En
este club en el que cada vez somos más, o eso creo, no suelo acomodarme al
gusto de otros, que suelo manifestar mis más sinceras opiniones sobre esta o
aquella película, obra de teatro o similar, leyendo entrelíneas lo que nos
proponen sus autores, y esperando que tras ello provoque cierto debate entre
los que por aquí pasan, sea en el interior de cada cual o entre varios. Tras
varios días de lluvia no sé si el otoño quiere contemporizar con nosotros con
este día agradable y algo soleado, con nubes y claros, y máxima prevista de
15ºC, y festivo por más señas. En cualquier caso no debatiré con él sobre si
esto es mejor o peor que cuando se nos pone lluvioso, y que cada cual disfrute
con lo que mejor le parezca.
Ayer
por la tarde estuve en el cine viendo "La sociedad literaria y el
pastel de piel de patata" ("The Guernsey Literary and
Potato Peel Pie Society"), de Mike Newell, y con Lily James (guapísima),
Michiel Huisman, Glen Powell, Jessica Brown Findlay, Matthew Goode, y Tom
Courtenay. Está inspirada en la novela homónima (en inglés) de Mary Ann Shaffer
y Annie Barrows, todo un exitazo editorial que no he leído. De la larga filmografía de este
director únicamente había visto hasta ahora tres de sus films anteriores: "Cuatro
bodas y un funeral" ("Four weddings and a funeral", 1994),
"El amor en los tiempos del cólera" ("Love in the
time of cholera", 2007), y "Grandes esperanzas" ("Great expectations",
2012).
En
el Londres de 1946, apenas acabada la II Guerra Mundial, una escritora y
periodista anda buscando una historia para su siguiente novela, que le llega
inesperadamente a través de la carta de un desconocido, un granjero de
Guernsey, una pequeña isla del Canal de la Mancha, que fue ocupada por los
nazis durante la guerra. Se presenta como miembro de un peculiar club de
lectura (el del título), creado de la forma más peregrina por un pequeño grupo
de aldeanos durante la ocupación para salir al paso de un apuro. Tras cartearse
ambos por un tiempo, y fascinada por ello, la joven decide emprender viaje
allí, adentrándose en un mundo cerrado que guarda celosamente secretos
inesperados y temeroso de que sean desvelados por ella.
Una
buena película (nota: 6), que se ve con agrado, entretenida y divertida,
sin mayores alharacas, aunque yo además tuve el aliciente de disfrutar de la
belleza de la protagonista. Melodramedia romántica con triángulo amoroso, que
destila entusiasmo por los libros e incita a la lectura, y que como es de rigor
en el género contiene tensión sexual no resuelta (hasta el final), mientras la
indecisa protagonista trata de resolver, de averiguar, el misterioso secreto
que guardan los miembros de la sociedad, resuelto todo al final, tanto la
tensión sexual de los enamorados como las dudas de la protagonista y el
misterio de los lugareños, tal y como mandan los cánones del final feliz. De
cualquier forma, lo pastelero y meloso quedó bastante contenido, que tampoco
los ingleses se caracterizan por su buen cocinar, pasteles incluidos, sean de
subsistencia en épocas de penuria o más refinados, o eso dice el tópico.
Ahora
unas citas de sabiduría ajena, que espero sean germen de debate, espero que
filosófico, más que literario:
- "Con sus libros, los muertos abren los
ojos a los vivos". (Refrán).
- "Solo obtienes algo de los libros si
eres capaz de poner algo tuyo en lo que estás leyendo". (Sándor Márai).
- "El libro es fuerza, es valor,
es
poder, es alimento;
antorcha
del pensamiento
y
manantial del amor". (Rubén Darío).
Besos
y abrazos,
Don.
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