Cuando
el vértigo de la vida parece acelerarse, nada como un poco de reposo matutino,
retratándome por estos lares para verla desde otra perspectiva, con otro
enfoque, haciéndola discurrir con lentitud para mejor poder apreciarla. Y
vuelta a las andadas. Y hasta la próxima. Por lo demás, estas primeras semanas
de verano parecen también tomárselo con calma, no precipitándose hacia lo
tórrido a las primeras de cambio, yendo pausadamente, para dejar que nos
vayamos adaptando naturalmente. Hoy de nuevo sol, noches sin desvelos térmicos,
y 33ºC de máxima prevista para hoy.
Ayer
por la tarde estuve en el cine viendo "La cámara de Claire"
("Keul-le-eo-ui Ka-me-la", "Claire's camera", o "La
caméra de Claire", que la peli es trilingüe), de Hong Sang-soo, y con
Isabelle Huppert y Kim Min-hee. De este director y guionista coreano había
visto cuatro de sus anteriores films: "En la playa sola de noche" ("Bamui haebyunaeseo
honja", 2017), "Lo tuyo y tú" ("Dangsinjasingwa dangsinui
geot", 2016), "Ahora sí, antes no" ("Ji-geum-eun-mat-go-geu-ddae-neun-teul-li-da",
2015), y "En otro país" ("Da-reun na-ra-e-suh", 2012).
Dos
mujeres coreanas, que trabajan en una productora, se encuentran en Cannes
promocionando una película allí durante el festival de cine. Quedan para
charlar amablemente en un café, y la jefa le dice a su joven empleada que la
despide porque ha dejado de confiar en ella. Poco después sabremos que es
cuestión de celos, pues la joven, en una noche de borrachera se acostó con el
director de la película... y pareja sentimental de la jefa. La chica, desolada
y sin poder volver a su casa pues no pudo cambiar el billete de avión de
regreso ya comprado por otro para volver cuanto antes, deambula triste por las
playas del lugar. Se topa casualmente con una fotógrafa aficionada, enganchada
a las fotos y profesora de profesión, que le pide si no le importa dejarse
retratar, y con quien termina compartiendo confidencias. Esta a su vez ya hizo
lo propio con el director y con la jefa.
Apenas
nada me dijo (nota: 2) esta película, cuyo director, bastante pagado
de sí mismo según mi parecer, va de mal en peor por lo que a mí respecta pues,
incluso a pesar de tener parecidos mimbres todas, las tres primeras películas
suyas que vi sí que me gustaron, incluso la del medio fue estupenda, pero esta
y la anterior nada de nada, así que ya me aburre en su reiteración de mirarse
el ombligo, y creo que no volveré a ver otra suya. Maneras casi de novato,
supongo que impostadas, diálogos triviales, por no decir que además me parecían
pueriles, y demás perlas, lo que me hace sentir con el pelo tomado.
Bueno,
a ver si puedo remediar tal disgusto con alguna de las perlas de sabiduría
ajena que tengo perdidas por la recámara y que no sé si nos retratarán mejor o
peor:
- "Es imposible hacer una buena película
sin una cámara que sea como un ojo en el corazón de un poeta". (Orson Welles).
- "Afortunadamente, no tenemos por qué
parecernos a nuestros retratos".
(Anatole France).
Besos
y abrazos,
Don.
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