para hoy será de 28ºC, bajando 8 grados de golpe ya mañana.

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo "The father" ("Bashtata", 2019), de Kristina Grozeva y Petar Valchanov, y con Ivan Barnev e Ivan Savov. Tercer largo de esta pareja de directores búlgaros de quienes ya había visto sus dos anteriores, "Un minuto de gloria" ("Slava", 2016) y "La lección" ("Urok", 2014).

Un desconsolado hombre acude al funeral y entierro de su esposa, rodeado de familiares y amigos, incluido su hijo, del que está distanciado. El anciano, creyente en los fenómenos paranormales, y exacerbado por una pariente que afirma haber recibido una llamada telefónica de la recién fallecida, se obsesiona con que su mujer quiere manifestársele pues poco antes de morir ella no pudo decirle algo importante, para lo que decide acudir a un gurú espiritual para tratar de comunicarse con su difunta. El hijo, sumido en sus propios problemas, con su mujer embarazada y a la que no ha dicho que iba al entierro de su madre, y con premuras laborales que le agobian, trata de quitarle de la cabeza tales tonterías y de evitarle problemas pues ve que no está en sus cabales, viéndose obligado a acompañarle en sus idas y venidas, aunque quiere regresar cuanto antes a la capital.

Una buena película (nota: 6) esta tragicomedia familiar, paterno-filial, a ratos road movie, de soterrado humor, con sorna, con situaciones esperpénticas, sobre lo absurdo (muchas veces), casi que surrealista, de la vida, sobre asumir la pérdida, sobre la incapacidad de comunicarse adecuadamente entre padres e hijos, y entre cónyuges.

Ahora toca la sabiduría ajena y ahí os dejo unas citas, vosotros diréis si de padre y muy señor mío:

 - "Si me ofreciesen la sabiduría con la condición de guardarla para mí sin comunicársela a nadie, no la querría".  (Lucio Anneo Séneca).

 - "Predícame, padre; que por un oído me entra, y por otro me sale".  (Refrán).

 - "Las personas cambian y generalmente se olvidan de comunicar dicho cambio a los demás".  (Lillian Hellman).

Besos y abrazos,

Don.

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miércoles, 16 de septiembre de 2020

Matutino en busca de una ilusión

¡Buenos días!

Otra mañana más en la que acudo de muy buena gana a la cita con este ilusionante paraíso matutino, que tengo mitificado y tanto quiero, y donde tanto recibo por el mero contacto entre nosotros, y viceversa, quid pro quo. Pues con anhelante ilusión espero la llegada del equinoccio otoñal y la bajada térmica en estos últimos días del estío, que llegará este fin de semana, la bajada térmica, que el otoño astronómico lo hará la próxima semana, con una máxima prevista para hoy de 29ºC y nubosidad en aumento que alguna gota dejará caer esta tarde.

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo "En busca de Summerland" ("Summerland", 2020), de Jessica Swale, y con Gemma Arterton, Lucas Bond, Gugu Mbatha-Raw, Tom Courtenay, Dixie Egerickx, y Penelope Wilton. Es el primer largo de esta directora británica.

Durante la II Guerra Mundial muchos niños fueron evacuados de Londres y otras grandes ciudades y acogidos temporalmente por familias del campo para evitarles los bombardeos y demás penurias bélicas. Uno de estos niños es destinado a la casa de una malhumorada mujer, escritora estudiosa de mitos y leyendas, y apesadumbrada por un amor roto en su juventud 20 años atrás, que vive aislada en una cabaña a las afueras del pueblo. De mala gana acepta el cometido, intentando librarse de él, pero poco a poco, las cosas de que el roce hace el cariño, ella irá abriendo su corazón y despertando recuerdos que creía olvidados.

Buena película (nota: 6), sin alharacas, con sus más y sus menos, este amable melodrama que vi sin desagrado, con cierto deje melancólico... y bucólico, que a través del mito de Summerland, especie de paraíso pagano, nos habla de la necesidad de todos de creer en algo, en lo que sea, seamos religiosos o no, especialmente en momentos de incertidumbre, como ante la pérdida de un ser querido (por muerte o desamor), para no perder la esperanza y seguir adelante sin amarguras con la vida que nos toca.

Ahora unas citas de sabiduría ajena, de entre las que he encontrado por ahí, y que creo os gustarán:

 - "Busca dentro de ti mismo, en tu cabeza; y allí lo encontrarás".  (Solón).

 - "Aun lo que por tus ojos veas, no todo lo creas".  (Refrán).

 - "La base de nuestra civilización está en la libertad de cada uno, en sus pensamientos, en sus creencias, sus opiniones, su trabajo y sus ocios".  (Charles de Gaulle).

 - "Cree que vivir es valioso y tu creencia te ayudará a hacerlo".  (William James).

Besos y abrazos,

Don.

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martes, 15 de septiembre de 2020

Recostado matutino que no está fuera de quicio

¡Buenos días!

Un momento de respiro este matutino, y cualquier otro que se tercie, en el que desparramo parte de mis particulares desquiciamientos, para que no me salten los goznes y poder seguir con mis habituales quehaceres cotidianos. El verano, conforme se acerca a su final equinoccial, también sigue relajándose, dejándose ir, cómodamente reclinado en la nubosidad que alguna gota dejó caer ayer por la tarde y esta madrugada, con máxima prevista de 27ºC para hoy por los madriles, y bajando sucesivamente en próximos días.

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo "Un diván en Túnez" ("Un divan á Tunis", 2019), de Manele Labidi, y con Golshifteh Farahani, Majd Mastoura, Aïsha Ben Miled, Feryel Chammari, e Hichem Yacoubi. Es el primer largo de esta directora franco-tunecina.

Una joven francesa de origen tunecino regresa a su país natal al poco de haber tenido lugar la revolución de la "Primavera árabe" y cuando empiezan a querer despuntar los radicales islámicos, para vivir y abrir una consulta psicoterapéutica en la azotea de la casa de sus tíos. Lo hace efectivamente mientras trata de conseguir el permiso para poder ejercer allí, enredada por una kafkiana burocracia.

Una buena película (nota: 6) esta simpática comedia ligera, que vi con agrado a pesar de algún fleco deshilachado, en la que con femenina perspectiva se analiza, más bien se psicoanaliza, sin demasiadas honduras, a la sociedad tunecina, un tanto desquiciada, con sus neuras, anhelos y temores, tras los turbulentos acontecimientos de su reciente pasado histórico, debatiéndose entre su tradicionalismo y la modernidad que trata de abrirse paso.

Ahora unas citas de sabiduría ajena, que espero ayuden a terminar de reposar nuestras entendederas cuando tengan tendencia a revolucionarse:

 - "El ejercicio más fructífero y natural de nuestro espíritu es, a mi juicio, la conversación. Encuentro su práctica más dulce que cualquier otra actividad de nuestra vida".  (Michel E. de Montaigne).

 - "La ciencia moderna aún no ha producido un medicamento tranquilizador tan eficaz como lo son unas pocas palabras bondadosas".  (Sigmund Freud).

 - "La incapacidad para tolerar la ambigüedad es la raíz de todas las neurosis".  (Sigmund Freud).

 - "Cuando más desquiciada está la vida de la mente, más abandonada a sí misma queda la máquina de la materia".  (Johann W.Goethe).

Besos y abrazos,

Don.

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lunes, 14 de septiembre de 2020

Un matutino anormal

¡Buenos días!

Sí, porque todo lo que no sea la perfecta normalidad, cosa que no existe, ni siquiera estadísticamente, pues es un infinitésimo en una densa masa de improbabilidades, es anormal, y todo y todos lo somos en uno u otro sentido. Dicho lo cual, tampoco espero que este sea la madre de todos los matutinos, pues por mucho que se quiera a una madre, no voy a romper todas las reglas tácitas que tenemos entre nosotros, que ni de lejos son la convención general. Por lo demás, aunque no hace tanto calor como durante la más férrea (o plomiza) canícula veraniega de hace unas semanas, yo vuelvo a sentirlo, lo que ya no me va pareciendo tan normal a pocos días del equinoccio otoñal. La máxima prevista para hoy será de 29ºC, pero lo malo de verdad es que la mínima ha sido de unos casi tropicales, y sin casi, 20ºC.

Este fin de semana estuve en el cine viendo "Un mundo normal" (2020), de Achero Mañas, y con Ernesto Alterio, Gala Amyach, Ruth Díaz, Magüi Mira, Pau Durà, y Óscar Pastor. Es el cuarto largo de este director, de quien había visto sus tres anteriores, las espléndidas, "Todo lo que tú quieras" (2010), "Noviembre" (2003), y "El Bola" (2000).

Un director de teatro y cine, separado y con una hija que estudia Derecho en la universidad, a contracorriente del mundo y sus aborregadas convenciones, en crisis profesional por su negativa a dedicarse a la más lucrativa televisión a pesar de empezar a tener serios problemas económicos, recibe la noticia del fallecimiento de su querida madre, una mujer tan excéntrica como su hijo. Esta le dijo en su día que si fallecía la tiraran al mar, frente a la costa de su pueblo, pero no las cenizas, sino el cuerpo entero. Decide cumplir su última voluntad, aunque esté prohibido por ley, y en contra de la opinión de todos los que le rodean (su hermano, su hija, su ex...), para lo que secuestra el ataúd y se dirige a la costa en una destartalada furgoneta, junto con el perro de su madre... y su hija, quien tiene la esperanza de hacerle cambiar de opinión durante el accidentado trayecto.

Una buena película (nota: 6), con tintes autobiográficos (la hija del protagonista, álter ego del director, es la hija real de este), esta simpática comedia dramática, o viceversa, que cuenta con retazos de humor algo sarcástico y con toques de absurdo lo que un hijo es capaz de hacer por cumplir la promesa hecha a su madre (en su anterior y excelente film era a la inversa, iba de lo que un padre sería capaz de hacer por su hija). También nos habla de relaciones familiares, de sus afectos y desafectos, todas tan similares y peculiares a la vez, como las mismas personas (en la película se dice que nadie es como todo el mundo); y de ser inconformista, a la par que consecuente con uno mismo, sin importar gran cosa lo que digan los demás, ni las convenciones sociales.

Ahora, como es norma en estos matutinos, unas citas de sabiduría ajena:

 - "No hay normas o muestras para la producción de una gran obra de arte. No sería arte sino fabricación sobre medida".  (John Ruskin).

 - "Un director de cine es un lector de las normas de tráfico. Un buen director de cine es un buen interpretador de un guión bueno. Y un gran director de cine es el que sabe ofrecer una visión distinta del mundo".  (Bette Davis).

 - "Normalmente se sueña una cosa y se hace otra. No te dejes engañar. Intentar realizar los sueños es lo único que al final de la vida te reconcilia contigo mismo".  (Carmen Martín Gaite).

 - "Los juicios sobre las conductas de los demás se basan en una serie de reglas éticas propias que intentamos trasladar a nuestros semejantes. Pensamos que estas normas son aplicables a los otros".  (Isabel S. Larraburu).

Besos y abrazos,

Don.

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miércoles, 9 de septiembre de 2020

Separada convivencia matutina

¡Buenos días!

No me dejo engañar por estos matutinos, que a veces me nublan el entendimiento, que me dicen que quieren vivir su propia vida, cuando en realidad están metidos en la mía, y viceversa; tan imbricados estamos, y tan implicados el uno, yo, con los otros, ellos, que diríase que nos amamos locamente, aunque mantengamos las distancias, cada uno en su sitio. Peculiar manera de convivir la que tenemos, tanto como las de cualesquiera otras relaciones que por ahí pudieran darse. Por lo demás, conforme nos vamos arrimando al otoño seguimos coexistiendo con este verano terminal, cada vez más dulce y suave, algo desenfocado, pasados ya sus más calenturientos ardores. La máxima prevista para hoy será de unos muy soleados 28ºC.

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo "Un acuerdo original" ("L'amour flou", 2018), dirigida, escrita, e interpretada por Romane Bohringer y Philippe Rebbot. Es el primer largo de este par de directores, también guionistas y actores franceses, además de ex pareja sentimental, con dos hijos y un perro, en la vida real.

Después de diez años juntos, dos hijos y un perro en común, una pareja decide separarse y seguir su propia vida como solución al rápido deterioro convivencial en su relación. Pero en cierto modo se siguen amando, aunque no como antaño, y ninguno quiere perder el estrecho contacto con sus dos hijos, así que llegan a un peculiar acuerdo mutuo, con opiniones encontradas entre amigos y familiares de ambos: venderán su actual casa, y comprarán otra nueva que diseñarán de modo que un ala sea en exclusiva de ella, y otra de él, separadas ambas, con acceso independiente al portal, y con la habitación de los niños en medio, cual bisagra, con una puerta de acceso a cada zona parental.

Una buena película (nota: 6), basada en la propia experiencia personal de su pareja protagonista, divertida y desenfadada, no exenta de cierta socarronería, con la que pasé un rato entretenido y agradable y me dio algo que pensar. Pone el foco sobre las nuevas formas de convivencia, y de estructura familiar, distintas de las usuales, y sobre peculiares maneras de enfrentarse a una disolución matrimonial.

Ahora unas citas de sabiduría ajena, que espero nos ayuden a mejor enfocar nuestra existencia, la propia o la compartida:

 - "Cuando uno tiene motivos de quejarse de un amigo, conviene separarse de él gradualmente, y desatar, más bien que romper, los lazos de la amistad".  (Catón).

 - "No existe remedio más seguro para destruir en el corazón humano el amor que separarse de la persona que amamos. Su presencia es un alimento continuo que se proporciona a un fuego mal apagado".  (Jean Jacques Rousseau).

 - "El respeto mutuo implica la discreción y la reserva hasta en la ternura, y el cuidado de salvaguardar la mayor parte posible de libertad de aquellos con quienes se convive".  (Henri Frédéric Amiel).

Besos y abrazos,

Don.

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lunes, 7 de septiembre de 2020

Matutina niñez sottovoce, con voz propia in crescendo

¡Buenos días!

Nacieron estos matutinos en sigilo, con voz queda, apenas audible por unos pocos, los más cercanos, pero poco a poco, conforme fueron madurando, se fueron haciendo valer, reafirmándose, casi que llevando la voz cantante sobre mí y echando a volar por su cuenta. Y poco a poco se van silenciando los ardores veraniegos, a pocos días de que maduren sus frutos cuando entremos en el cercano otoño, pues hoy llegaremos a una máxima, prevista, de 27ºC, con sol y algunas nubes coreándole.

Este fin de semana estuve en el cine viendo "Las niñas", de Pilar Palomero, y con Andrea Fandós, Natalia de Molina, Carlota Gurpegui, Zoe Arnao, y Francesca Piñón. Es el debut en el largo de esta directora, y se llevó el premio principal, y alguno otro más, en el recientemente celebrado Festival de Málaga.

Zaragoza, 1992. Una niña de 11 años, que vive humildemente con su madre soltera, estudia en un colegio de monjas. Llega una nueva compañera desde Barcelona, con la que enseguida hará muy buenas migas, que le abrirá los ojos y la conducirá hacia la nueva etapa que se abre ante ellas, la adolescencia, donde descubrirá las verdades y mentiras de la vida en general, y de la suya propia en particular, como el patio de su casa, donde llueve y se moja como las demás, que dice la canción infantil.

Una estupenda película (nota: 8) que, desde un punto de vista totalmente femenino, de sus intimidades, nos habla sobre el momento en que uno empieza a abrir los ojos ante la vida que le rodea, más allá del cobijo de las faldas de mamá, y se hace preguntas, y recibe como respuesta verdades y mentiras, cuando no las contestaciones se hacen esquivas, aprendiendo de la vida durante el trance, todo narrado espléndidamente, de un modo detallista y sensible, con gran naturalidad. Todo transcurre entre una escena inicial y otra final, consecuencia natural de la anterior, que todo lo dicen, aunque sea en voz tan baja que es apenas audible. Así que afinad bien los oídos, y las entendederas, y no os la perdáis.

Ahora, como quien no quiere la cosa, casi sin hacer ruido, llega el momento de la sabiduría ajena, con estas citas, cual niñas de mis ojos:

 - "La razón no tiene sexo. Como destacó la escritora norteamericana Charlotte Perkins Gilman: «La mentalidad femenina no existe. El cerebro no es un órgano sexual. Es como hablar de un hígado femenino»".  (Dominique Enright).

 - "Los niños comienzan por amar a los padres. Cuando ya han crecido, los juzgan, y, algunas veces, hasta los perdonan".  (Oscar Wilde).

 - "No enseñéis a los niños nada de lo que no estéis absolutamente seguros. Mejor que ignoren mil verdades que no que conozcan una sola mentira".  (John Ruskin).

 - "En verdad no puedes crecer y desarrollarte si sabes las respuestas antes que las preguntas".  (Wayne W. Dyer).

 - "Si tu llamas experiencias a tus dificultades y recuerdas que cada experiencia te ayuda a madurar, vas a crecer vigoroso y feliz, no importa cuán adversas parezcan las circunstancias".  (Henry Miller).

Besos y abrazos,

Don. 

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viernes, 4 de septiembre de 2020

Espejismo matutino

¡Buenos días!

Vuelve a hacer calor, aunque no tanto, creo, como para empezar a delirar y tener extrañas visiones irreales a causa de ello. Aun así me refugio en el frescor de estos matutinos para intentar evitar acabar más tarado de lo que ya pudiera estar. Día de sol, con 32ºC de máxima prevista por los madriles, cuyos rayos inducirán reflexiones, más o menos distorsionadas, en cada uno de nosotros.

Antes de ayer por la tarde estuve en el cine viendo "Abou Leila" (2019), de Amin Sidi-Boumédiène, y con Slimane Benouari y Lyès Salem. Es el primer largo de este director argelino.

Argelia, 1994. En Argel un hombre asesina de varios disparos a un ejecutivo, y enseguida acude una patrulla de policía que por allí pasaba, entablándose un tiroteo. Dos amigos de la infancia, uno de ellos con serios problemas físicos y mentales, cruzan el desierto del sur del país en un todoterreno en busca de Abou Leila, un peligroso terrorista. Conforme se adentran en el Sahara todo les parecerá cada vez más extraño, y la realidad irá evaporándose en una bruma de alucinatorios espejismos.

Una buena película (nota: 6), extraña, con excelentes maneras formales, este drama psicológico, con elipsis de violencia, salvo en la escena inicial, donde es explícita, violencia de la que solo se ven sus efectos, bastante soterradamente, cual si fuera un mal sueño, y que es más bien reflexiva, con delirios in crescendo. Nos habla, bastante metafóricamente, de corderos degollados (por iluminación divina, o lo que sea), de violencia terrorista, de terrorismo de estado, de espirales de violencia, que como consecuencia devienen en locura, en alucinaciones de la realidad, en surrealistas pesadillas. En definitiva, de las nefastas consecuencias de la violencia sobre nuestra estabilidad mental, más cuanto más sostenida en el tiempo sea.

Pues ahora algo de sabiduría ajena, cual agua que hidrate nuestras entendederas y disuelva borrosos espejismos que alteran la realidad:

 - "El espejo no hace bonito lo feo".  (Refrán).

 - "Los espejos, antes de darnos la imagen que reproducen, deberían reflexionar un poco".  (Jean Cocteau).

 - "Un instante de lucidez, sólo uno; y las redes de lo real vulgar se habrán roto para que podamos ver lo que somos: ilusiones de nuestro propio pensamiento".  (Emil Cioran).

 - "Que nadie se haga ilusiones de que la simple ausencia de guerra, aun siendo tan deseada, sea sinónimo de una paz verdadera. No hay verdadera paz sino viene acompañada de equidad, verdad, justicia, y solidaridad".  (Juan Pablo II).

Besos y abrazos,

Don.

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