¡Buenos días!
En este otro mundo paralelo
que son para mí los matutinos vivo de otra manera, sólo con la mente, dejándome
llevar donde ellos quieran. Mi realidad, aunque en parte es lo anterior, es
otra. El verano, por fin, aunque no me agrade tanto calor, se ha decidido a ser
de otra manera, más como suele, asfixiándonos de calor, como hoy, con máximas
previstas de 34ºC, situación que seguirá, incluso in crescendo, en próximos
días. Trataré de construirme un acogedor microclima en mi derredor que me haga
todo más llevadero, y donde el calor del amor tenga cabida.
Este fin de semana estuve en
el cine viendo "Dos vidas" ("Zwei
leben"), de Georg Maas, y con Juliane Köhler, Liv Ullmann, Sven Nordin, y
Ken Duken. Es el segundo largo de este director, y primero suyo que veo.
En la Europa de 1990, justo
cuando acaba de caer el muro de Berlín, una mujer criada en la Alemania del
Este pero que lleva 20 años viviendo en Noruega, que es una hija de la guerra,
fruto de un amor entre una mujer noruega y un soldado alemán de la II Guerra
Mundial, lleva una vida feliz y acomodada junto a su madre, su marido, su hija,
y su nieta recién nacida. Un día, un abogado le pide que tanto ella como su
madre testifiquen en un juicio contra el estado noruego para que reconozca la
discriminación a la que sometió a los niños de la guerra, a lo que se niega en
redondo. Ante la presión familiar terminará por acceder, pero toda una red de
oscuros secretos de su pasado irán poco a poco saliendo a la luz.
Una estupenda película que
os recomiendo este thriller de mucha tensión y algunos giros argumentales,
intenso, con aires y maneras de una de esas de espionaje de los años 70; que
también retrata todo un drama familiar, pues nuestra protagonista vive la
desventura de que su felicidad actual está siendo amenazada por su pasado. A
base de flashbacks, especie de retazos de memoria recompuestos y que al final
van encajando como piezas de un puzzle, nos cuenta una historia de víctimas y
verdugos, que son culpables e inocentes, buenos y malos, todo a la vez y
encarnado en las mismas personas, algunos sin conciencia de ello, y otros sí,
especialmente en el caso de la protagonista.
Ahora algo de sabiduría
ajena, que nos ayude a tomar conciencia de quienes somos y quienes son los
otros, y asumirlo:
- "Puesto que estamos destinados a vivir
nuestras vidas en la prisión de nuestra mente, al menos amueblémosla bien". (Peter Ustinov).
- "El único error de Dios fue no haber
dotado al hombre de dos vidas: una para ensayar y otra para actuar". (Vittorio Gassman).
Besos y abrazos,
Don.
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