¡Buenos días!
Ruego (por lo bajini) que este matutino que estoy gestando, como ya sucediera con todos los anteriores que le precedieron, llegue a buen término, para que cuando vea la luz y os llegue le adoptéis con la mejor de vuestras intenciones. Y seguimos en estos días de otoño de calendario como si los hubieran sustituido por otros de canónico invierno, con madrugadas frías, rozando la helada, jornadas ventosas y más o menos nubosas y lluviosas, más bien desapacibles, aunque hoy parece que no tanto, en este día soleado con 12ºC de máxima prevista por los madriles.
Este fin de semana estuve en el cine viendo "La hija" (2021), de Manuel Martín Cuenca, y con Javier Gutiérrez, Patricia López Arnaiz, Irene Virgüez, y Juan Carlos Villanueva. Es el sexto largo de este muy sobresaliente director, de quien he visto sus cinco anteriores: "El autor" (2017), "Caníbal" (2013), "La mitad de Óscar" (2010), "Malas temporadas" (2005), y "La flaqueza del bolchevique" (2003).
Una joven de 15 años embarazada huye del centro de reclusión para menores en el que está interna y se reúne con uno de los educadores que allí trabajan, quien le ha ofrecido irse a vivir con él y su mujer a una remota casa en la sierra para que pueda llevar a buen término su embarazo, con la condición de entregarles tras el parto el bebé a ellos, que no han podido tener sus propios hijos. Pero este pacto puede romperse en cuanto la joven sienta como suya esa vida que gesta.
Muy buena película (nota: 7), con las excelentes maneras formales habituales de su director, este drama de atmósfera desasosegante, en el que el inquietante suspense va en aumento conforme avanza para acabar casi en una de terror, todo a fuego lento. Historia de como el natural deseo de ser padres de una frustrada pareja infértil deviene en obsesión y horror en cuanto se pasan de la raya, más inquietante si cabe al aparentar suma bondad y amabilidad; y de ambigüedad moral, y de la maternidad y en qué consiste verdaderamente ser madre, peliagudo tema diría yo que sin respuesta (única).
Ahora, sin esperar a que se hagan de rogar, ahí os dejo estas citas de sabiduría ajena:
- "Lo rogado siempre es caro". (Refrán).
- "Nunca faltan rogadores para putos y malhechores". (Refrán).
- "Viajero, no hagas larga la estancia en una ciudad donde las madres ofrezcan el escándalo de hacer llevar a sus niños sobre el seno de una esclava". (Pitágoras).
- "Si no eres feliz con lo que tienes, tampoco lo serás con lo que te falta". (Erich Fromm).
Besos y abrazos,
Don.
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