martes, 27 de mayo de 2008

Matutino de aventuras indianas

¡Buenos días!

Es toda una aventura ir sin paraguas durante estos días de chaparrones primaverales, pues no se sospecha el acechante aguacero, que al doblar una esquina te cae tal chaparrada que te pone hecho una sopa y que casi te hace ser un sopas por un momento, dejándote como alelado. Seguimos, obviamente, de nubes, chaparrones y algo de tímido sol de cuando en cuando. En las Indias no he estado jamás, ni en las occidentales (América), ni en las orientales (India). Si acaso, tengo mis particulares Indias meridionales en la ribera del Arlanzón, a pocos metros al sur de mis ventanales, con toda su tribu de encantadoras hadas y ninfas, donde no me importaría establecer una colonia, aunque fuera aromática, y regresar de vez en cuando como indiano ricachón de placeres, para rápidamente volver.

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo "Indiana Jones y el reino de la calavera de cristal" ("Indiana Jones and the kingdom of the crystal skull"), de Steven Spielberg, y con Harrison Ford, Cate Blanchett, Shia LaBeouf, Karen Allen, y John Hurt. Cuarta entrega, casi 20 años después de la famosísima trilogía de los años 80: "En busca del arca perdida", "Indiana Jones y el templo maldito", "Indiana Jones y la última cruzada". La película me pareció innecesaria por reiterativa, aunque buena para pasar un rato entretenido a base de aventuras sin mayores consideraciones.

Como es lógico, una de aventuras fantásticas en la Norteamérica de los años 50, cuando la paranoia anticomunista y la caza de brujas (la trilogía se desarrolla en los años 30 cuando el auge nazi), con guiños a sí mismo de Spielberg ("E.T." y "Encuentros en la tercera fase"), y a las películas serie B de los años 50 ("La invasión de los ultracuerpos", toda una metáfora de esa paranoia anticomunista, "Cuando ruge la marabunta", etc.). Además tiene un final pastelero (al estilo de las pelis de Doris Day de esos años 50), que amenaza con la continuidad de la saga mediante el hijo de Indiana (Shia LaBeouf), y algunos errores culturales de bulto: por ejemplo, Indiana dice en el film que aprendió quechua cuando estuvo en el ejército de Pancho Villa (¿una lengua inca en un país azteca? ... ??? ...). Aunque tampoco le pidamos peras al olmo, que solo es una peli de entretenimiento, y que nadie va a verlas como el que acude a un seminario universitario.

Bueno, como plano-guía durante nuestras aventuras vitales, nada como un poquito de sabiduría ajena:

- "Primero vinieron a buscar a los comunistas y no dije nada porque yo no era comunista. Enseguida vinieron por los judios y no dije nada porque yo no era judio. Después vinieron por los sindicalistas y no dije nada porque yo no era sindicalista. Luego vinieron por los católicos y no dije nada porque era protestante. Por último, vinieron por mí, pero ya era tarde, pues ya no quedaba nadie que dijera nada". (Martin Niemöller).

- "Es extraña la ligereza con la que los malvados creen que todo les saldrá bien". (Edmund Burke).

- "Como no sabían que era imposible, lo hicieron". (Anónimo).

- "El mejor camino para salir es siempre a través". (Robert Frost).

- "Cuando me dicen que ya estoy demasiado viejo para hacer una cosa, me apresuro a hacerla enseguida". (Pablo Picasso).

- "Nuestra juventud es decadente e indisciplinada. Los hijos no respetan ni escuchan ya los consejos de sus mayores. El fin de los tiempos está cerca". (año 2000 A.C., grabado caldeo en piedra).

Besos y abrazos,

Don.
_____

No hay comentarios: