Ventoleras matutinas

¡Buenos días!

De momento seguimos de plácida serenidad primaveral, lo que es algo sorprendente, dado lo voluble del clima por estas fechas. Así que la única borrascosa ventolera que tal vez pueda soplar por aquí sea la de mi locura por mis bien amadas hadas y ninfas, quienes revoloteando desde las alturas aterrizan a mi vera cada mañana que me pongo a labrar estos matutinos para así perpetuar pasiones primaverales cualquiera sea el entorno allende los matutinos.

Ayer estuve en el cine viendo una adaptación más, aunque sea la primera que veo en mi vida, de la afamada novela homónima de Emily Brontë, "Cumbres borrascosas" ("Wuthering heights"), de Andrea Arnold, y con Kaya Scodelario, James Howson, Shannon Beer, y Solomon Glave. Es el tercer largo de esta directora, de quien había visto su anterior film, "Fish tank" (2009).

Un granjero del norte de Inglaterra, tras un viaje a la ciudad, regresa a su heredad, en medio de un desolado páramo, con un chico sin hogar que ha recogido de las calles, para que viva como parte de su familia. El hijo lo odia y humilla constantemente, pero la hija entabla amistad con el recién llegado, amistad que se convertirá con el tiempo en apasionado amor. El padre muere y el hijo vuelve casado a tomar posesión de la finca, sometiendo como sirviente al chico. Cuando éste se entera de las intenciones de la hermana de casarse con un rico hacendado vecino, huye. Vuelve a los pocos años enriquecido, con la idea de vengarse de todos, aunque aún idolatre a la hermana.

Con algunas licencias, esta adaptación nos muestra, a su peculiar estilo, esta historia de amor gótico-romántico malogrado, odios fraternales, venganzas, y oscuras turbulencias emocionales agitadas por la furia de las inclemencias climáticas que zarandean a estos personajes atormentados. Con una fabulosa fotografía, sin embargo creo que el modo de contar de su directora estas ardorosas y arrebatadas pulsiones amorosas me dejó frío ... y es extraño, porque casi todas las adaptaciones que había visto últimamente de novelas románticas (del movimiento literario del s.XIX) me habían entusiasmado, como la que ví hace pocos meses de "Jane Eyre", de Cary Fukunaga.

Ahora algo de sabiduría ajena, que seguro nos dará buena cobertura ante eventuales vendavales emocionales:

 - "En el amor, todas las cumbres son borrascosas".  (Marqués de Sade).

 - "El hombre puede trepar hasta las cumbres más altas, pero no puede vivir allí mucho tiempo".  (George Bernard Shaw).

 - "De todas las pasiones, el amor es la que más se irrita y acrece cuando encuentra obstáculos".  (Giovanni Boccaccio).

 - "No acometas obra alguna con la furia de la pasión; equivale a hacerse a la mar en plena borrasca".  (Thomas Fuller).

 - "La vida es como un viaje por mar: hay días de calma y días de borrasca. Lo importante es ser un buen capitán de nuestro barco".  (Jacinto Benavente).

Besos y abrazos,

Don.

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Matutino bárbaro

¡Buenos días!

No voy a ser yo quien diga maravillas de estos matutinos, aunque lo haga cada mañana, y no se nos ocurre pensar que sean ni brutos ni crueles ni lleven cascos con cuernos; más bien me refiero a la pacífica invasión de mi corazón y entendederas que cometieron, viniendo no se sabe bien de donde ni desde cuando, mientras han continuado viajando para ganarse el sustento, bien a la ribera del Arlanzón, bien a la del Manzanares, que no suelo ver, por la habitual nube de smog que me impide verla desde la lejanamente asfaltada ribera de La Castellana, bien donde les plazca. Y estén donde estén nada extrañan, aunque a algunos les extrañe. Y ya no es noticia, pero tenemos otro bárbaro día de soleada primavera, extraordinariamente bueno.

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo "Almanya: Bienvenido a Alemania" ("Almanya - Willkommen in Deutschland"), de Yasemin Samdereli, que junto con su hermana Nesrin ha coescrito el guión, y con ... un montón de actores y actrices, que es bastante coral. Hace unos años, en 2006, vi una estupenda película española sobre similares temas: la emigración y sus circunstancias. Se trató de  "Un franco, 14 pesetas", de Carlos Iglesias.

Después de toda una vida en Alemania tras emigrar desde Turquía en los años 60, un anciano reune a toda su familia en casa para anunciarles que se ha comprado una casa en Turquía y que todos deben volver con él para ayudarle a reformarla. A nadie le hace gracia esa idea y todos empiezan a discutir acaloradamente. Por si fuera poco, una de sus nietas decide anunciar que está embarazada (sin estar casada) de su desconocido novio y que además no es de origen turco. Para consolar a su primo de seis años, al que trataron de “extranjero” el primer día de colegio, y que anda hecho un lío sobre si es alemán o turco, ella decide contarle la fantástica historia de por qué están en Alemania sin ser "alemanes".

Una buena película en general, con algún altibajo que otro, para bien y para mal, una dulce comedia sobre los problemas de identidad de los emigrantes, de su dificultad para asimilar las nuevas costumbres, de su desarraigo, de la nostalgia de los mayores y la pérdida de antiguas costumbres de las siguentes generaciones nacidas en la nueva tierra. Una amable mirada sobre que es ser extranjero, pasada por el imaginativo tamiz de un niño al que le cuentan la historia de su familia.

Ahora algo de magnífica sabiduría ajena que nos ayude a integrarnos en nuestro cambiante entorno, a veces tan extraño a nuestros ojos:

 - "La primera máxima de todo ciudadano ha de ser la de obedecer las leyes y costumbres de su país, y en todas las demás cosas gobernarse según las opiniones más moderadas y más alejadas del exceso".  (René Descartes).

 - "Los viajes sirven para conocer las costumbres de los distintos pueblos y para despojarse del prejuicio de que sólo es la propia patria se puede vivir de la manera a que uno está acostumbrado".  (René Descartes).

 - "La idea de viajar no es poner el pie en un país extranjero, es por lo menos poner los pies en tu propio país como si fuera un territorio extranjero".  (G. K. Chesterton).

 - "Nunca mejora su estado quien muda solamente de lugar y no de vida y de costumbres".  (Francisco de Quevedo).

Besos y abrazos,

Don.

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Matutina "alienacción"

¡Buenos días!

Extraña palabra me ha salido en el título, no sé si es que se me replicó una 'c' venida de quien sabe que planeta alfabético tomando posesión de la voluntad de mis palabras, o si es que me replico a mi mismo y al esencial ser de los matutinos, pues ninguna acción de allende mis bien amados matutinos nos perturba en modo alguno ... aunque no sé ya si soy yo el perturbado, el alienado, el que tiene abducido el cerebro por falta de horas de sueño, carencia que es el más poderoso lisérgico inmaterial que conozco, que no en vano su dios se llama Morfeo. Y el dios del tiempo, no el del clima (el casi hedónico de estos días de primavera), sino el del reloj, Cronos, me dice que ya es tiempo de glosar el film.

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo "Extraterrestre", de Nacho Vigalondo, y con Julián Villagrán, Michelle Jenner (adorable), Raúl Cimas, y Carlos Areces. Es el segundo largo de este director, tras "Los cronocrímenes" (2007), que no he visto, pero que trataré de ver en breve.

En la tarde de un domingo dos desconocidos despiertan en la misma cama, tras una borrachera de la que no recuerdan nada. La situación es incómoda y ella le pide que se largue de su casa, pero en las noticias informan de una invasión alienígena y ven las calles desiertas, así que él aprovecha para quedarse, que se ha enamorado. Todo se va complicando a medida que un meticón vecino (también enamorado de ella nada secretamente) aparece por allí, y posteriormente el novio de la chica. Los cuatro se unen y atrincheran en el piso para resistir la invasión. Pero la desconfianza mutua empieza a hacer mella.

Una muy buena película, que parecería de ciencia ficción tipo serie B, pero no, es una estrafalaria, esperpéntica y surrealista comedia romántica, sobre un extravagante tetraedro amoroso, en varios planos, con un muy peculiar sentido del humor (de aires 'nui chanantes'), en la que lo de menos es la invasión alienígena, más preocupados como están los personajes por sus más íntimas cuitas amorosas, y en la que estos actúan extrañamente, algo descentrados y abducidos. Una historia de engaños amorosos, a los demás y a uno mismo, magnificados aún más si cabe por la utilización de los extraterrestres como coartada para ellos. Luchan con malas artes para conseguir lo que desean, ya que no pueden hacer gran cosa contra los invisibles extraterrestres. Tiene un final muy de western, de llanero solitario que renuncia a su amor, y que se tumba los lunes al sol.

Ahora algo de sabiduría ajena, que espero nos libere de alguna alienación que otra:

 - "El amor es una afortunada sugestión mediante la cual dos individuos creen que el otro es mejor persona".  (Andrés Newman).

 - "La mayor prueba que un hombre puede aportar de su amor es mantenerlo escondido".  (Étienne Rey).

 - "Cuando se está enamorado, comienza uno por engañarse a sí mismo y acaba por engañar a los demás".  (Óscar Wilde).

 - "El hombre emplea la hipocresía para engañarse a sí mismo, acaso más que para engañar a los otros".  (Jaime Balmes).

 - "Es extraño, pero es verdad, porque la verdad es siempre extraña, más extraña que una ficción".  (Lord Byron).

Besos y abrazos,

Don.

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Érase una vez un espejito matutino

¡Buenos días!

Estos matutinos, que en cierto modo reflejan mi ser, a modo de espejo que no regala mi vanidad (o eso creo), me hacen sentir y ser mejor, y me hechizan con visiones de hadas y ninfas, que cuentan conmigo y con las que cuento, pues no me cuentan cuentos. Y seguimos teniendo prístinas mañanas de primavera, con un celestial espejo ahí arriba, tan inmaculado de nubes y tan azul, que me refleja de un apolíneo tal que me hace sentir cual si fuera un zarco príncipe encantado ... ¿de haberme conocido? ...

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo "Blancanieves (Mirror, mirror)" ("Mirror, mirror"), de Tarsem Singh, y con Julia Roberts, Lily Collins, y Armie Hammer. Es el cuarto largo de este director de origen indio, y el primero suyo que veo.

Un cuento conocido, revisitado, una libre adaptación que trata de seguir la estela de "Shrek", en el sentido de parodiar y poner del revés los cuentos clásicos, rompiendo sus clásicos tópicos. Por ejemplo, aquí los enanitos no son mineros, sino saltarines salteadores de caminos que acechan en el bosque. Pero en esta versión de Blancanieves (en este año se esperan todavía dos más, una española y otra extranjera) no vi gracia alguna en su muy manido guión, a pesar de algún minúsculo atisbo de interés.

Tiene un estilo recargadamente barroco, y además remata con un final made in Bollywood. Me recordó, por lo malo, a otra adaptación de cuento, el de Caperucita Roja, que vi hace poco, "Caperucita roja (¿A quién tienes miedo?)" ("Red riding hood", 2011), de Catherine Hardwicke. Como ya dije, mucho, muchísimo mejor es la fantástica "Shrek" (la 1 y la 2, que la 3 no me gustó gran cosa, y la 4 ni la vi); y en la misma línea modernizadora, por ejemplo, "Tiana y el sapo" ("The princess and the frog", 2009), de John Musker & Ron Clements.

Ahora algo de sabiduría ajena que nos muestre, no en vano, el reflexivo conocimiento de otros:

 - "Los espejos, antes de darnos la imagen que reproducen, deberían reflexionar un poco".  (Jean Cocteau).

 - "Hay que ser sublime sin interrupción. El dandy debe vivir y morir ante el espejo".  (Charles Baudelaire).

 - "Amarse a uno mismo es el comienzo de una aventura que dura toda la vida".  (Óscar Wilde).

 - "Suprime la vanidad de las mujeres y habrás eliminado la mitad, por lo menos, de la ambición de los hombres".  (Jacinto Benavente).

 - "El primer beso es mágico, el segundo íntimo, el tercero rutinario".  (Raymond Chandler).

 - "Si quitáis de nuestro corazón el amor de lo bello, nos quitáis todo el encanto de vivir".  (Jean Jacques Rousseau).

 - "La belleza exterior no es más que el encanto de un instante. La apariencia del cuerpo no siempre es el reflejo del alma".  (George Sand).

Besos y abrazos,

Don.

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Jubiloso matutino de dorados alojamientos

¡Buenos días!

Otro día más de alborozada primavera, ya perfectamente alojada en nuestros corazones, lo que nos permite vivir dorados momentos cualesquiera que sean las circunstancias que nos toquen vivir. Por lo demás, en este alojamiento matutino que no parece vaya a jubilarse jamás, no cesa el jubileo de mis hadas y ninfas, que siempre me reportan infinita alegría de vivir.

Este fin de semana estuve en el cine viendo "El exótico Hotel Marigold" ("The best exotic Marigold Hotel"), de John Madden, y con Judi Dench, Bill Nighy, Penélope Wilson, Dev Patel, Tom Wilkinson y Maggie Smith, entre varios otros más. De este director había visto tres de sus anteriores films, en concreto su anterior, "La deuda" ("The debt", 2010).

Siete variopintos jubilados británicos se ven seducidos por la publicidad (retocada con photoshop) de un exótico hotel de la India, que les ofrece el paraíso dorado a precios razonables. Pero cuando llegan comprueban que la residencia está bastante destartalada y en proceso (incierto) de reforma. Inicialmente decepcionados, se irán adaptando en mayor o menor grado a su nueva situación, tratando de disfrutar lo más que pueden. En el proceso, sus vidas y miradas a lo que les rodea irán cambiando.

Una muy buena película, una amable comedia romántica sobre un grupo de "jubiletas" que se ven abocados a tener que adaptarse y aceptar los cambios sobrevenidos: nunca es tarde para cambiar. Una historia de pleno optimismo, a pesar de las vicisitudes, y gran sabiduría vital que me dejó un muy agradable regusto final.

Ahora algo de sabiduría ajena que tal vez nos jubile de nuestros eventuales pesares:

 - "Mi sueño es el de Picasso: tener mucho dinero para vivir tranquilo como los pobres".  (Fernando Savater).

 - "La vida es fascinante: sólo hay que mirarla a través de las gafas correctas".  (Alejandro Dumas).

 - "El primer paso para la solución de los problemas es el optimismo. Basta creer que se puede hacer algo para tener ya medio camino hecho y la victoria muy cercana".  (John Baines).

 - "El júbilo verdadero sólo se adquiere a costa de un dolor vencido".  (Benjamín Jarnés).

 - "Ser feliz no es conseguir lo que deseas, es desear lo que tienes".  (Garth Brooks).

 - "Al final, lo que importa no son los años de la vida, sino la vida de los años".  (Abraham Lincoln).

 - "El cambio de costumbres es el único medio de que disponemos para mantenernos en vida y rejuvenecernos. Tal es el objetivo del cambio de aires y de lugar del viaje de recreo".  (Thomas Mann).

Besos y abrazos,

Don.

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Redentor matutino por puro instinto

¡Buenos días!

Tras unos primeros días tras su equinoccio, en los que la primavera aguantó y aguantó al entrometido invierno, que se negaba a aceptar su error, nevada equinoccial incluida, ésta decidió explotar, instintivamente, cuando ya no pudo más, en efervescente bullicio vital, arrinconando y enterrando al invierno, y regalándonos unos serenos y soleados días de casi paraíso terrenal, en los que bordeamos los 20ºC de máxima, que nos libran de casi cualquier mal, reconfortándonos sobremanera.

Ayer estuve en el cine viendo una película sobresaliente, casi de diez, que no se lo pongo porque la perfección, como se destila del film, no existe, y que por tanto os recomiendo encarecidamente, muy encarecidamente que vayáis a ver. Se trató de "Redención" ("Tyrannosaur"), de Paddy Considine (también guionista), y con Peter Mullan (un monumental actor, sin desmerecer al resto, que rayan a similar altura), Olivia Colman, y Eddie Marsan. Es el primer largo como director de este también actor, de quien he visto varias de sus actuaciones.

Un desempleado, viudo, alcohólico y atormentado, que rezuma ira, rabia y violencia por los cuatro costados, contra todo y casi contra todos, tras una buena curda conoce por casualidad a una dependienta, de vida acomodada, casada y beatona, que trabaja por caridad cristiana en un bazar de la beneficencia. Él, totalmente descreído de todo, se burla con saña de la fe religiosa de ella y de su regalada vida, a pesar de la dulzura con la que es acogido. Al día siguiente, arrepentido, vuelve a la tienda a pedirle perdón. Sin saber muy bien por qué, sigue repitiendo las visitas y va tomando conciencia de que las apariencias engañan.

Un duro e intenso drama, de esos que te ponen los 'congojos' a la altura de las amígdalas, portentosa historia de amor de dos almas y cuerpos heridos, durísimos por fuera y muy tiernos por dentro, que se necesitan el uno al otro para tratar de superar sus propios lastres, que ellos mismos no pueden con los propios. ¡Ah!, y si queréis saber el porqué de su desconcertante y extraño título original, una simpática anécdota, además de por el comportamiento de los dos personajes principales como insitintivos depredadores cuando se sienten acorralados, no tenéis más que ir a ver el film.

Ahora algo de redentora sabiduría ajena, que tal vez nos libre de irreflexivos impulsos que hagan y nos hagan daño:

 - "Si quieres hallar en cualquier parte amistad, dulzura y poesía, llévalas contigo".  (Georges Duhamel).

 - "La belleza complace a los ojos; la dulzura encadena el alma".  (Voltaire).

 - "El amor engendra amor e incluso la naturaleza más ruda no siempre alcanza a resistir su fuerza. Si muchísimos hombres hubieran hallado más amor en su infancia y en su juventud, seguramente serían más humanos y más felices".  (Niemeyer).

 - "Asistí, como si fuese un espectador de mí mismo, a la lucha inútil que emprendió mi corazón por no dejarme seducir por una mujer que no pertenecía a mi mundo. Aplaudí cuando la razón perdió la batalla y la única alternativa que me quedó fue entregarme, aceptar que estaba enamorado".  (Paulo Coelho).

 - "Cualquiera puede enfadarse, eso es algo bastante sencillo. Sin embargo, enfadarse con la persona adecuada, en el grado exacto, en el preciso momento, con el propósito justo, y del modo correcto, eso no resulta tan sencillo".  (Aristóteles).

 - "¿Para qué sirve el arrepentimiento si eso no borra nada de lo que ha pasado? El arrepentimiento mejor es sencillamente cambiar".  (José Saramago).

 - "Quiero corregirme, amigo mío, y te doy palabra de hacerlo; te prometo no volver a rumiar los dolores pasajeros que la suerte nos ofrece sin cesar; quiero gozar el presente, y que lo pasado sea para mí pasado por completo"  (Goethe).

Besos y abrazos,

Don.
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Tenemos que hablar de los matutinos

¡Buenos días!

Esta primavera descarriada, que ayer de madrugada nos regaló una buena nevada seguida de necesarias lluvias, tras semanas y semanas de cielos enjugados, parece que quiere volver al redil y dejar de hacernos sufrir con tiriteras, básicamente debidas a las ventoleras que nos dejaban enjutos de calor. Veremos si esta charla matutina sobre la primavera la encarrila, pero como pasa con los niños revoltosos, tras unos días de sereno sol que nos pronostican los meteorólogos, seguro que volverá a su natural ser zascandil. ¡Ah!, y de los matutinos ni hablamos, que ya hablan ellos bastante.

Este fin de semana estuve en el cine viendo una estupenda película, que os recomiendo si no os importa ver historias algo incómodas, pero necesarias. Se trató de "Tenemos que hablar de Kevin" ("We need to talk about Kevin"), de Lynne Ramsay, basada en la novela homónima de Lionel Shriver, y con Tilda Swinton, John C. Reilly, y Ezra Miller. Es el tercer largo de esta directora, y primero suyo que veo.

Una escritora de guías de viaje, varios años casada, tiene que dejar de lado, con cierto disgusto, su carrera profesional para dar a luz a Kevin. Desde el mismo principio la relación entre la desprendida madre y su no muy deseado hijo es muy difícil. Cuando faltan pocos días para que cumpla los 16 Kevin hace algo irracional e imperdonable. La madre se plantea si llegó a amar realmente a su hijo, sus maternales aptitudes, y en que medida su actitud hacia el niño pudiera haber sido la causa de su intrínseca maldad.

Una película que nos muestra algo que parece que nos negamos a querer ver, que no todas las familias se llevan bien, ni siempre hay buenas relaciones entre padres e hijos, y que su crianza es dificilísima a pesar de las mejores intenciones. Una peculiar mirada a la maternidad en la que se nos plantean preguntas incómodas, como la de que si debemos querer a nuestros hijos ... de respuesta no necesariamente obvia si miramos alrededor nuestro, aunque la respuesta siempre tendría que ser "sí" (la paternidad responsable).

Se nos muestra a una madre que trata de llevar con cierta dignidad su culpa, la de haber criado (o malcriado), junto con la imprescindible colaboración de su buenrollista esposo, a tal monstruo; autoestima casi constantemente aplastada por el desánimo, la desesperación, la desolación y el temor. Se exponen hechos, con seca frialdad teñida de rojo, no se especula sobre si la madre educó mal a su hijo o no ... eso queda a criterio del espectador.

Por esa desoladora visión del lado feo de la sociedad, ese al que no gusta mirar, me recordó a las películas de Todd Solondz, muy incómodas de ver, tres de las cuales he visto: "La vida en tiempos de guerra" ("Life during wartime", 2009); "Palíndromos" ("Palindromes", 2004); y "Happiness" (1998), otra espléndida película, que también os recomiendo, con la misma advertencia que para la glosada hoy.

Ahora algo de sabiduría ajena, que seguro nos ayuda a encarrilar nuestras circunstancias, y a nosotros mismos:

 - "Negar un hecho es lo más fácil del mundo. Mucha gente lo hace, pero el hecho sigue siendo un hecho".  (Isaac Asimov).

 - "Algunos creen que para ser amigos basta con querer, como si para estar sano bastara con desear salud".  (Aristóteles).

 - "Podrían engendrarse hijos educados si lo estuvieran los padres".  (Goethe).

 - "Dos excesos deben evitarse en la educación de la juventud; demasiada severidad, y demasiada dulzura".  (Platón).

 - "Educad a los niños y no será necesario castigar a los hombres".  (Pitágoras).

 - "Los hombres son siempre niños, aun cuando a veces asombren por su crueldad. Siempre necesitan educación, tutela y amor".  (Máximo Gorki).

 - "No son las malas hierbas las que ahogan la buena semilla, sino la negligencia del campesino".  (Confucio).

 - "No hay ni malas hierbas ni hombres malos. No hay más que malos cultivadores".  (Víctor Hugo).

 - "Tan solo debes sembrar lo que puedas abonar".  (refrán).

Besos y abrazos,

Don.

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Emocionantes vaivenes matutinos

¡Buenos días!

Esta voluble primavera, que siempre nos turba emocional y carnalmente con todos sus altibajos, está ajetreada yendo y viniendo de sí misma, coqueteando con el dulce invierno (previsión de mínima de 2ºC y máxima de 11ºC), con el que se entrega a fríos arrebatos pasionales acompañados de suaves ventoleras (suyas y de su propio clima), ¡y nevadas!, como la de esta madrugada en los alrededores de Madrid. Duda de si quedarse mimando al invierno, haciéndole cándidos arrumacos, o si florecer para polinizarnos a todos en una vorágine de orgásmica pasión floral y lanzarse volando a por el ardoroso verano, con el que cuajará toda su volatilidad en un clímax de jugosos y placenteros frutos.

Este fin de semana estuve en el cine viendo "La montaña rusa", de Emilio Martínez Lázaro, y con Verónica Sánchez (tan deliciosa como siempre), Alberto San Juan y Ernesto Alterio. De este director he visto la mayoría de su filmografía que comenzó en 1977, y en concreto sus tres últimos films: "El otro lado de la cama" (2002), "Los 2 lados de la cama" (2005), y "Las 13 rosas" (2007).

Tras muchos años, una chica se reencuentra con dos amigos de la infancia: uno de ellos es un showman televisivo de éxito, el otro malvive trabajando ocasionalmente de mimo y payaso en pequeños cabarets y fiestas de cumpleaños para niños. Al primero se lo rifan las mujeres pero no les hace mucho caso. El segundo, un artista en la cama, no para de tener ligues de una noche. Ella, que en sus anteriores relaciones jamás disfrutó con el sexo ni encontró al amor de su vida, duda entre los dos, va y viene de uno a otro, pues con el primero consigue una estable relación emocional (con poco sexo); y con el otro (bastante inseguro e inestable) se eleva a las más altas cotas de placer sexual; así que sumando lo mejor de cada uno hacen el hombre diez.

Una buena y divertida comedia romántica, aunque con más sexo que amor, y con menos risas de las que esperaba, pero aun así me gustó bastante, incluso a pesar de alguna caída al humor grueso. Una historia sobre las dificultades y conflictos de las relaciones de pareja, sobre la imposibilidad de tenerlo todo a la vez y en uno solo, y los disgustos que nos ocasiona tratar de buscar lo imposible, incluso tratándose de triángulos nada equiláteros y con base picada.

Ahora algo de sabiduría ajena, a modo de suaves caricias que suman placer para tratar de lograr ese asintótico clímax que es la sabiduría total:

 - "Si al franquear una montaña en la dirección de una estrella, el viajero se deja absorber demasiado por los problemas de la escalada, se arriesga a olvidar cual es la estrella que lo guia".  (Antoine de Saint Exupéry).

 - "Cuando dos hombres desean la misma cosa que no pueden gozar juntos se convierten en enemigos".  (Thomas Hobbes).

 - "La música es para el alma lo que la gimnasia para el cuerpo".  (Platón).

 - "Sólo existen dos cosas importantes en la vida. La primera es el sexo y la segunda no me acuerdo".  (Woody Allen).

 - "El sexo sin amor es una experiencia vacía. Pero como experiencia vacía es una de las mejores".  (Woody Allen).

 - "El amor es la respuesta, pero mientras usted la espera, el sexo le plantea unas cuantas preguntas".  (Woody Allen).

 - "El amor es una comedia en un sólo acto: el sexual".  (Enrique Jardiel Poncela).

Besos y abrazos,

Don.

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De alocados incidentes matutinos y otras yerbas

¡Buenos días!

Hace muy pocas horas, a eso de las 06:14, pasamos circunstancialmente por el equinoccio; y fue de un modo incidental puesto que ya llevábamos de serena primavera bastantes días del astronómico invierno, pero este hecho puntual y sin importancia parece que ha alterado a la habitualmente alocada primavera, haciéndole brotar unas nubes en el cielo y refrescando (máxima de 14ºC prevista para hoy) y limpiando el ambiente a base de juguetones resoplidos que zarandean hasta a los más dormidos, esperemos que promesa de revitalizantes pasiones aún por llegar.

Este fin de semana estuve en el cine viendo "Las malas hierbas" ("Les herbes folles"), de Alain Resnais, basado en la novela "L'incident" de Christian Gailly, y con Sabine Azéma y André Dussolier. De este ya casi nonagenario director, una de las figuras de la "nouvelle vague", es el primer film que veo.

Arrancamos de un hecho casual: a una madura mujer le roban su bolso a la salida de una tienda. Poco después otro hombre de más o menos la misma edad, casado y con hijos, encuentra su cartera tirada en un parking público. Viendo la documentación imagina como puede ser esa mujer. Tras dudar, decide llevarla a la policía. La mujer, al ir a recogerla, siente la curiosidad de saber quien ha sido el buen samaritano y decide llamarle para agradecerle el acto. Él quiere un encuentro personal, ella se niega, él se frustra y decepciona pero, obstinado, toma la decisión de ir a buscarla.

Una película extraña, rara, rara; sobre extraños comportamientos provocados por azarosas pulsiones que exacerban nuestros alocados deseos y nos nublan las entendederas; sobre lo que imaginamos y esperamos del otro, aunque prácticamente nunca cuadre con lo que realmente es; sobre esas malas hierbas que molestan por crecer donde no se las espera, pero a las que se acaba queriendo por su tenacidad, a pesar de no querer reconocerlo.

Tiene cierto punto de innovación formal, más destacable por la edad del director, con un montaje y fotografía excelentes; pero la historia alternó momentos de extrema lucidez con otros, los más, en los que el discurso me desbarraba sobremanera, como si chocheara su creador, aunque más bien creo que se debió de fumar alguna mala hierba (o demasiado buena) mientras la escribía y dirigía.

Ahora algo de sabiduría ajena que nos ayude a que broten, donde quiera que sea, todas esas buenas semillas que llevamos dentro:

 - "En todo lo que nos rodea y en todo lo que nos mueve debemos advertir que interviene en algo la casualidad".  (Anatole France).

 - "La casualidad nos da casi siempre lo que nunca se nos hubiere ocurrido pedir".  (Alphonse de Lamartine).

 - "El yerro es un hecho bastante común entre los seres humanos; cuando se ha cometido un fallo, el sabio procura reparar el daño que ha realizado y no se mantiene inmutable. La obstinación en el error engendra todo tipo de males".  (Sófocles).

 - "Más vale buena esperanza que ruin posesión".  (refrán).

 - "La misma esperanza deja de ser felicidad cuando va acompañada de la impaciencia".  (John Ruskin).

 - "El amor es una hierba espontánea; no una planta de jardín".  (Ippolito Nievo).

Besos y abrazos,

Don.

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Ilusionantes augurios de los voceros matutinos

¡Buenos días!

Justo hoy, que es el idus de marzo, os digo que los augurios astronómicos vaticinan que pasaremos por el equinoccio primaveral en menos de una semana, el martes día 20 a las 06:14 horas; y los meteorológicos que seguirá el clima primaveral que venimos teniendo desde muchos días atrás, en este invierno descafeinado de las últimas semanas, hasta el mismo equinoccio. Y de entre el vocerío de pajaritos cantarines que aletean henchidos de ilusión primaveral yo os extraigo en primicia los primores cinéfilos que me soplan cada día, y que también sondeo entre mis hadas y ninfas.

Uno de los cuales es el magnífico y sobresaliente film que pasaré a glosaros ya mismo, y que os recomiendo encarecidamente. Se trató de "Los idus de marzo" ("The ides of march"), de George Clooney, y con él mismo, Ryan Gosling, Philip Seymour Hoffman, Paul Giamatti, Evan Rachel Wood, y Marisa Tomei. Está basada en la obra teatral "Farragut North" de Beau Willimon, quien se inspiró en su propia experiencia en campañas electorales. Es el cuarto largo como director de este también actor, de quien solo había visto su segundo (como director, amén de la mayoría como actor): "Buenas noches, y buena suerte" ("Good night, and good luck", 2005).

Un brillante e idealista joven trabaja como segundo del jefe de campaña electoral de un gobernador, político al que admira, y prometedor candidato por el Partido Demócrata para ser presidente de la nación. Durante la campaña de las primarias en Ohio comprobará de primera mano, y aprenderá en carne propia, como se las gastan en las cocinas y cloacas de la guerra política con tal de llegar al puesto más alto, a cualquier precio y renunciando al más leve atisbo de integridad moral.

Una espléndida película, un intenso y emocionante thriller político que me encantó, sobre la metamorfosis (no sé si kafkiana) que convierte a nuestro idealista personaje en un perfecto cínico (como casi todo su entorno político ya lo era), tras un rápido proceso de maduración, a anímicos golpes, e instantáneamente sublimado en podredumbre. Él sobrevivió, a su brusca caída del guindo, tragando sapos y culebras; sin embargo, otros desaparecieron envenenados por el camino.

Y lo que vale para nuestro personaje (y su entorno) en ese país concreto vale para individuos y grupos sociales enteros en cualesquiera otros países. Además, fijaos en que los idealistas son mayoría entre la juventud, y los cínicos y descreídos entre los ya maduros ... cosas de la experimentada maduración, a la que unos llegan antes que otros (y algunos la enmascaran perfectamente) ... y con cien años, todos calvos ...

Ahora os hago de vocero de la sabiduría ajena que por ahí he ido escarbando, con la idea de que hocéis de entre ella lo que más os acomode:

 - "[...] el incumplimiento de la ley, la manipulación de la democracia, los trapicheos en la trastienda política, las maniobras de poder ... todo eso es verdad. Es aterrador constatar la cantidad de políticos capaces de cualquier cosa con tal de llegar al despacho más importante del país. No se alcanza la presidencia de los Estados Unidos cumpliendo las reglas del juego".  (Beau Willimon).

 - "La política es una guerra sin efusión de sangre, y la guerra, una política con efusión de sangre".  (Mao Tse Tung).

 - "El arte de gobernar no es más que la razón y la moral aplicadas al gobierno".  (Jaime Balmes).

 - "El poder tiende a corromper y el poder absoluto corrompe absolutamente".  (Lord Acton).

 - "No es cierto que el poder corrompa, es que hay políticos que corrompen al poder".  (George Bernard Shaw).

 - "El poder no corrompe; el poder desenmascara".  (Rubén Blades).

 - "No hay quien sea enteramente inaccesible a la adulación, porque el hombre mismo que manifiesta aborrecerla, en alabándole de esto es adulado con placer suyo".  (William Shakespeare).

 - "Lo que los hombres llaman amistad no es otra cosa que una alianza, una armonización recíproca de intereses, un intercambio de favores. En realidad, no es más que un trueque en el que el amor propio trata de ganar siempre".  (François de la Rochefoucauld).

 - "Algunas personas son tan falsas que no distinguen que lo que piensan es justamente lo contrario de aquello que dicen".  (Marcel Aymé).

 - "Nadie ofrece tanto como el que no va a cumplir".  (Francisco de Quevedo).

Besos y abrazos,

Don.

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