miércoles, 21 de junio de 2023

Estrellados astros matutinos

¡Buenos días!

Amanece, y al que llaman el astro rey asciende desde el levantino horizonte sin miedo a caer por la gravedad y a estamparse contra el suelo, como casi seguramente harán las gotas de lluvia en las tormentas o tormentillas vespertinas que caerán por los madriles según las previsiones, que también anticipan que la máxima será de 30ºC. Por lo demás, otra mañana en la que me siento atraído por otro de mis estelares matutinos, y acá que me dejo caer esperando dejar algo de huella, no sé si tanta como la de un cráter, y tratando de dar un sentido a lo que me espera en la jornada de hoy.

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo "Asteroid City" (2023), de Wes Anderson, y con Jason Schwartzman, Scarlett Johansson, Tom Hanks, Jeffrey Wright, Tilda Swinton, Bryan Cranston, Edward Norton, Adrien Brody, Liev Schreiber, Hope Davis... y un montón de otras estrellas de Hollywood, que es una película muy coral. Undécimo largo de este director, de quien había visto seis de sus diez anteriores: "La crónica francesa" ("The French Dispatch", 2021), "Isla de perros" ("Isle of dogs", 2018), "El Gran Hotel Budapest" ("The Grand Budapest Hotel", 2014), "Moonrise kingdom" (2012), "Viaje a Darjeeling" ("The Darjeeling Limited", 2007), y "Life aquatic" ("The life aquatic with Steve Zissou", 2004), siempre con su muy estrambótica mirada que retrata la realidad como excéntricos universos de cuento. Salvo la de 2012, que me encantó, el resto que vi de su filmografía no me han dicho gran cosa.

En 1955, en una diminuta localidad ficticia en medio del desierto de Estados Unidos, donde hace miles de años impactó un meteorito, se va a celebrar la entrega de premios a los más brillantes cerebritos escolares por sus trabajos científicos, que acuden cada uno con sus respectivas familias, además de celebrarse diversas actividades de avistamiento de fenómenos astronómicos. Pero cierto suceso provocará que las autoridades decreten una cuarentena y todos queden confinados allí.

Película que me dijo más bien poco (nota: 4), una algo desbarajustada colección de coloridas estampas entremezclada con otras en blanco y negro sobre disquisiciones teatrales y artísticas en general, donde en arrebatado color se nos muestra la ficción de la película, que en realidad es la representación de una obra de teatro donde lo que ocurre entre bastidores es en blanco y negro, teatro del absurdo con personajes a veces confundidos con los actores, donde ambos interpelan a su creador, todo narrado desde fuera de esta sucesión de capas metateatrales. A retazos sueltos se me volvió interesante, pero en general me pareció mucho celofán (muy cuidadas las facturas formal y estética) para tan poca chicha narrativa, descuartizada en multitud de viñetas de hierático cómic, sobre el absurdo sentido o sinsentido de nuestras vidas y que deja un sutil poso de crítica social.

Ahora, ahí os dejo estas citas de sabiduría ajena, escogidas de entre las que orbitaban por mi cabeza, esperando que iluminen cual lucero nuestro eventual desconocimiento:

 - "La ignorancia es la noche de la mente; pero una noche sin luna ni estrellas".  (Confucio).

 - "No creo para nada en la eficacia de los sermones; son como los avisos que vemos en las curvas peligrosas: inútiles para los que conducen con prudencia; más inútiles todavía para los que van decididos a estrellarse".  (Jacinto Benavente).

 - "Alégrate de la vida porque ella te da la oportunidad de amar, de trabajar, de jugar y de mirar a las estrellas".  (Henry van Dyke).

Besos y abrazos,

Don.

_____

No hay comentarios: