¡Buenos días!
Mañana más fresquita, con
gran disminución de las máximas, la prevista para hoy es de 23ºC, con cada vez
más nubes que quizás dejen caer alguna tormenta, según prevén los meteorólogos,
vamos, nuestra amiga la primavera haciendo de las suyas, manifestándose tal
cual es, sin tapujos, tan transgresora como siempre, ora con tormentas o calor
veraniegos, ora con frescor casi invernal, ora con tristes lluvias otoñales,
ora brotando flores por doquier y cumpliendo con sus poéticos cánones, no
siempre ciertos, viviendo en una ambigüedad estacional que ella tiene muy
clara, porque es así, y así la aceptamos, como a los buenos amigos.
Ayer por la tarde estuve en
el cine viendo "Una nueva amiga" ("Une
nouvelle amie"), de François Ozon, basada libremente en un relato corto de
Ruth Rendell, y con Romain Duris, Anaïs Demoustier, Raphaël Personnaz, e Isild
Le Besco. De este director había visto sólo cinco, todos excelentes, de sus
anteriores largos, que va a uno por año desde que debutó en 1997: "Joven y bonita" ("Jeune & jolie", 2013),
la magistral "En la casa" ("Dans la maison", 2012), "Potiche, mujeres al poder" ("Potiche", 2010),
"Swimming Pool (La piscina)" ("Swimming
pool", 2003), y "8 mujeres" ("8 femmes", 2001).
Dos jóvenes recién casadas,
amigas del alma desde la infancia, viven felizmente con sus respectivos
maridos. Al poco de dar a luz una de ellas, fallece. La otra, sumida en una
gran depresión por ello, le prometió antes de morir que cuidaría de su marido e
hija recién nacida. El primer día que va a casa de su difunta amiga a echar una
mano descubrirá un inimaginable secreto del marido que cambiará la vida de ambos,
haciendo que se mitigue en ambos su pena por la ausencia al ir dejándose llevar
por la nueva situación.
Una película (nota:
5) que no me convenció del todo, a pesar de su muy cuidada puesta
en escena y la excelencia de su director, básicamente por su argumento bastante
retorcido e inverosímil. Historia que habla de travestismo y extrañas amistades
que coquetean con escondidas pasiones, juguetona, traviesa y provocadora al
estilo Ozon. Se transgreden no sólo roles sexuales, sino también diversos
géneros cinematográficos, pues es un melodrama estilo Douglas Sirk, con
turbiedad y leves toques de comedia y thriller hitchcockiano, y también con
ciertas maneras almodovarianas. Por cierto, al igual que este film, "Carne
trémula" (1997) de Pedro Almodóvar está también basada en otro relato de
Ruth Rendell. Por esto del travestismo, tiene cierto parentesco, muy amistoso,
con estos tres clásicos del cine: la genialmente divertida "Con faldas y a
lo loco" ("Some like it hot", 1959) de Billy Wilder,
"Tootsie" (1982) de Sydney Pollack, y "Víctor o Victoria"
("Victor/Victoria", 1982) de Blake Edwards.
Ahora, unas citas de
sabiduría ajena, con las que espero entabléis una fructífera amistad:
- "Hay mujeres que quieren tanto a sus
maridos que, para no usarlos, toman el de sus amigas". (Alejandro Dumas).
- "No se nace mujer: llega una a serlo.
Ningún destino biológico, físico o económico define la figura que reviste en el
seno de la sociedad la hembra humana; la civilización en conjunto es quien
elabora ese producto intermedio entre el macho y el castrado al que se califica
como femenino". (Simone de
Beauvoir).
- "En sí, la homosexualidad está tan
limitada como la heterosexualidad: lo ideal sería ser capaz de amar a una mujer
o a un hombre, a cualquier ser humano, sin sentir miedo, inhibición u
obligación". (Simone de Beauvoir).
Besos y abrazos,
Don.
_____
No hay comentarios:
Publicar un comentario