miércoles, 20 de abril de 2022

Delirante insomnio matutino

¡Buenos días!

Sigo desvariando en estos matutinos como suelo, tal vez debido al poco dormir y mucho madrugar al que con mucha frecuencia me obligan su tempranera publicación, al filo de la madrugada, y mis habituales quehaceres laborales; así como su previa escritura, con nocturnidad y alevosía, tras el visionado (sin ver visiones, espero) de la película que vaya a ver. La mañana se nos despereza con muy gris nubosidad y lluvias, esperando llegar en el cénit de la jornada a los 12ºC de máxima prevista para hoy por los madriles, fríos y desapacibles debido al ventarrón que sopla desde ayer por la tarde, lo que seguro nos espabilará de golpe, en cuanto asomemos por la calle.

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo "Contando ovejas" (2022), de José Corral Llorente, y con Eneko Sagardoy, Juan Grandinetti, Natalia de Molina, Consuelo Trujillo, María Fernanda Valera, Manolo Solo, José Luis García Pérez, Julián Villagrán, y Alfonso Lara. Es el primer largo de este director, que anteriormente lo era de cortos de animación.

En un piso de un destartalado edificio vive un joven solitario y pusilánime, al que le gusta hacer películas de animación con figuritas y maquetas de cartón piedra que él mismo construye, que ejerce eventualmente de conserje de la finca para aminorar la cuantía del alquiler que paga, permanentemente acogotado por su vecino de arriba, un irascible traficante de droga, que no le deja dormir por las continuas y muy ruidosas fiestas que organiza cada noche y hasta la madrugada en su apartamento con los clientes. El nulo dormir hará que se le aparezcan tres peculiares seres, tres carneros bastante cabrones, encarnados en papel maché desde sus vanos intentos de conciliar el sueño enumerando ganado ovino, que tratarán de que recupere la autoestima perdida y haga realidad todos sus sueños, sin importar ni los medios ni las consecuencias.

Una curiosa película (nota: 5), con sus más y sus menos, que me gustó a ratitos, y otros no tanto, esta comedia negra... y roja, por lo sangriento, sobre todo hacia el final, bastante alucinada, que acaba en delirante pesadilla, bastante diferente a lo usual, que nos habla, entre otras cosas, de la dualidad, más bien tricotomía en este caso, que habita en nosotros, especie de trifásico (carajillo con muy mala leche) que puede obnubilar nuestro raciocinio.

Ahora, en lugar de contar corderitos para iros a dormir, que acaba de empezar la mañana, os invito a leer estas citas de sabiduría ajena, que tal vez espabilen nuestras entendederas:

 - "Dormir, despertar; dormir, despertar... ¡Una vida miserable!".  (Franz Kafka).

 - "El dormir no quiere prisa... ni la prisa quiere dormir".  (Refrán).

 - "No es arte pequeño el de dormir: para llegar a dominarlo hay que pasarse todo el día despierto".  (Friedrich Nietzsche).

Besos y abrazos,

Don.

_____

No hay comentarios: