jueves, 28 de enero de 2016

Final de gira matutina

¡Buenos días!

No, no voy a terminar con ellos que, (casi) como el sol, salen cada día para volver a terminar en sí mismos o en mí, y vuelta con el ciclo (casi) infinito... no es broma. El final de este tour, como el del resto, serán mis besos y abrazos, precedidos por la sabiduría ajena, y hasta el próximo matutino. Y este ciclo de días de invierno suave tampoco parece tener fin, con leves oscilaciones, para que nos vayamos confiando, enganchándonos a su dulzura, para en cualquier momento sorprendernos con la inocentada de frío intenso y quizá nieve, cosa rara, en cualquier caso, por estos lares madrileños.

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo "The end of the tour", de James Ponsoldt, y con Jesse Eisenberg y Jason Segel. Es el primer largo que veo de este director. Está basado en el libro que David Lipsky, un periodista de la revista "Rolling Stone" y también novelista, escribió sobre la entrevista que mantuvo con David Foster Wallace (1962-2008) durante el final de la gira promocional de su reputada novela "La broma infinita" ("Infinite jest", 1996), considerada una de las mejores obras de la literatura norteamericana del s.XX.

Recreación de esta entrevista de varios días entre el periodista y el escritor, en la que ambos intimaron y compartieron confidencias, experiencia que marcó al reportero, que al final no publicó su artículo en la revista, pero que acabó convertida en el libro "Aunque desde luego terminas por ser tú mismo" ("Although of course you end up becoming yourself", 2010), que se ha trasladado a este film.

Una muy buena película (nota: 7) sobre esa entrevista en la que el recelo inicial del extravagantemente normal escritor, de compleja personalidad y algo desquiciado (sufría depresión crónica y murió suicidado) por su visión de la vida como una broma sin fin y sin mucho sentido, fue poco a poco cediendo a más íntimas confidencias con el transcurrir de los días hasta desnudar su natural modo de ser (ambos). Está cuajada de estupendas reflexiones sobre nosotros y nuestra acomodada sociedad occidental... como me imagino también sucederá en la novela "Infinite jest", que desde ya tengo pendiente de leer.

También podría verse este film, en su estructura, como una comedia romántica al uso, pues la amistad que se forjó tras la entrevista vivió todas las vicisitudes propias del género, a saber, cegadora fascinación y miedos y recelos iniciales, dejar de aparentar y toma de confianza, crisis de celos (en este caso profesionales), y reconciliación final.

Bueno, pues tras haber estado gira que te gira, dándole vueltas a mi cabeza con este matutino, como con todos los demás, termino con un poco de sabiduría ajena, en su mayoría del afamado literato protagonista de la cinta:

 - "La mayoría de la gente adicta a una sustancia también es adicta a pensar, lo cual significa que mantienen una relación compulsiva y enfermiza con su propio pensamiento".  (David Foster Wallace).

 - "Te importará muy poco lo que los demás piensen de ti cuando te des cuenta de lo poco que piensan en ti".  (David Foster Wallace).

 - "Todo el mundo es idéntico en su secreta y callada creencia de que en el fondo es distinto de todos los demás".  (David Foster Wallace).

 - "Yo tuve un profesor que me caía muy bien y que aseguraba que la tarea de la buena escritura era la de darles calma a los perturbados y perturbar a los que están calmados".  (David Foster Wallace).

 - "La idea de probar a ser escritor me repelía, principalmente a causa de todos los estetas afectados que conocí en la universidad y que llevaban boinas y se acariciaban las barbillas y se llamaban a sí mismos escritores. Todavía me aterroriza parecerme a esos tipos".  (David Foster Wallace).

 - "Un mismo texto admite infinito número de interpretaciones".  (Friedrich Nietzsche).

 - "Mi forma de bromear es decir la verdad. Es la broma más divertida del mundo".  (George Bernard Shaw).

Besos y abrazos,

Don.
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miércoles, 27 de enero de 2016

La madre de mis matutinos

¡Buenos días!

Pues debo ser yo, a quienes cuido y mimo como a mi más auténtica prole, y viceversa, que cuando me encuentro mal vienen, solícitos, a mi cuidado. Y en estos días de suavidad climática en este desconocido invierno que no se sale de madre casi nunca me siento reconfortado ante tanta bondad térmica, acariciado por un maternal sol que hoy parece querer esconderse entre madrugonas neblinas que parecen arroparle.

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo "Mia madre", de Nanni Moretti, y con Margherita Buy, el propio director (y también guionista), John Turturro, Giulia Lazzarini, y Beatrice Mancini. De este cineasta italiano tan sólo había visto su anterior film como director (y actor y guionista), "Habemus Papam" (2011). Además vi un film en el que sólo estaba de actor y guionista, la espléndida "Caos calmo" (2008) de Antonio Luigi Grimaldi.

Una directora de cine de compromiso social está en pleno rodaje de su nueva película. Se acaba de separar de su novio, un actor de la película, y tiene una hija adolescente cuya custodia comparte con su ex-marido. Además debe lidiar con las rarezas de la estrella norteamericana que ha contratado para su film. Por añadidura, su anciana madre se encuentra gravemente enferma en el hospital, solícitamente atendida por el hermano de ella, quien ha dejado temporalmente su trabajo (una excedencia) para poder cuidarla a tiempo completo. Todos estos avatares familiares y profesionales la abocarán a una crisis existencial.

Una película que no me llegó (nota: 4), esta historia autobiográfica del director, encarnada por la protagonista, una mujer en crisis vital con cuyas tribulaciones no me identifiqué, que no sabe conjugar sus problemas familiares y profesionales, con la sensación de que deja de lado aquellos en favor de estos. Se mezclan realidad y ficción (ensoñaciones, recuerdos y fantasías de la protagonista), con algunos toques de humor, en esta íntima meditación consigo misma de alguien que trata de asimilar la inminente pérdida de su querida madre, mientras trata de poner en orden el resto de su vida.

Ahora algo de sabiduría ajena que espero sea para nosotros la madre del cordero:

 - "Jamás en la vida encontraréis ternura mejor, más profunda, más desinteresada ni verdadera que la de vuestra madre".  (Honoré de Balzac).

 - "Los padres, para ser felices, tienen que dar. Dar siempre, esto es lo que hace un padre".  (Honoré de Balzac).

 - "El mejor homenaje que puede tributarse a las personas buenas es imitarlas".  (Concepción Arenal).

 - "A una madre se la quiere
siempre con igual cariño;
y a cualquier edad se es niño
cuando una madre se muere".  (José María Pemán).

Besos y abrazos,

Don.
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martes, 26 de enero de 2016

Matutino viejoven

¡Buenos días!

Otro día primaveral en pleno invierno, confundiendo los entusiastas ardores juveniles con la mortecina serenidad de lo caduco, todo junto y a la vez, arrobadora ilusión vital y calmada experiencia ya casi de vuelta de todo. Máxima prevista para hoy de 15ºC con sol a raudales que discurre a toda velocidad, por su rápido paso del alba al ocaso y por su frescura de pensamiento.

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo "La juventud" ("Youth"), de Paolo Sorrentino, y con Michael Caine, Harvey Keitel, Rachel Weisz (tan guapísima como siempre), Paul Dano, Jane Fonda, Ed Stoppard, y Madalina Diana Ghenea (un pibón). De este director italiano había visto cuatro de sus anteriores films: "La gran belleza" ("La grande bellezza", 2013), "Un lugar donde quedarse" ("This must be the place", 2011), "Il Divo" (2008), y "Las consecuencias del amor" ("Le conseguenze dell'amore", 2004).

Dos octogenarios, amigos desde la infancia y afamados artistas, disfrutan de unas vacaciones en un balneario de lujo en los Alpes suizos al que suelen acudir. Uno es compositor y director de orquesta retirado, está junto a su hija y, sumido en una gran apatía, no tiene la más mínima intención de volver a retomar su carrera por mucho que le insistan; el otro, director y guionista de cine, aún en activo, está afrontando con gran ilusión su último proyecto, el que será su testamento cinematográfico, junto con unos jóvenes guionistas.

Una película deficiente (nota: 4) a pesar de algunos sobresalientes elementos, de gran belleza formal y bonito envoltorio, pero dispersa y con claros desequilibrios entre forma y fondo, que sólo brillaba a veces en algunos ingeniosos diálogos y reflexiones con mucha socarronería. El resto, plenos de vacua ostentación. Historia de dos ancianos, el uno apático y desinteresado, y el otro vitalista y todavía embarcado en proyectos, que bromean con sus achaques, básicamente de próstata, hablan de su pasado, miran estupefactos a la juventud, entre la complacencia y la nostálgica admiración de lo que ya pasó, y no prestan demasiada atención al futuro.

Ahora algo de sabiduría ajena que nos ayude a afrontar lo que esté por venir gracias a lo que otros ya cavilaron antes:

 - "La juventud es una enfermedad que se cura con los años".  (George Bernard Shaw).

 - "De mis disparates de juventud lo que más pena me da no es el haberlos cometido, sino el no poder volver a cometerlos".  (Pierre Benoit).

 - "A menudo se echa en cara a la juventud el creer que el mundo comienza con ella. Cierto, pero la vejez cree aún más a menudo que el mundo acaba con ella. ¿Qué es peor?".  (Friedrich Hebbel).

 - "El entusiasmo es el pan diario de la juventud. El escepticismo, el vino diario de la vejez".  (Pearl S. Buck).

 - "Es una desgracia que haya un intervalo tan pequeño entre el tiempo en que somos demasiado jóvenes y el tiempo en que somos demasiado viejos".  (Montesquieu).

Besos y abrazos,

Don.
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lunes, 25 de enero de 2016

Gran descubierto matutino

¡Buenos días!

Me descubro ante los matutinos, eso siempre, por su grandeza, pero no va por ahí el título de hoy; ni tampoco ellos me dejan a la intemperie, que siempre estoy y me siento bien acogido por aquí pues velamos mutuamente por nuestro bienestar -físico, mental y emocional-, lejos de cualquiera que tenga intención de perturbarlo y de cualquier canto de sirena financiero, con lo que es imposible que nuestros saldos queden en déficit, a lo más, si acaso, quedan al descubierto nuestras emociones, jamás en descubierto. Estos últimos días de descafeinado invierno nos han regalado suavísimas temperaturas, con máximas que pasan de los 15ºC y mínimas lejos de la helada, así, aunque quedemos al raso y sin techo que nos cobije, no nos ateriremos... cosas de la beneficencia climática... quería decir benevolencia, enorme.

Este fin de semana estuve en el cine viendo una sobresaliente película que desde ya os recomiendo que vayáis a ver, imprescindible. Se trató de "La gran apuesta" ("The big short"), de Adam McKay, y con Christian Bale, Steve Carell, Ryan Gosling, y Brad Pitt, entre muchos otros más, que es un film bastante coral. Es el primero que veo de los de este director, y es una adaptación del libro homónimo de Michael Lewis.

Año 2007. Cuatro analistas financieros, que no estaban en los lugares donde se deciden las finanzas mundiales, tipos marginales, desquiciados, y a los que nadie escucha, a pesar de su gran saber matemático y económico, descubren que los grandes bancos, los gobiernos, los organismos reguladores, y demás prebostes económicos se niegan a admitir, o no quieren o no saben ver, lo que para ellos es obvio, que la economía mundial va a colapsar por culpa del pinchazo de la burbuja inmobiliaria global. Así que ven el filón y se arriesgan a invertir, ante la estupefacta incredulidad de casi todos, apostando a que la economía entrará en crisis total (lo hizo en 2008), y sacando grandes réditos de ello, mientras la mayoría se arruina.

Una sobresaliente película que os recomiendo (nota: 9), repito, tanto por la forma como por el fondo, esta mordaz tragicomedia, muy real, y muy, muy divertida, con la que me reí mucho. Tragedia por lo que cuenta, y comedia por cómo lo cuenta. Se nos muestran los desconocidos y malolientes recovecos de las altas finanzas y se reflexiona sobre la quiebra del sector inmobiliario y sus derivados de inversión, que originaron la crisis económica actual. Con toques de documental ficcionado, la mar de didácticos y divertidos, se nos explican a los legos los enrevesados conceptos de artificiosas finanzas que nos llevaron hasta donde ahora estamos, debido tanto a la estupidez, inconsciencia, avaricia, o un poco de todo junto, de los importantes actores implicados, la mayoría aún de rositas o incluso más ricos que antes (mientras la plebe es más mísera), todo con mucha sorna y un enfoque tan alocado como sus personajes.

Como complemento a esta película, os recomiendo, así a bote pronto, otras cuatro más, dos documentales y dos de ficción, para complementar la poliédrica visión de lo que nos ha pasado: "Capitalismo, una historia de amor" ("Capitalism: a love story", 2009), "Inside job" (2010) de Charles Ferguson, "The company men" (2010) de John Wells, y "Margin call" (2011) de J. C. Chandor.

Bueno, ahí os dejo al descubierto unas citas de sabiduría ajena, comenzando con la que da inicio al film glosado hoy:

 - "Lo que nos mete en problemas no es lo que no sabemos, sino lo que sabemos con certeza y no es tal".  (Mark Twain).

 - "Se puede andar con una pistola cargada, se puede andar con una pistola descargada; pero no se puede andar con una pistola que no se sabe si está cargada o descargada".  (Mark Twain).

 - "Nunca hagas apuestas. Si sabes que has de ganar, eres un tramposo; y si no lo sabes, eres un tonto".  (Confucio).

Besos y abrazos,

Don.
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jueves, 21 de enero de 2016

Transición matutina

¡Buenos días!

En su continuo devenir, la vida no deja de mutar ni de cambiarnos, aunque en esencia siempre seamos los mismos, al menos en una parte, la más esencial, y en lo más hondo de nuestro ser, somos lo que somos con independencia de la carcasa que llevemos. Lo mismo ocurre con el clima, hoy hace sol, ayer y mañana hubo y habrá nubes, y tal vez llueva o nieve, o no, desde luego ayer no, pero el invierno que nos toca por estos días es el que es, no importa como se nos disfrace, lo mismo que en cualquier otra de las estaciones... aceptémoslas serenamente tal cual son, es lo que hay.

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo "La chica danesa" ("The danish girl"), de Tom Hooper, y con Eddie Redmayne, Alicia Vikander, Matthias Schoenaerts, Ben Whishaw, Amber Heard, y Sebastian Koch. De este director había visto dos de sus anteriores films, los dos últimos: "Los miserables" ("Les misérables", 2012), y "El discurso del rey" ("The king's speech", 2010).

En el Copenhague de 1926 habita un muy bien avenido matrimonio de artistas que llevan años queriendo ser padres. Ambos son pintores, él un exitoso paisajista, y ella una retratista que apenas vende. Un día en que la modelo de ella le falla, y debe terminar el cuadro con urgencia, le pide a su marido que pose en su lugar con el vestido. Luego le pedirá que pose vestido de mujer para nuevos cuadros y estos sí triunfan, y entre bromas y veras resurge en él un reprimido deseo del pasado, tomando conciencia de que es una mujer en lo más íntimo de su ser.

Una muy buena película (nota: 7) este emotivo melodrama, basado en un hecho real, sobre la primera persona que se sometió a una operación quirúrgica para hacer concordar su sexo exterior con el que sentía por dentro, el primer transexual de la Historia. De gran belleza fotográfica, con muchos planos que más parecen cuadros, es agradable de ver, bonita, y de mucha sensibilidad y que, a pesar del tema tratado, huye de la transgresión, lo que tal vez le hubiera venido, en su justa medida, algo mejor, pero querer atraer a más público es lo que tiene. Además, casi más que una película sobre el proceso de transición, no sólo física, sino también emocional, de la pareja protagonista, es una deliciosa historia de amor (básicamente de ella hacia él/ella).

Hace unos meses vi otro film que trataba similares temas trans, con la misma sensibilidad, pero con otro estilo, esa vez transitando por la difusa frontera entre realidad documental (y documentada) y ficción: "52 martes" ("52 Tuesdays") de Sophie Hyde.

Bueno, pues parece que el tránsito matutino de hoy parece que llega a su destino final, el de siempre, a la sabiduría ajena, que espero nos ayude a cambiar cuando sea menester:

 - "Cualquier destino, por largo y complicado que sea, consta en realidad de un solo momento: el momento en que el hombre sabe para siempre quién es".  (Jorge Luis Borges).

 - "Tu tiempo es limitado, de modo que no lo malgastes viviendo la vida de alguien distinto".  (Steve Jobs).

 - "Para un ser consciente, el existir consiste en cambiar, en madurar, en crearse indefinidamente a sí mismo".  (Henri Bergson).

 - "Nadie puede ser esclavo de su identidad: cuando surge una posibilidad de cambio, hay que cambiar".  (Elliot Gould).

 - "Las personas que comparten y expresan sus sentimientos se adaptan mejor a los cambios".  (Luis Rojas Marcos).

Besos y abrazos,

Don.
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miércoles, 20 de enero de 2016

Simpáticos matutinos

¡Buenos días!

Nada de detestable tienen estos días de invierno, fríos pero sin inquina, con mínimas rondando la helada y máxima prevista para hoy de 8ºC, con el sol jugueteando sin malicia por entre las nubes.

Antes de ayer por la tarde estuve en el cine viendo "Los odiosos ocho" ("The hateful eight"), de Quentin Tarantino, y con Samuel L. Jackson, Kurt Russell, Jennifer Jason Leigh, Walton Goggins, Demian Bichir, Tim Roth, Michael Madsen, Bruce Dern, y Channing Tatum. De las dirigidas en solitario por este director y guionista, salvo "My best friend's birthday" (1987) y "Jackie Brown" (1997), he visto el resto de sus películas: "Reservoir dogs" (1992), "Pulp fiction" (1994), "Kill Bill (vol. I)" (2003), "Kill Bill (vol. II)" (2004), "Malditos bastardos" ("Inglorious basterds", 2009), y "Django desencadenado" ("Django unchained", 2012).

Pocos años después de la Guerra de Secesión, una diligencia avanza a toda prisa a través del nevado paisaje de Wyoming. Lleva dos pasajeros, un cazarrecompensas y su fugitiva, y se dirigen al siguiente pueblo para que esta sea ahorcada. Se cruzarán, tirados por el camino, con un ex-soldado negro de la Unión, otro cazarrecompensas con tres cadáveres a su cargo, y poco después con un renegado sureño que dice ser el nuevo sheriff del pueblo, a quienes recogerán desconfiadamente y a regañadientes. Una gran ventisca se les echa encima y deben refugiarse en una venta del camino, donde son recibidos, en lugar de por sus dueños, por otros cuatro desconocidos. Los ocho empezarán a sospechar que nadie es quien dice ser.

Western con maneras de thriller y muchos toques de gore que, en general, me dejó ni fu ni fa (nota: 5), especialmente teniendo en cuenta el magnífico arrebato cinematográfico que me produjo su anterior film. Es demasiado larga, aunque tiene muchos momentazos de gran cine marca de la casa, pero la historia no me llegó, que por cierto me recordó a los "Diez negritos" ("Ten little niggers") de Agatha Christie, aunque en este film sólo uno de los ocho fuera negrito. Tarantino es un maestro del cine, por su desmesurada autenticidad y originalidad, por el contundente empaque visual de sus películas, por... pero esta vez no me llegó. De su filmografía sólo me entusiasmaron su anterior trabajo, "Django desencadenado", y "Pulp fiction".

Ahora algo de sabiduría ajena, por la que ya sabéis siento un gran afecto:

 - "Odioso para mí, como las puertas del Hades, es el hombre que oculta una cosa en su seno y dice otra".  (Homero).

 - "Cuando conozco a alguien no me importa si es blanco, negro, judío o musulmán. Me basta con saber que es un ser humano".  (Walt Whitman).

 - "Es triste condición de la humanidad que más se unen los hombres para compartir los mismos odios que para compartir un mismo amor".  (Jacinto Benavente).

 - "Hay que amar lo que es digno de ser amado y odiar lo que es odioso, mas hace falta buen criterio para distinguir entre lo uno y lo otro".  (Robert Frost).

Besos y abrazos,

Don.
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lunes, 18 de enero de 2016

Deseado padre matutino

¡Buenos días!

Me hubiera gustado ser el padre de alguien, pero al menos lo soy de estos matutinos, por los que velo, y a los que cuido con esmero, y viceversa, como debe ser, no importa lo que ocurra allende nosotros mismos. Hoy subirá algo la temperatura (máxima prevista de 10ºC) gracias al solecito que todavía hace, lo que es de agradecer, y espero y deseo que aporte mayor calidez ambiente a nuestras relaciones paterno-filiales, y en general.

Este fin de semana estuve en el cine viendo "El hijo de Saúl" ("Saul fia"), de László Nemes, y con Géza Röhrig, Levente Molnár, y Urs Rechn. Es el debut en el largo de este director húngaro. Es uno de los cinco films candidatos al Óscar a mejor de habla no inglesa de este año.

Año 1944 en Auschwitz. Saúl es un prisionero de ese campo de concentración que trabaja limpiando las cámaras de gas. Su infernal día a día da un vuelco cuando entre los cadáveres que debe retirar cree reconocer al que podría ser su hijo... tal vez sea así o quizá una invención de su torturada mente. Abandonando desde ese momento toda idea de supervivencia personal, y a los camaradas con los que estaba preparando un plan de fuga, sustrae ese cadáver que iba a ir al crematorio, lo esconde, y trata de enterrarlo dignamente y encontrar un rabino que le dé un adecuado funeral. Ese es ya el único objetivo en su vida... ¿vida?, no, pues desde hace tiempo es un cadáver andante.

Una muy buena película (nota: 7) este duro drama, con un enfoque absolutamente distinto sobre el tema del exterminio nazi, puro terror fuera de campo, a base de primerísimos planos de difuminado fondo, centrado exclusivamente en la peripecia personal del ensimismado protagonista durante un par de días, como dando a entender que lo demás era irrelevante para él, ya convertido en un horripilado zombie que nada siente salvo la obligación moral que se autoimpone. Intensísima historia, claustrofóbica sensación como de túnel sin luz al final. Inane acción de un hombre absolutamente aturdido y anonadado por su situación, y de bloqueado instinto de supervivencia para salvar un cadáver, en lugar de a él mismo o a sus compañeros de penurias, todavía vivos, pero que él no lo ve así, sino como su única reconciliación con el mundo y consigo mismo.

Bueno, ahora algo de sabiduría ajena, que es lo que toca hacer y al final siempre me pongo de obligado menester:

 - "La integridad no está sujeta a reglas".  (Albert Camus).

 - "Un hombre que no sabe ser un buen padre, no es un auténtico hombre".  (Mario Puzo).

 - "Lo que no podemos alcanzar, bástenos haberlo deseado".  (Plinio El Joven).

 - "Esperemos lo que deseamos, pero soportemos lo que acontezca".  (Cicerón).

 - "La muerte no es un mal, puesto que libera al hombre de todos los males, y junto con los bienes le quita los deseos".  (Giacomo Leopardi).

Besos y abrazos,

Don.
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domingo, 17 de enero de 2016

Visceral donación matutina

¡Buenos días!

Como buenos amigos míos que son, de los mejores, todo les doy cada vez que me encuentro con ellos, mi más hondos sentimientos incluso, nada melosos, que mi natural insulina retira el sobrante que nos idiotice, cuando no nos deje ciegos ante la verdadera realidad. Fría y soleada mañana de domingo por los madriles, con madrugona helada (-2ºC) y máxima prevista de 6ºC, en la que el invierno nos da también lo mejor de sí, aunque no todo, que parece reservar el resto (quizá una nevada) para algún otro día, aunque tal vez se arrepienta de dárnoslo al final.

Este fin de semana estuve en el teatro viendo una obra que desde ya os recomiendo, que me hizo mucho de reír y dio que pensar. Se trató de "Páncreas", escrita por Patxo Tellería, dirigida por Juan Carlos Rubio, e interpretada -magníficamente- por José Pedro Carrión, Fernando Cayo, y Alfonso Lara. Como estará de tournée por algunos teatros peninsulares, e incluso insulares, si tenéis oportunidad id a verla en cualquiera de las actuaciones de su gira.

Tres amigos que se conocieron en una terapia de grupo de gente con trastornos psicológicos se reúnen en casa de uno de ellos. El primero, con problemas de autoestima, padece cáncer de páncreas y está a la espera de un trasplante que nunca llega (le quedan dos meses de vida). El segundo, de tendencias suicidas, se quitará la vida dentro de un año, cuando cumpla los 60, por el temor de padecer un Alzheimer hereditario y quedar como un vegetal el resto de su vida. Y el tercero, con problemas para controlar su ira, durante la velada les propone a los otros dos que uno adelante su suicidio previsto para que el otro pueda tener su trasplante antes de morir.

Una estupenda obra de teatro (nota: 8), por forma y fondo, esta tragicomedia con muy divertidos golpes de humor negro, y hablada en verso, cual si una obra del Siglo de Oro se tratase. Se reflexiona sobre la amistad, sobre la vida y la muerte (y la suerte), y hasta donde seríamos capaces de llegar por un ser querido. Insólita historia que nos presenta la condición humana, hasta sus más íntimas entrañas, con sus miserias y noblezas, enfrentada a esta disparatada situación que se nos plantea. No os la perdáis.

Amigos míos, bueno, ahí os dejo algo de sabiduría ajena que espero que, además de tocaros el intelecto, os remueva por los adentros:

 - "Es preciso prestarse a los otros, pero no darse sino a uno mismo".  (Montaigne).

 - "Darse no tiene sentido más que si uno se posee".  (Albert Camus).

 - "El que quiera dar algo, que tenga cuidado de que los que acepten sean capaces de comprender cuál es el sentido de sus donaciones".  (Friedrich Nietzsche).

 - "Oro, poder y riquezas
muriendo has de abandonar,
al cielo sólo te llevas
lo que des a los demás".  (Eduardo Marquina).

Besos y abrazos,

Don.
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jueves, 14 de enero de 2016

Matutino en tierra extraña

¡Buenos días!

Da igual donde vayan, que yo siempre me los encuentro en el momento oportuno, y con ellos viajo durante un rato en una especie de reencuentro conmigo mismo para saber mejor quien soy. Esta mañana se ha vuelto a poner muy gris, y tal vez llueva en breve; parece que el invierno quisiera retornar al otoño, pero no, sigue siendo el mismo, pues las temperaturas, sin ser gélidas, son lo suficientemente desapacibles como para hacernos sentir que es el que es.

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo "Eisenstein en Guanajuato" ("Eisenstein in Guanajuato"), de Peter Greenaway, y con Elmer Bäck y Luis Alberti. De este veterano director y guionista británico, cuyos films tienen un particular estilo visual bastante barroco y abigarrado, y cierta desmesura en el contenido, tan sólo había visto uno de sus anteriores, "El contrato del dibujante" ("The draughtsman's contract", 1982).

El maestro del cine soviético, Sergei Eisenstein, aclamado por su película "El acorazado Potemkin" (1925), viaja en 1931 a Guanajuato (México), tras su paso por Hollywood donde su proyecto fue rechazado por los magnates de la industria, para rodar su próximo film, que terminará inacabado tras un año de estancia allí, pues con la ayuda de su cicerone local descubrirá un nuevo mundo, a Eros y a Tanatos, y a su propio yo, saliendo del armario como consecuencia, y dispersándose en demasía de sus quehaceres profesionales.

No me gustó (nota: 2) esta muy libre mirada a esa fase de la vida del cineasta soviético, nada saqué en claro, no le vi el sentido, pues las más de las veces me pareció una paja mental, una pasada de rosca, una procaz provocación, no de mi agrado. Eso sí, tuvo algunos interesantes hallazgos visuales, pues entre tanta densidad vanguardista, o eso se pretendía, siempre algo habrá que poder sacar en claro, pero en este caso sólo del formato, que el contenido fue todo un desbarro para mí.

Bueno, ahora algo de sabiduría ajena que nos ayude a sentirnos como en casa y a encontrarnos a nosotros mismos:

 - "El que se pierde es el que encuentra las nuevas sendas".  (Nils Kjaer).

 - "El trabajo ayuda siempre, puesto que trabajar no es realizar lo que uno imaginaba, sino descubrir lo que uno tiene dentro".  (Boris Pasternak).

 - "Te conocerás a ti mismo en cuanto empieces a descubrir en ti defectos que los demás no te han descubierto".  (Friedrich Hebbel).

 - "Cada nuevo amigo que ganamos en la carrera de la vida nos perfecciona y enriquece más aún por lo que de nosotros mismos nos descubre, que por lo que de él mismo nos da".  (Miguel de Unamuno).

Besos y abrazos,

Don.
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miércoles, 13 de enero de 2016

Exitosa alegría matutina

¡Buenos días!

El invierno va triunfando a cada día que pasa, y poniéndose cada vez más contento, pues está consiguiendo realizarse a sí mismo, con esta madrugada en la que por fin las mínimas han sido de suave helada (-1ºC) por los madriles, y con máxima prevista de 9ºC gracias al sol que asoma ya desde esta misma mañana, con tendencia a más frío conforme avancemos las jornadas.

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo "Joy", de David O. Russell, y con Jennifer Lawrence, Robert De Niro, Bradley Cooper, Isabella Rossellini, Édgar Ramírez, Diane Ladd, Virginia Madsen, Dascha Polanco, y Elisabeth Röhm. De este director había visto antes cuatro de sus anteriores films, "La gran estafa americana" ("American hustle", 2013), "El lado bueno de las cosas" ("Silver linings playbook", 2012), "The fighter" (2010), y "Tres reyes" ("Three kings", 1999).

Se nos cuenta la vida de Joy Mangano, una humilde trabajadora con ilusión por inventar cosas, parte de una familia bastante peculiar y caótica, logrando triunfar, a pesar del despiadado mundo comercial, con sus humildes invenciones, básicamente de productos domésticos, como por ejemplo una evolución de la fregona (era autoescurrible), su primera patente, llegando a convertirse además en uno de los rostros más populares de los canales de teletienda estadounidenses.

Una buena película en general (nota: 6), pero irregular en su desarrollo, con un muy buen principio que nos presentaba el pintoresco caos familiar que rodeaba a nuestra protagonista, siguiendo con altibajos de entre los que brotaba de repente algún arrebato que me alegraba la velada cinematográfica. Especie de "melodramedia", basada en un personaje real, sobre la tenacidad y la fe en uno mismo, necesarios para triunfar en el implacable mundo de los negocios, a pesar de todas las trabas que uno pueda encontrarse.

Ahora algo de sabiduría ajena, que seguro nos alegra el intelecto y puede que garantice nuestro éxito vital:

 - "Nunca emprenderíamos nada si quisiéramos asegurar por anticipado el éxito de nuestra empresa".  (Napoleón).

 - "No hace falta confiar para emprender ni tener éxito para perseverar".  (Guillermo El Taciturno).

 - "Para el éxito sobra el talento; para la felicidad, ni basta".  (Camilo José Cela).

 - "Si exagerásemos nuestras alegrías como hacemos con nuestras penas, nuestros problemas perderían importancia".  (Anatole France).

 - "Alegría ten, y vivirás bien".  (Refrán).

Besos y abrazos,

Don.
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martes, 12 de enero de 2016

Matutinos con los que congenio

¡Buenos días!

Fresca mañana, con algunas nubes que, sin embargo no impedirán que salga el sol y la máxima suba hasta los 10ºC. Otro día perfecto que pasa a nuestro lado y que trataré de disfrutar con plenitud, dejándome llevar, sin hacerme demasiadas preguntas, partiendo desde estos matutinos que me comprenden y a los que comprendo, y que obviamente tienen gran afinidad conmigo.

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo una preciosa película que desde ya os recomiendo. Se trató de "No es mi tipo" ("Pas son genre"), de Lucas Belvaux, y con Émile Dequenne (una preciosidad) y Loïc Corbery. Es el primer film que veo de este director belga, que está basado en la novela homónima de Philippe Vilain.

Un joven escritor, y profesor de filosofía en un instituto parisino, es destinado por un año a otro instituto en una pequeña ciudad de provincias, todo un drama para él, pues nada existe más allá de los límites urbanos de la gran metrópoli. Mortalmente aburrido en esa nueva localidad, de la que escapa todos los fines de semana para volver a París, conoce a una bella peluquera, madre divorciada y con un hijo, con la que inicia una relación sentimental para matar el tiempo mientras está allí. No pueden ser más distintos; él, un frío y racional teórico intelectual al que no le gusta comprometerse; y ella, lectora de novelas rosa, prensa del corazón, y aficionada a películas románticas y a cantar cada fin de semana en un karaoke con sus amigas, pero pragmática, muy intuitiva y de gran sabiduría natural.

Una estupenda película (nota: 8) que me encandiló, y no sólo por la actriz principal, y que os recomiendo. Comedia romántica, bueno, historia romántica, que no era de reír ni tampoco un drama, que nos relata un amor de esos que a priori se diría que no llegarán a buen puerto, nada convencional desde ciertos puntos de vista, narrado a través de esta pareja unida por la pasión mutua, que les hace replantearse sus modos de ver la vida. Las canciones cantadas en el karaoke tienen mucha relación con cómo evolucionan los sentimientos amorosos. Una espléndida reflexión sobre el amor, qué es lo que puede hacerlo surgir, o hacerlo morir... distintas causas según cada cual, que todos y cada uno de nosotros tenemos nuestros motivos... y nuestra opinión al respecto.

Ahora algo de sabiduría ajena que nos ayude a congeniar con quien pudiera pasar a nuestro lado que nos interese:

 - "Cuando la felicidad nos sale al paso, no lleva nunca el ropaje con el cual creíamos encontrarla".  (Anónimo).

 - "El amor es cuestión de oportunidad. Puedes encontrar al amor de tu vida, pero si llegas demasiado tarde o demasiado pronto, no habrá nada que hacer".  (Wong Kar Wai).

 - "En nuestra vida normal estamos atrapados por el tiempo, que gobierna nuestra existencia. La vida real no da posibilidad de rebobinar. No sabes si vas a estar en el momento adecuado con la persona equivocada, o viceversa; y todos sentimos curiosidad por saber qué hubiese pasado si en lugar de ir a un sitio hubiéramos ido a otro".  (Wong Kar Wai).

 - "Hay un secreto para vivir con la persona amada: no pretender modificarla".  (Jacques Chardonne).

 - "No llores porque las cosas han terminado, sonríe porque han existido".  (L. E. Boudakian).

Besos y abrazos,

Don.
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lunes, 11 de enero de 2016

Amoroso matutino de sol a sol

¡Buenos días!

No es que haya estado toda una jornada currándome este matutino, en los que desde luego trato de poner toda mi pasión, ni tampoco es que haya visto rayo de sol alguno hasta ahora desde este fin de semana muy nuboso y lluvioso, pero los habrá en esta mañana muy otoñal en pleno invierno, con máxima prevista de 10ºC, pues se espera que se abran claros ya antes del mediodía. Así que difícil cualquier sofocón o insolación, que todavía queda lejos el verano, pero con estos pocos rayitos que se van colando entre las nubes ya vamos sintiendo de nuevo unas inmensas ganas de disfrutar buenamente y sin cortapisas de todo lo que nos rodea.

Este fin de semana estuve en el teatro viendo "Insolación", adaptación de Pedro Villora de la novela homónima (1889) de Emilia Pardo Bazán, dirigida por Luis Luque, e interpretada por María Adánez, José Manuel Poga, Pepa Rus, y Chema León. Hace treinta años había visto otra adaptación de una novela de esta escritora adelantada a su tiempo. Se trató de "Los pazos de Ulloa", a través de la excelente serie televisiva emitida en 1985 y que vi por entonces.

Durante un tórrido verano en el Madrid de finales del s.XIX, una mujer de la nobleza, de intachable reputación y madre de una hija, viuda desde hace dos años, conoce a un apuesto joven de verbo seductor y maneras donjuanescas, algo calavera, que intenta conquistarla a toda costa, pero ella, aunque intenta alejarse de él a pesar de sus más íntimos deseos, por eso de las habladurías, acabará enamorándose (y viceversa) y dejándose arrastrar a una aventura amorosa, sin importarle ya el que dirán.

Muy buena obra de teatro (nota: 7) esta comedia, adaptación de la novela con tintes autobiográficos, que escandalizó en su día a la encorsetada sociedad de la época por su manera desprejuiciada de describir el deseo de una mujer hacia un hombre, sociedad que medía con distinto rasero iguales comportamientos según el sexo de que se tratase. Se denuncia la triste situación de las mujeres de esa época, ninguneadas, educadas para ser un mero adorno social, un simple apéndice de sus hombres (padres o maridos); también se critica el decir de boquilla de vacuos galanes cortejando mujeres o el de presuntos liberales que luego pensaban, o decían por detrás, lo contrario... la hipocresía de toda la vida, vamos.

Además, el título hace referencia a como el clima afecta a nuestro comportamiento, como ese sol desmedido que desata pasiones, sobredosis solar como paralelismo de los sofocos amorosos causados por un ardoroso pretendiente cuyos persistentes requiebros logran traspasar la gris capa nubosa de una aburrida mujer, presa de los convencionalismos sociales, y le terminan por dar la vida, la alegría de vivir.

Ahora algo de sabiduría ajena, espero que buen bálsamo que sane nuestros sofocos y quemaduras vitales:

 - "La educación de la mujer no puede llamarse tal educación, sino doma, pues se propone por fin la obediencia, la pasividad y la sumisión".  (Emilia Pardo Bazán).

 - "Le aconsejaría que mirase más a la fama que a la hacienda; porque la buena mujer no alcanza la buena fama solamente con ser buena, sino con parecerlo; que mucho más dañan a las honras de las mujeres las desenvolturas y libertades públicas que las maldades secretas".  (Miguel de Cervantes).

 - "Salga el sol por Antequera, y póngase por donde quiera".  (Refrán).

 - "El amor consuela como el resplandor del sol después de la lluvia".  (William Shakespeare).

 - "Amar y ser amado es sentir el sol por ambos lados".  (David Viscott).

Besos y abrazos,

Don.
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martes, 5 de enero de 2016

Matutino nada incidental

¡Buenos días!

Sí, pues no es inesperado, ya que surge como consecuencia de la película que vi ayer, y tiene, como todos los demás, mucha importancia para mí. Pues bien, tras las lluvias y ventoleras de ayer, esta mañana el sol quiere abrirse paso entre los claros nubosos, con algo más de frío (9ºC de máxima prevista para hoy), una breve incidencia del carrusel de lluvias que seguirán cayendo en próximos días, consecuencia del tren de borrascas atlánticas que por aquí seguirán pasando a toda velocidad.

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo "Incidencias" de José Corbacho y Juan Cruz, y con Carlos Areces, Roberto Álamo, Lola Dueñas, Ernesto Alterio, Toni Acosta, Miki Esparbé, Nuria Gago, Aida Folch, y Rubén Ochandiano, entre varios otros más, que es una comedia coral. Es el tercer largo de este par de directores, tras "Cobardes" (2008) y "Tapas" (2005). También lo son de la muy buena serie televisiva "Pelotas" (2009-2010).

Nochevieja por la tarde. Un tren de alta velocidad que viaja de Barcelona a Madrid se detiene sin causa aparente en mitad de un inhóspito páramo mesetario, y en pleno temporal de nieve, quedando absolutamente incomunicados todos sus ocupantes. Las urgencias por llegar a sus destinos exacerban sus inquietudes, mezquindades y desconfianzas, sacando cada cual lo peor de ellos mismos.

Buena película (nota: 6) esta comedia coral, con sus más y sus menos, con momentos muy divertidos y otros no tanto, que podría haber sido mucho mejor. Apunta maneras, pero no me llegó a cuajar del todo. Gente normal ante una incidencia normal, y de cómo, gracias a la congénita estupidez del género humano, todo deviene en un disparate generalizado, ante el que algunos pocos miran atónitos. Especie de metáfora de esta España nuestra, en la que el tren parado podría ser la economía estropeada de la crisis, por ejemplo.

Bueno, pues sin incidencias dignas de mención, llegamos a la sabiduría ajena, no por accidente:

 - "En las muchedumbres lo que se acumula no es el talento, sino la estupidez".  (Gustave Le Bon).

 - "Nadie está libre de decir estupideces. Lo grave es decirlas con énfasis".  (Montaigne).

 - "Una necedad repetida por treinta y seis millones de bocas no deja de ser una necedad".  (Anatole France).

 - "Todo imbécil execrable, que no tiene en el mundo nada de que pueda enorgullecerse, se refugia en este último recurso, de vanagloriarse de la nación a que pertenece por casualidad".  (Arthur Schopenhauer).

 - "Atribuimos a la casualidad nuestras desgracias, jamás nuestra prosperidad".  (Charles Régismanset).

 - "¿Qué puede haber de imprevisto para el que nada ha previsto?".  (Paul Valéry).

Besos y abrazos,

Don.
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lunes, 4 de enero de 2016

Visionario afán vespertino

¡Buenas tardes!

Otro matutino al que me entrego en cuerpo y alma, tanto que no vi pasar las horas, ensimismado en mi labor, y me salió un vespertino, lo último de lo último, si exceptuamos la noche, y que espero sea de vuestro agrado y os sea útil de algún modo. A pesar del desapacible clima, con fortísimas rachas de viento y pertinaz lluvia, todavía no veo llegar el invierno meteorológico, ni esforzarse lo más mínimo, que más parece que estemos de crudo otoño, por las temperaturas de estos días, con 12ºC de máxima y 9ºC de mínima previstos para hoy.

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo "Steve Jobs", de Danny Boyle, y con Michael Fassbender, Kate Winslet, Seth Rogen, Jeff Daniels, y Katherine Waterston. He visto casi todos los anteriores films de este espléndido director, en concreto: "Trance" (2013), "127 horas" ("127 hours", 2010), "Slumdog millionaire" (2008), "Sunshine" (2007), "Millones" ("Millions", 2004), "28 días después" ("28 Days Later", 2002), y "Trainspotting" (1996). Todos, al menos, me gustaron mucho, y algunos me parecieron mucho más que sobresalientes ("Millones" y "Trainspotting").

A partir de tres retazos de su vida, durante los pocos minutos previos al novedoso lanzamiento comercial de tres de sus más icónicos productos (el Macintosh en 1984, el NeXTcube en 1988, y el iMac en 1998) se nos retrata a este mito de la informática, un brillantísimo genio de muy difícil trato, obcecado, perfeccionista, y muy pagado de sí mismo, a través de la relación con sus colaboradores más cercanos y con su hija.

Una espléndida película (nota: 8) con mucho ritmo, de trepidantes y acerados diálogos, que en tres pinceladas retrata a este fascinante personaje cuyos inventos han hecho cambiar este mundo, cambiar el modo en que nos comunicamos, y eso que él tenía muchas dificultades en bien comunicarse con sus allegados, como también le pasaba al creador de Facebook, como nos mostraron en "La red social" ("The social network", 2010) de David Fincher. El guión de ambas, no en vano, por sus similitudes, es de Aaron Sorkin.

Hace dos años y pico vi otro film basado en su vida, éste un biopic más convencional, aunque sosito, pero que puede servir de complemento al hoy glosado. Se trató de "Jobs" (2013) de Joshua Michael Stern.

Ahora algo de sabiduría ajena, faro que tal vez nos ayude a mejor ver lo que esté por venir:

 - "Los microprocesadores se están metiendo en todo. En un futuro cercano no habrá ningún accesorio -salvo una escoba, si acaso- que no tenga un procesador dentro".  (Arthur C. Clarke).

 - "La única posibilidad de descubrir los límites de lo posible es aventurarse un poco más allá de ellos, hacia lo imposible".  (Arthur C. Clarke).

 - "Prefiero los sueños del porvenir a la historia".  (Thomas Jefferson).

 - "Sólo se deja guiar un pueblo cuando se le enseña un porvenir; un jefe es un comerciante de esperanzas".  (Napoleón).

 - "Los grandes hombres y mujeres tienen confianza en el destino, conocen parte de su porvenir, porque son parte de él".  (Maurice Maeterlinck).

Besos y abrazos,

Don.
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sábado, 2 de enero de 2016

Casi un parricidio matutino

¡Buenos días!

En este soleado y agradable día de transición entre las lluvias de ayer y las de mañana, con máxima prevista en los madriles de 10ºC, no es que me haya puesto a abrasar en infernal parrilla alguna a ninguno de mis matutinos, que me gustan al natural, tal cual son. Lo del sufijo "cidio" del título es por la hora de publicación, al filo del vespertino, cuando ya la mañana casi murió por la llegada de la tarde, que no por hacerlos desaparecer, que hay buena fraternidad entre todos y yo, que los di a la luz del mundo, los mimo y cuido, como ellos también hacen conmigo, en total armonía y mutua bondad.

Ayer por la noche estuve en el teatro viendo una obra de teatro. Se trató de "Los hermanos Karamazov", adaptación de la inmortal novela de Fiódor Dostoievski, una de las cumbres de la literatura universal, dirigida por Gerardo Vera, y con Juan Echanove, Fernando Gil, Óscar de la Fuente, Marta Poveda, Markos Martín, Lucía Quintana, y Ferrán Vilajosana, entre otros. De esta obra hay una adaptación cinematográfica homónima, de 1958, dirigida por Richard Brooks, y que me suena que no vi entera cuando la pasaron por televisión.

Un rico terrateniente, viudo, dado a todos los vicios, es todo un déspota con sus cuatro hijos. El mayor, de su primer matrimonio, es militar, dilapidador de su fortuna, y el más parecido al padre en su modo de comportarse. El segundo, de su segundo matrimonio, es un frío y racional filósofo. El tercero, también de su segundo matrimonio, es un muy bondadoso y espiritual novicio de un convento. Y el cuarto, hijo ilegítimo tenido con una vagabunda, vive en casa del patriarca como criado, casi un esclavo. El padre y el primogénito están enamorados de la misma mujer y tienen continuas disputas por ella y por la herencia de la primera esposa. El tiránico progenitor quiere que su hijo mayor case con una rica heredera, enamorada perdidamente de éste por un pasado favor recibido, para aumentar su fortuna, pero él ama a la otra, y además es amada por el segundo hijo. El tercer hijo trata de mediar en todas estas trifulcas familiares, pues todos los hermanos, salvo él, odian a su padre de uno u otro modo.

Espléndida representación teatral (nota: 8), a la que tal vez hubiera recortado algo de las tres horas y veinte minutos de su duración, de sobresalientes puesta en escena, coreografía e interpretaciones actorales, e iluminación, basada en la intensísima y tremenda historia narrada en la novela, que nos habla de muchos grandes temas. Básicamente de la naturaleza humana y de que en todos y cada uno de nosotros está compendiado simultáneamente lo mejor y lo peor, en diferentes dosis, eso sí, pero siempre podremos tornarlo. También de moral y religión (o de su ausencia), de amor y odio, de culpas, arrepentimientos y remordimientos, del castigo y del perdón. Además de nuestra errada visión de los demás, de que a veces vemos bondad en la maldad, y viceversa, lo que nos lleva a sufrir más de la cuenta, y a hacer sufrir a los demás.

Ahora algo de sabiduría ajena, que tal vez nos ayude a sacar lo mejor de nosotros mismos para disfrute de nuestros hermanos:

 - "Ningún amigo como un hermano; ningún enemigo como un hermano".  (Proverbio indio).

 - "Siete hermanos de un vientre, cada uno de su miente".  (Refrán).

 - "Quien dijo hermano, dijo herir con la mano".  (Refrán).

 - "Entre padres y hermanos, no metas tus manos".  (Refrán).

 - "Basta una gota de miedo para que el amor se convierta en odio".  (James M. Cain).

 - "Y no hay deleites humanos
ni más grandes ni más sanos
que estos que son mi ideal:
pan de trigo candeal
comido en paz y entre hermanos".  (José María Gabriel y Galán).

Besos y abrazos,

Don.
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