¡Buenos días!
Otra mañana que me muevo al compás de estos mis bien amados matutinos en los que desparramo mis fantasías, un tanto alocadas a veces, como mejor remedio a mis eventuales desequilibrios neuronales, que se enderezan a vueltas con ellos... y sin necesidad de bailarnos constantemente el agua, como parece está haciendo cada vez más a lo largo de estos días, los pasados y los por venir, esta primavera de calendario seduciendo al verano para que venga antes de tiempo. La máxima prevista para hoy por los madriles será de 33ºC... y subiendo en sucesivos días.
Ayer por la tarde estuve en el cine viendo "Esperando a Míster Bojangles" ("En attendant Bojangles", 2021), de Régis Roinsard, basado en la novela homónima de Olivier Bourdeaut, y con Virginie Efira, Romain Duris, Grégory Gadebois, y Solan Machado-Graner. Es el tercer largo de este director francés, de quien había visto su primero, "Popular" ("Populaire", 2012).
Chico que se cuela y conoce chica en una fiesta de alto copete en la Riviera Francesa a finales de los años 50, congenian y caen prendidos el uno del otro al instante. Ambos son excéntricos, él con propensión a embaucar a la gente contándoles fabulosas historias que hace pasar por verdaderas, y ella, ciclotímica, con tendencia a ver la vida como una fantasía y viceversa. Unos diez años después siguen conviviendo juntos, cada vez más enamorados, con un hijo que tiene algo de cada uno de ellos, y un pájaro exótico, en un lujoso apartamento parisino en el que casi cada noche es fiesta a la que acuden muchos invitados y la pareja baila su canción de amor favorita, "Mr. Bojangles", mientras el chaval observa a su alrededor. Poco a poco ella irá sumiéndose con mayor frecuencia y profundidad en su locura, y padre e hijo harán todo lo posible por tratar de que esté a salvo en su mundo.
Curiosa película (nota: 5), y no solo por el nombre de una de sus empresas productoras, sino también porque a pesar de algunos pesares mantuvo mi interés con sus rarezas (principalmente las de sus personajes protagonistas), y por la exultante belleza de su actriz principal. Historia de profundo amor, tanto a la pareja como a sus retoños, llevado casi hasta la locura; de que un poco de locura, bien llevada, es incluso buena y necesaria para una vida dichosa; y de como la grave enfermedad mental de uno de sus miembros afecta a las relaciones familiares.
Dejemos ya de esperar a la sabiduría ajena, pues ya está aquí, con estas citas que seguro nos ayudan a no bailar al son que otros toquen:
- "Según la definición de los estoicos, la sabiduría consiste en que la razón sea nuestra guía; la locura, por el contrario, en que las pasiones nos gobiernen. Pero para que la vida de los hombres no sea totalmente triste y aburrida, Júpiter les ha dotado de muchas más pasiones que de razón". (Erasmo de Rotterdam).
- "Se puede ser todo lo loco que se quiera con tal de reconocerlo". (Erasmo de Rotterdam).
- "Las únicas personas que me agradan son las que están locas: locas por vivir, locas por hablar, locas por ser salvadas". (Jack Kerouac).
Besos y abrazos,
Don.
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