El reino de los crecientes matutinos, algo lunáticos

¡Buenos días!

En estos matutinos, que cada vez, día a día, van siendo más, en este espacio imaginario en el que dejo volar mi alocada, díscola y dislocada mente, y donde mis hadas y ninfas no paran de revolotear en mi derredor, reinando sobre mi soleado ser, vuelve a hacer calor de verano (33ºC de máxima prevista para hoy), a menos de una semana del solsticio, cuando tal vez pueda ver el sol de medianoche, a poco que vuele hacia el fresco norte, y cuyo brillo seguramente no dejará que veamos fase lunar alguna.

Este fin de semana estuve en el cine viendo "Moonrise kingdom", de Wes Anderson, y con Jared Gilman, Kara Hayward, Edward Norton, Bruce Willis, Bill Murray, Frances McDormand, Tilda Swinton, y Harvey Keitel. Es el séptimo largo de este director, de quien había visto dos de sus anteriores, siempre con un punto de vista marciano (o lunático) de las cosas, "Viaje aDarjeeling" ("The Darjeeling Limited", 2007), y "Life acuatic" ("The life acuatic with Steve Zissou", 2004).

En un verano de los años 60, en una isla de Nueva Inglaterra (Estados Unidos) hay instalado un campamento de boy-scouts, del que ha escapado un chaval de 12 años, huérfano con problemas de integración. Una chica de la misma edad también huye de su casa, situada cerca del campamento. Están secretamente enamorados, y descontentos con sus respectivas situaciones familiares. Trazan un plan y huyen en busca de aventuras. La familia de ella y las autoridades buscan a los fugitivos. Mientras tanto, en pocos días, llegará a la isla una devastadora tormenta que amenaza la seguridad de todos.

Una estupenda película, la primera que me gusta de verdad de este director de extravagantes películas. Una especie de cuento sobre dos preadolescentes, bastante más listos y maduros que los adultos que les rodean, que se enamoran. Una tierna historia, con su puntito de nostalgia, de lo que supone enamorarse a esa edad, llena de pura ilusión. Pero sobre todo, lo que creo que subyace en este film, es que tras una buena crisis (o tormenta), lo que surge después es mucho más fecundo que antes, tras haberse barrido lo yermo e improductivo.

Ahora, entremos en el reino de la sabiduría ajena, que seguro nos aporta crecientes ganas de alcanzar la luna:

 - "La originalidad de un autor depende menos de su estilo que de su manera de pensar".  (Anton Chejov).

 - "Divina calma del mar,
donde la luna dilata
largo reguero de plat
que induce a peregrinar".  (Leopoldo Lugones).

 - "Lo verdaderamente mágico del primer amor es la absoluta ignorancia de que alguna vez ha de terminar".  (Honoré de Balzac).

 - "Cuando la fortuna nos descubre su bello rostro, es precisamente cuando la tormenta comienza a cernerse sobre nuestra cabeza".  (Píndaro).

 - "Con frecuencia, los mismos peligros sirven para salvarnos la vida".  (Quintiliano).

 - "Por muy larga que sea la tormenta, el sol siempre vuelve a brillar entre las nubes".  (Khalil Gibran).

Besos y abrazos,

Don.
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Pródigo intercambio matutino

¡Buenos días!

En breves días, la desprendida primavera cambiará sus roles con el fecundo verano, sin tapujos, sin remordimientos, como cada año. Y generosos dones también recibo de estos matutinos, en abundancia y con frecuencia, y jamás me harto de ellos; matutinos que me acogen en su regazo cada mañana que vuelvo a ellos, sin reproche alguno de mis correrías vespertinas. Y viceversa.

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo "Four lovers" ("Happy few"), de Antony Cordier, y con Marina Foïs, Elodie Bouchez, Roschdy Zem, y Nicholas Duvauchelle. Es el segundo largo de este director, y primero suyo que veo. Antes que nada, una asombrada reprimenda a los distribuidores cinematográficos españoles (quizá a algunos solo): el caso es que, de cuando en cuando, me sorprenden con alguna estrambóticamente libérrima traducción del título original del film, pero esta vez ya me noquearon del todo, pues con este film francófono de título original en inglés, se me desmarcan con otro ¿"traducido"? en inglés, que nada tiene que ver con el anterior ... !!!??? ...

Una mujer conoce en su trabajo a otro hombre. Ambos están en la treintena avanzada, son felices, casados y con hijos. Se caen muy bien y deciden organizar una cena con sus respectivos cónyuges. Congenian al instante, y se hacen íntimos amigos, con una intimidad que rápidamente deviene en lo políticamente incorrecto (según ciertos puntos de vista), en amor libre. Se enamoran los cuatro. Deciden seguir viviendo sus cotidianas vidas maritales a la par que, cuando se ponen de acuerdo, se entregan generosamente, intercambiándose las parejas sexuales, de mutuo acuerdo, sin reglas, hablando sin tapujos y sin que su estabilidad emocional se resienta. Sin embargo, con el paso del tiempo todo es más confuso y contradictorio, empiezan a sufrir y piensan en cortar por lo sano ... pero no es tan fácil, que ya se establecieron fuertes vínculos emocionales entre todos.

Una muy buena película, con unas cuantas escenas de alto contenido erótico; una historia sobre las vicisitudes de dos matrimonios que acaban por fundirse en uno de cuatro elementos, análogamente al caso del matrimonio convencional, en el que dos individuos enamorados se funden en uno, y a veces se confunden, que viene casi a ser lo mismo, pues pasan por las mismas fases. Por eso de las dobles parejas cruzadas y la descarnada sinceridad con la que se hablan, me recordó mucho a una excelentísima película del año 2004, que os recomiendo, "Closer", de Mike Nichols.

Ahora, sin mucha prodigalidad, generosamente os regalo unas pocas citas de sabiduría ajena:

 - "La inevitable consecuencia del enamoramiento profundo es darse cuenta de que nadie ha descrito, de forma adecuada, el tormento y el éxtasis que supone esta condición".  (Francisco de Quevedo).

 - "La cadena del matrimonio pesa tanto que es preciso sean dos para llevarla, y, a veces, tres".  (Alejandro Dumas, hijo).

 - "El amor, tal como existe en la sociedad, no es más que el intercambio de dos fantasías y el contacto de dos epidermis".  (Chamfort).

Besos y abrazos,

Don.

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Esclavo de los matutinos

¡Buenos días!

Pues vamos progresando en intensidad, que ayer era un servidor y hoy un esclavo, eso sí, con sumo agrado y siempre bajo mi propia voluntad, subyugado por estos matutinos y sus circunstancias, especialmente por mis hadas y ninfas, a quienes idolatro y reverencio. Sometido también me tiene esta voluble primavera con sus vaivenes, hoy en un fresco día, el más fresco desde hace bastante (máximas de 24ºC), que será efímero, y en breve nuestra "prima", que está casi a la vera de su sucesor, se nos liberará de sus obligaciones estacionales y dejará paso al verano, que nos sojuzgará a base de sofocos térmicos.

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo "Evelyn", de Isabel de Ocampo, y con Cindy Díaz y Adolfo Fernández. Es su debut en el largo tras haber ganado el Goya al mejor corto hace pocos años. Evelyn viaja a España desde una remota aldea peruana. Cree que va a trabajar con su prima como camarera. Pero es engañada, raptada y maltratada para obligarla a ejercer de meretriz (dicho por lo fino) en un club de carretera. Una historia sobre una domesticación, para convertir a una inocente y orgullosa muchacha pueblerina en una esclava sexual.

Una estupenda película, que trata temas que deberíamos conocer, necesaria por tanto, y que os recomiendo si no os importa que os sacuda y golpee emocionalmente (a poca empatía que tengáis lo hará), como lo hizo conmigo, que sentí como una patada en los redaños, y eso que ya sabía de la cuestión por varios documentales que vi en su día. Tan sin aire me dejó, tan sin palabras, que tan solo la seguiré glosando apropiándome de algunos comentarios de su directora, con los que sintonizo absolutamente:

 - "Para escribir el guión de "Evelyn" nos sumergimos en una investigación que resultó ser un viaje oscuro al interior de las alcantarillas de nuestra sociedad. Un puñetazo en el estómago que nos pilló desprevenidos y sin haber recibido ningún tipo de preparación. El contacto con este océano de negritud, las historias nauseabundas y desasosegantes que escuché despertaron en mí una cólera y una rabia que han dado como resultado una historia feroz. Un thriller psicológico con tintes de terror. Una película intensamente emocional que trata de arrastrar al espectador a sentir la celda física y mental de la que trata de huir la protagonista. Por cierto, el oficio más viejo del mundo no es el de prostituta, sino el de proxeneta (Génesis 12, 9-20)".  (Isabel de Ocampo).

Ahora, algo (más) de sabiduría ajena que tal vez libere nuestras mentes:

 - "El que no quiere razonar es un fanático; el que no sabe razonar es un necio; el que no se atreve a razonar es un esclavo".  (William Drummond).

 - "Dichoso el que gusta las dulzuras del trabajo sin ser su esclavo".  (Benito Pérez Galdós).

 - "El que no tiene dos terceras partes de su jornada para sí mismo es un esclavo, sea lo que sea, político, comerciante, funcionario o erudito".  (Friedrich Nietzsche).

 - "Cuando el trabajo es un placer la vida es bella. Pero cuando nos es impuesto, la vida es una esclavitud".  (Máximo Gorki).

 - "La belleza es una gran recomendación en el comercio humano, y no hay nadie que sea tan bárbaro o tan grosero que no se sienta herido por su dulzura".  (Montaigne).

Besos y abrazos,

Don.

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Servidumbre matutina

¡Buenos días!

Ya sabéis de mi compromiso, de mi dependencia de estos matutinos, sin los cuales se me haría todo más difícil, pues me sirven para mirar de otro modo la realidad, y me proporcionan toda clase de comodidades anímicas; lo mismo que sucede con toda su cohorte de hadas y ninfas, que siempre pululan allende y por entre los áticos de mis entendederas. Y de como me sirvo de estos días de primavera, alegre y revoltosa, que bien nos regalan sol y calor como ponen a nuestro servicio algo de frescor y nubes que nos hagan más llevadero el tránsito al sofocante verano, para mejor templar el ánimo.

Este fin de semana estuve en el cine viendo "Las chicas de la sexta planta" ("Les femmes du 6ème étage"), de Philippe Le Guay, y con Fabrice Luchini, Sandrine Kiberlain, Natalia Verbeke, Carmen Maura, Lola Dueñas, Berta Ojea, Nuria Solé y Concha Galán. Es el primer largo que veo de este director.

En el París de los años 60 un acaudalado burgués pasa su aburrido día a día dedicado a su negocio y familia. Su vida cambiará cuando tome conciencia de las chicas que residen hacinadas en el ático (la sexta planta) de su señorial edificio, unas españolas que trabajan como criadas en el propio edificio y en otros, en pleno boom de la emigración española a Francia. Una joven, recién llegada, con mucho desparpajo, acabará contratada por su mujer para sustituir a la vieja criada francesa que tenían. Estas mujeres, alegres, extrovertidas y plenas de desbordante vitalismo, cambiarán el modo de mirar y actuar de este anodino hombre, sobre todo la hermosa recién llegada, catalizadora de ese cambio.

Una estupenda película, que a ratos es seducida por el tópico, pero en otros se deja cautivar por la amable crítica social. Una comedia costumbrista sobre la emigración española a Francia, y la toma de conciencia, por parte de algunos, de sus a veces míseras condiciones de vida. Os la recomiendo, aunque solo sea porque nos servirá de contraste con la situación que ahora vivimos en España (donde somos los señores servidos por otros emigrantes).

Por supuesto, dado lo equitativamente bilingüe de este film, es imprescindible, no solo recomendable, el ir a verla en versión original (con subtítulos), porque si no se perderían algunos dobles sentidos y eso de la incomprensión intercultural. Tiene mucha relación con otra excelente y muy recomendable película española del año 2006, "Un franco, 14 pesetas", de Carlos Iglesias.

Ahora, algo de sabiduría ajena, que tal vez nos sirva para una mejor comprensión del de enfrente, de arriba o de abajo:

 - "La única intención de la vida es servir al género humano".  (León Tolstoi).

 - "Un hombre solamente tiene derecho a mirar a otro hacia abajo cuando ha de ayudarle a levantarse".  (Gabriel García Márquez).

 - "Sé caritativo antes que el dinero te haga avaro".  (Thomas Browne).

 - "El que con amor trabaja, a otro lleva ventaja".  (refrán).

 - "La libertad no es con frecuencia para el hombre sino la facultad de escoger su servidumbre".  (Gustave Le Bon).

 - "Amor es aquella cosa que pone en servidumbre a los libres y da libertad a los siervos".  (Ramón Llul).

 - "Dormía..., dormía y soñaba que la vida no era más que alegría. Me desperté y vi que la vida no era más que servir... y el servir era alegría".  (Rabindranath Tagore).

Besos y abrazos,

Don.

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Marrullerías matutinas

¡Buenos días!

Parece que la primavera quiere engatusarme con este fresco día de primavera (máxima prevista para hoy de 26ºC), que dribla la tendencia al alza de las temperaturas camino de la cercana meta del inminente solsticio, para que no vea lo que se nos viene encima con el caluroso verano, pero el árbitro del clima ya pitará que se encuentra en fuera de juego, que cada vez debería de hacer más calor, aunque prefiera yo que no. Creo que mis pitos e insultos no le arredrarán, y el verano nos clavará por la escuadra varios goles y nos chorreará ... de sudor.

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo "En fuera de juego", de David Marqués, y con Fernando Tejero, Diego Peretti, Carolina Peleritti, "Chino" Darín, y Hugo Silva. Es el cuarto largo de este director, y primero suyo que veo.

Un representante español de futbolistas, de poca monta, un chapucero pícaro, se entera de que el Real Madrid se interesa por una joven promesa argentina con cuyo padre firmó un apolillado contrato años atrás, cuando era pibe, en un viaje por Argentina, de donde volvió también con novia, con la que ahora está en crisis matrimonial. Pero parece que también el padre del chaval firmó con otro argentino, quien muy enfermo en el hospital, encarga a su sobrino, médico de profesión y que odia el fútbol, que se haga pasar por el representante y tutor legal del muchacho y viaje a España con él. Ambos representantes están condenados a entenderse, y a base de trapicheos tratarán de hacer su agosto, pero se las tendrán que ver con un tiburón que también anda al acecho del pingüe contrato.

Una película regularcilla, ni fu ni fa, una comedia con la que apenas esbocé dos o tres tímidas carcajadas. Una historia de embusteros perdedores, de dos desgraciados que entablan una entrañable relación, en medio del marrullero trasfondo futbolero, a la sombra de las iluminadas bambalinas de los estadios. Otro película que vi hace pocos años y que trata similares temas, la mexicana "Rudo y Cursi" (2008), de Carlos Cuarón, me gustó mucho más, me encantó y os la recomiendo.

Ahora, algo de sabiduría ajena, con la que mejor regatear las marrullerías que podamos encontrarnos, y para tratar de evitar quedarnos en fuera de juego:

 - "Tengo dos problemas para jugar al fútbol. Uno es la pierna izquierda. El otro es la pierna derecha".  (Roberto Fontanarrosa).

 - "Firmar sin leer, solo un necio lo puede hacer".  (refrán).

 - "En toda negociación, la valentía debería ser lo primero, lo segundo y lo tercero".  (Thomas Fuller).

 - "Sin cierta inmodestia o, dígase, mucha confianza en las propias fuerzas, nadie acomete empresas de importancia".  (Santiago Ramón y Cajal).

 - "No robes: de esta manera no tendrás nunca suerte en los negocios. Haz trampas".  (Ambrose Bierce).

 - "La prosperidad no es una medida; solamente la adversidad sirve de balanza para pesar a los amigos".  (Plutarco).

Besos y abrazos,

Don.

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Vieja convivencia matutina

¡Buenos días!

Pues sí, ya casi unos 13 años y medio de convivencia matutina, poco más que incipiente adolescencia en la vida de un humano, pero echando la vista atrás ya me parece toda una eternidad, que casi ni peinaba canas cuando empecé y ahora abarrotan la mayor parte de mi cabellera. Como siempre cada temporada seguimos en esos calurosos días de primavera (30ºC de máxima prevista para hoy en "los madriles") en los que ésta se da a la obligada convivencia con el verano por llegar.

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo "¿Y si vivimos todos juntos?" ("Et si on vivait tous ensemble?"), de Stéphane Robelin, y con Guy Bedos, Geraldine Chaplin, Jane Fonda, Pierre Richard, Claude Rich, y Daniel Brühl. Es el segundo largo de este director y primero suyo que veo, que también trata el tema de la vejez, como otros recientemente vistos: "Arrugas" de Ignacio Ferreras, "El exótico Hotel Marigold" ("The best exotic Marigold Hotel") de John Madden, y "Tres veces 20 años" ("Late bloomers"), de Julie Gavras.

Cinco setentones, dos matrimonios y un viudo, que son amigos desde hace más de 40 años, conviven con (y sobreviven a) sus achaques y otras más graves enfermedades, cada uno con los suyos (alzheimer incipiente, ataques al corazón, etc.). Cuando el viudo es internado por su hijo en una residencia de ancianos debido a motivos de salud, deciden rebelarse, acuden a rescatarle, y se trasladan a vivir juntos, compartiendo la casa de uno de los matrimonios, en donde tendrán que pulir asperezas para una mejor convivencia en un más reducido espacio. Serán ayudados por un joven estudiante de antropología que inicialmente es contratado por horas para cuidar y pasear al perro de uno de ellos, mientras escribe una tesis doctoral sobre como se envejece en la sociedad occidental.

Una buena película, una suave tragicomedia sobre las dificultades de la vejez en esta sociedad moderna, en la que se tiende a encerrar a los ancianos en guetos geriátricos. Se propone una curiosa alternativa, muy extendida entre la juventud y que no extraña en esa edad, el compartir piso, ayudándose unos a otros, con algún refuerzo exterior, para mitigar la dependencia y soledad propias de esa etapa vital. También nos habla de las dificultades de la vida en común y, de refilón, de su necesidad sexo carnal, tan imprescindible a cualquier edad (desde la adolescencia hasta la misma muerte), mientras la salud lo permita.

Ahora algo de sabiduría ajena que seguro nos ayuda a mejor convivir:

 - "Jóvenes y viejos, todos necesitamos consejo".  (refrán).

 - "El hombre que más ha vivido no es aquel que más años ha cumplido, sino aquel que más ha experimentado la vida".  (Jean Jacques Rousseau).

 - "No hay hombre tan longevo que, recordando a Matusalén, no crea que le quedan todavía veinte años por vivir".  (Montaigne).

 - "Al entrar en el último tercio de la vida se siente ya ese molesto rechinar de piezas desgastadas por el uso y por el abuso, y es cuando gusta saborear el recuerdo de los tiempos heroicos, alegres y luminosos de la juventud".  (Santiago Ramón y Cajal).

 - "Acomódate a las cosas que la suerte te ha destinado, y ama con verdadero amor a los hombres con quienes debes convivir".  (Marco Aurelio).

 - "El respeto mutuo implica la discreción y la reserva hasta en la ternura, y el cuidado de salvaguardar la mayor parte posible de libertad de aquellos con quienes se convive".  (Henry F. Amiel).

Besos y abrazos,

Don.

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Matutino entre dulce y amargo, sin acritud

¡Buenos días!

Sin acritud, así creo que hay que mirar los vaivenes de la vida, a veces dulce, a veces amarga, y disfrutarla siempre tal cual es, en la medida de lo posible. Esta primavera que nos rodea, nos va meciendo suavemente, que ya perdió su fresco brío adolescente, y poco a poco, casi sin darnos cuenta, nos va llevando al fecundo verano, regado con nuestros sudores (máximas previstas para hoy de 32ºC).

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo "Miel de naranjas", de Imanol Uribe, y con Ibán Gárate, Blanca Suárez, Karra Elejalde, Eduard Fernández, Carlos Santos, y Nora Navas. De este director que debutó en el largo en 1979 no he visto ninguno de sus primeros films, pero sí la mayoría de los últimos, como su anterior de 2007, "La carta esférica".

En la Andalucía de 1950 un joven hace la mili como mecanógrafo de un juez militar, cuya hermosa sobrina es su novia. Ante las constantes injusticias del régimen franquista que ve día a día en el juzgado, a pesar de que no quiere meterse en líos, acaba por tomar conciencia de que algo tiene que hacer, por lo que se une a un grupo de lucha clandestina urbana, repartiendo propaganda y sacando presos del país.

Una buena película, entretenida, una historia de intrigas, un thriller socio-político, con leves toques de drama amoroso, que se desarrolla en los primeros años de nuestra dura posguerra. Sin mayores consideraciones.

Ahora algo de sabiduría ajena que trate de endulzarnos los inevitables amargores, y lime eventuales asperezas, de lo que esté por venir:

 - "El ser humano, sin saber como, se inclina siempre del lado del vencido".  (Juan Donoso Cortés).

 - "La injusticia es una madre que nunca es estéril, siempre produce hijos dignos de ella".  (Adolphe Thiers).

 - "Hay un límite más allá del cual la tolerancia deja de ser virtud".  (Edmund Burke).

 - "Es de suma importancia

tener en los trabajos tolerancia,

pues la impaciencia en la contraria suerte

es un mal más amargo que la muerte".  (Félix María de Samaniego).

 - "Si la obediencia es el resultado del instinto de las muchedumbres, el motín es el de su reflexión".  (Napoleón Bonaparte).

 - "La dictadura es el sistema de gobierno en el que lo que no está prohibido es obligatorio".  (Enrique Jardiel Poncela).

 - "El tirano reclama vino dulce de las uvas ácidas".  (Khalil Gibran).

 - "El gobierno no descansa en la fuerza, es la fuerza: descansa en el consentimiento, o en una concepción de la justicia".  (Gilbert K. Chesterton).

 - "A mi juicio, el mejor gobierno es el que deja a la gente más tiempo en paz".  (Walt Whitman).

 - "El sabio sólo usa de la acritud contra sí mismo, y es amable con los demás".  (Plutarco).

Besos y abrazos,

Don.

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A la caza de los cándidos matutinos

¡Buenos días!

En estos días en los que el níveo candor brilla por su ausencia, barrido por el cálido sol de estos días de primavera, casi verano, busco, acecho y trato de cazar las oscuras penumbras que me aporten algo de frescor y enjuguen, no mis lágrimas, sino otro de mis humores, menos poético y más sufrido, el sudor. Desde luego, el suave aleteo de mis hadas y ninfas en mi derredor me abanica con dulzura, mientras duermo despierto anhelando otra vez el suavemente gélido beso de la nieve, cálida manta que me alivie los ardores térmicos que me provocan ciertos cortocircuitos. No sé que será de mí cuando las máximas coqueteen con los 40, que todavía rondamos, por arriba, los 30ºC de máxima.

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo "Blancanieves y la leyenda del cazador" ("Snow White and the huntsman"), de Rupert Sanders, y con Kristen Stewart, Charlize Theron, y Chris Hemsworth. Es el primer largo de este director proveniente del mundo de la publicidad.

La princesa Blancanieves es la más hermosa niña del reino, su madre muere, y el rey vuelve a casarse. Su hechicera y horrorosamente hermosa madrastra, mata a su padre y encierra a Blancanieves ... ordenando matarla cuando su espejito mágico le dice que se ha convertido en la más hermosa mujer del reino. Se lo encarga a un cazador, quien hechizado por la hermosura de la joven se arrepiente y decide protegerla de las huestes de la reina madrastra ... y no sigo que, aunque casi todos conocemos el cuento, os destriparía el final (¡puag, qué asco!) a esas almas cándidas que todavía no lo conocen ...

Una muy buena película, a pesar de algunos pesares, otra nueva versión libre del famoso cuento de los hermanos Grimm, que hace unos dos meses estuve viendo "Blancanieves (Mirror, mirror)" ("Mirror, mirror"), de Tarsem Singh, ésta bastante mala.

Me gustó y entretuvo esta oscura y tenebrosa película de aventuras, de aires góticos, inspirada en Blancanieves, y que en muchos momentos me pareció un videojuego; pero a partir del momento en que se despierta de su somnoliento hechizo de la manzana envenenada tras el beso de su amado (en este caso no un príncipe azul, sino el fiel cazador), ella deviene en una especie de belicosa Juana de Arco (con algún injerto de Braveheart) que lidera unas hordas que recuerdan en algo a las de "El señor de los anillos" ... y ahí se me jodió la película, que odio sobremanera la épica, engañabobos de cándidos estúpidos arrastrados ciegamente al matadero por quien sabe que ambiguos, cuando no perversos, ideales.

Ahora os pongo a tiro, para que cacéis las que más os gusten, una manada de citas de sabiduría ajena:

 - "La guerra es un juego que los reyes, si sus súbditos fueran inteligentes, no jugarían jamás".  (William Cowper).

 - "La vida es como una leyenda: no importa que sea larga, sino que esté bien narrada".  (Séneca).

 - "La alabanza es buena cuando es bueno el que la dice, y es mala cuando es vicioso y malo el que alaba".  (Miguel de Cervantes).

 - "Pueden decir todo lo bueno que quieran de nosotros, pero nunca nos dirán nada nuevo".  (La Rochefoucauld).

 - "El lenguaje artificioso y la conducta aduladora rara vez acompañan a la virtud".  (Confucio).

 - "Los cazadores atrapan las liebres con los perros; muchos hombres atrapan a los ignorantes con la adulación".  (Plutarco).

 - "Las coquetas son como los cazadores que se ufanan en cazar, pero que no comen la presa".  (Honoré de Balzac).

 - "Los que no son envidiados, nunca son completamente felices".  (Esquilo).

 - "La felicidad es una cosa monstruosa. Quienes la buscan no dejan de hallar castigo".  (Gustave Flaubert).

Cambiad felicidad por belleza y eterna juventud y estaremos ante una de las piedras angulares de este cuento.

Besos y abrazos,

Don.

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Compañero matutino

¡Buenos días!

A solas con mis fieles compañeros matutinos, asentando cada vez más nuestra íntima relación, aquí me encuentro otra mañana más de esta primavera que se nos pierde por el rayano verano. Sol a raudales, y calor, aunque éste (máximas lindando con los 30ºC) algo más leve que el de pasados días.

Este fin de semana estuve en el cine viendo "¡Por fin solos!" ("Darling companion"), de Lawrence Kasdan, y con Diane Keaton, Kevin Kline, Richard Jenkins, y Dianne Wiest, entre varios otros. De este director y guionista había visto cinco de sus diez anteriores largos como director, desde su sobresaliente debut en 1981 con "Fuego en el cuerpo" ("Body Heat"), pasando por "El turista accidental" ("The accidental tourist", 1988), "Grand canyon" (1991), "French Kiss" (1995), y "Mumford" (1999); todas espléndidas y que os recomiendo, especialmente la primera y la última que vi.

Una mujer casada con un cirujano absorto en su trabajo, y con dos hijas, una ya casada y la otra que se casará en breve, encuentra abandonado a un perro en una autopista. Lo recoge y, en contra de la opinión de su marido, lo acoge en su hogar. Justo tras la boda de la hija soltera, el marido pierde al perro en un paseo por las montañas. Con la ayuda de familiares y amigos emprenden una algo estrambótica búsqueda.

Una buena película, en general, normalita, con sus más y sus menos, aunque estos casi fueron mayores, empezando por el título traducido, que resulta muy engañoso. Una historia de un matrimonio cuya relación está atascada, ella con síndrome de nido vacío que trata de mitigar aferrándose emocionalmente al perro y él embebido en su deber laboral. Por medio del perro y su búsqueda, que ejercen de "hitchcockiano mcguffin", es decir, de excusa para la confrontación y mejora afectiva de los diversos personajes (principales y secundarios), estos acabarán condenados a entenderse, pues les sucede algo similar que a los de la película de 1962 de Luis Buñuel "El ángel exterminador", que por un motivo u otro no pueden alejarse del lugar, de la zona de la búsqueda del perro.

Sin embargo me disgustaron ciertos momentos, como el toque esotérico, que al final acepté porque daba algunas de las mejores notas cómicas a la historia. Y sobre todo el final, absolutamente prescindible y blandengue, porque la historia del perro tendría que haber sido tan solo el absoluto mcguffin, y no aporta nada a los puntos interesantes del film, es decir, a la recomposición de las buenas relaciones entre los personajes que provoca la crisis de la pérdida del perro.

Ahora algo de sabiduría ajena que nos acompañe y guie cual lazarillo en nuestro devenir vital:

 - "La amistad es animal de compañía, no de rebaño".  (Plutarco).

 - "La conmiseración con los animales está íntimamente unida a la bondad de carácter, de tal manera que se puede afirmar con total seguridad, que quien es cruel con los animales no puede ser una excelente persona".  (Arthur Schopenhauer).

 - "Todo el que conoce verdaderamente a los animales es porque es capaz de comprender plenamente el carácter único del hombre".  (Konrad Lorenz).

 - "¡Elegid la soledad buena, la soledad libre, traviesa y ligera, la que os otorga también el derecho a continuar siendo buenos en algún sentido!"  (Friedrich Nietzsche).

 - "No encontré nunca un compañero más sociable que la soledad".  (Henry D. Thoreau).

 - "No busquéis como único compañero a un amigo fiel, porque os expondríais a caminar solos toda vuestra vida".  (Joaquín María Bartrina).

Besos y abrazos,

Don.

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Matutino semental

¡Buenos días!

Espero que las simientes de estos matutinos, esparcidas al albur de los bits cibernéticos, germinen y preñen doquiera que sean bien recibidas. Algún día, imagino, volverán a mi regazo los frutos de tal empresa, la mar de gratificante, aunque sea muchas veces resultado del onanismo de mis neuronas ... una paja mental, ¡vaya!, hablando en plata ... Y a menos de tres semanas para el solsticio de verano, el tórrido calor de estos días sigue madurando el producto de pasadas efusiones primaverales, más frescas y húmedas aquellos días, tanto vegetales como animales.

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo un film canadiense, que desde ya os recomiendo encarecidamente que vayáis a ver, que me entusiasmó, porque me emocionó e hizo reir en abundancia. Se trató de "Starbuck", de Ken Scott, y con Patrick Huard, Julie Lebreton, y Antoine Bertrand. Es el segundo largo, y primero suyo que veo, de este director y guionista.

Un cuarentón inmaduro, de alma adolescente, un botarate, un calavera, un calamidad lleno de deudas que trabaja en la humilde empresa familiar, va a ser abandonado por su novia a causa de su irresponsabilidad, a la par que ella le comunica que está embarazada de él. Además, se entera de que fruto de sus masivas donaciones de esperma para conseguir dinero veinte años atrás, bajo el seudónimo de Starbuck (que podría traducirse como semental), y por una falta de control de la clínica de fertilidad, tiene 533 hijos repartidos por el mundo, 142 de los cuales se han unido para demandar a la clínica para que les revele su identidad. En un repentino ataque de responsabilidad paternal, decide ejercer, bajo anonimato absoluto, de ángel de la guarda de ellos, ayudándoles en lo que puede. Mientras tanto, él también demanda a la clínica para seguir consiguiendo dinero para cubrir sus deudas.

Una espléndida tragicomedia que, a pesar de algunos pequeños flecos pasados de ternurismo (sobre todo hacia el final), me encandiló y, como antes dije, os recomiendo que vayáis a ver sin falta. Una original y divertidísima reflexión sobre la paternidad en nuestros días, sobre este tarambana que termina por redimirse y madurar en el proceso. Una calidoscópica visión de los diversos problemas, cada uno de su padre y de su madre (bueno, en este caso cada uno de su madre, que el padre es casi constante), a los que se enfrentan los padres del mundo, concentrados en este inmenso semental por azaroso artificio.

Ahora, ahí os dejo unas semillas de sabiduría ajena que espero terminen de fructificar con el abono de vuestras mentes:

 - "No nos cansemos de sembrar en nuestro camino simientes de benevolencia y de simpatía. Se perderán muchas, sin duda alguna, pero con que una sola fructifique, perfumará nuestro camino y alegrará nuestros ojos".  (Madame de Swetchine).

 - "La tierra nunca devuelve sin interés la simiente que recibió".  (Cicerón).

 - "El remordimiento precede a la virtud, como la aurora al día".  (Henri Lacordaire).

 - "Tener hijos no le convierte a uno en padre, del mismo modo que tener un piano no lo vuelve pianista".  (Michel Levine).

 - "Los padres, para ser felices, tienen que dar. Dar siempre, esto es lo que hace un padre".  (Honoré de Balzac).

Besos y abrazos,

Don.

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