jueves, 21 de diciembre de 2017

Estelares matutinos que se resisten a desvanecer

¡Buenos días!

Una mañana tras otra se revelan ante mí, y no sé si también a veces se rebelan contra mí, y por mucho que cierre los ojos, sea por sueño o por lo que sea, tratando de que desaparezcan de ellos las chiribitas cual minúsculas estrellitas que a veces los obnubilan, cuando los abro ahí siguen, incluso cuando regreso a la realidad cotidiana. De momento, hoy, el último de ellos en aparecer por aquí es este. Al que ya no le queda otra y ya le toca desaparecer tras el umbral del solsticio de invierno (hoy a las 17:28 horas) es a este otoño de calendario que apenas lo fue en meteorología, casi verano en sus principios e invierno en sus postrimerías. No será el último, que ya vendrán otros en años sucesivos.

Este fin de semana estuve en el cine viendo "Star wars: Los últimos jedi" ("Star wars: The last jedi"), de Rian Johnson, y con Daisy Ridley, Adam Driver, Óscar Isaac, Mark Hamill, Carrie Fisher, John Boyega, Kelly Marie Tran, Domhnall Gleeson, Benicio del Toro, Laura Dern, y mogollón más. Es el cuarto largo de este director, de quien había visto sus estupendos tercero y primero: "Looper" (2012) y "Brick" (2005). La peliculilla en cuestión es la octava de la saga, que ya cansa, ya lleva cansando un par de milenios, tras, lógicamente, ¿lógicamente?, la séptima: "Star wars: El despertar de la fuerza" ("Star wars: The force awakens", 2015) de J. J. Abrams.

Inútil esbozar sinopsis argumental alguna de este episodio VIII, que los obnubilados fans se saben al dedillo y casi podrían recitar cual mantra de rosario, y al resto ni les merece la pena el saberla, pues es más de lo mismo, y siempre lo mismo, y dale matraca... todavía me sigo preguntando como me dejé convencer -por mí mismo, que no hizo falta nadie más- para ir a verla... cosas veredes que non crederes... Esto ya empieza a ser peor que un culebrón televisivo, que da igual los capítulos o episodios que te saltes, que si cometes la irresponsabilidad de volver apenas habrás notado tu propia ausencia, pues la vida sigue igual... yeah...

A pesar de su buen director y de la dulce y deliciosa hermosura de Daisy Ridley, que me evitó caer en el lado oscuro del aburrimiento y de la irritación (cosas de la sobredosis de epopeya), le lastra su muy anquilosada estructura, cansina hasta la hartura (nota: 3), y aunque no es peor que su predecesora la séptima, a la que puse un cuatro, me retracto de esto y le rebajo la nota al tres también. Deberían tomar nota de lo que dice el malo malísimo de esta: es momento de dejar morir lo viejo. Pues eso, que ni se molesten en la novena. No me harán caso, que el dinero les llegará a espuertas por legiones de zombis entrando en las salas... ¿nos habrán invadido los ultracuerpos?, ¿seré yo ya uno de ellos?... ¡qué la fuerza (intelectual) me acompañe!...

... Pues con estas citas de sabiduría ajena espero que algo nos la incremente:

 - "En la vida, el primero y el último maestro es el vivir mismo, con riesgos y sin reservas".  (Franz Werfel).

 - "La causa justa, toda causa justa, se convierte en injusta en el momento en que la llevamos hasta sus últimas consecuencias".  (Hans M. Enzensberger).

 - "La violencia es el último recurso del incompetente".  (Isaac Asimov).

Besos y abrazos,

Don.
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