martes, 9 de febrero de 2021

Matutinillo adoptivo

¡Buenos días!

Este pequeño matutino que he acogido en mi seno tras haberlo parido de mis entendederas no me abandona por más que lo alimente escasamente con mis magras ideas... cosas del mutuo cariño que nos nutre. Pero es ley de vida que en breve vuele a su libre albedrío a través de los informáticos bits, retozando cual cabritilla feliz, en busca de quienquiera aceptarlo por ahí. Las nubes grises y las pertinaces lluvias también parecen querer que las adoptemos tintineando llorosamente en nuestras ventanas, esperando que nos den pena y las dejemos entrar, pero no, mejor salgamos alegremente a la calle a chapotear con ellas en los charcos, con o sin paraguas (o bastoncillo y bombín) como elemento coreográfico. La máxima prevista para hoy por los madriles será de 10ºC, con mínima de 6ºC.

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo "El chico" ("The Kid", 1921), de Charles Chaplin, y con él mismo, Jackie Coogan, y Edna Purviance. Es el primer largo (dura poco más de una hora) de Chaplin, tras muchos cortos anteriores, y con motivo de su centenario se restauró digitalmente y se ha reestrenado en salas hace tres días, pues entonces se cumplían 100 años del estreno. De este insigne cineasta, maestro y casi que pionero del cine, había visto cuando niño y adolescente montones de sus cortos que echaban en televisión por entonces, amén de algún largo que otro posteriormente. En este siglo XXI, hace unos dieciocho años, vi dos de estos, reestrenados en cine en su momento. En concreto, esa obra maestra que es para mí "Tiempos modernos" ("Modern times", 1936), y "El gran dictador" ("The great dictator", 1940), que me gustó algo menos. Recomendabilísimas las dos. Y la hoy glosada, por supuesto.

Una joven sin recursos da a luz. Abandonada por el padre del bebé y al no poder hacerse cargo de él, lo deja dentro de un lujoso coche aparcado a las puertas de una mansión con la esperanza de que lo críe una familia rica. Sin embargo el coche es robado, y los ladrones, al darse cuenta de lo que llevan dentro, paran y lo abandonan en un cubo de basura de un arrabal. Al poco pasa por allí un vagabundo, que lo recoge y, tras intentar endosárselo a otros sin éxito, le toma cariño y acaba por llevarlo a su chabola y criarlo. Cuando la madre, arrepentida de su acto, vuelve a por el crío, no lo encuentra. Cinco años después, con el chico ya crecido y cuidado con esmero y limitaciones por el vagabundo, quien lo utiliza para sus pícaros trapicheos, y mientras los servicios sociales tratan de arrebatarle al chaval, la mujer se ha convertido en una famosa artista y filántropa que cuida de gente menesterosa (como ella lo fue), con lo que sus caminos se cruzarán por azar, aunque no se conozcan.

Magnífica película (nota: 9), que no os deberíais perder, no solo por ser historia del cine, esta melodramedia inspirada en la mísera infancia de su director (y actor, guionista, productor y músico... artista total), divertidísima y con momentos de emoción (incluido su final feliz), y humor grotesco y absurdo a base de gags, que os arrancará carcajadas y alguna lagrimilla, parafraseando la frase con la que comienza la película. Además, marcará la pauta para su cine posterior (y el de otros), a la par que destila crítica social por el desamparo de las clases menos favorecidas.

Ahora unas citas de sabiduría ajena, pequeña muestra del saber de otros:

 - "En chica casa, grande hombre cabe".  (Refrán).

 - "Todo lo que necesito para hacer una comedia es un parque, un policía y una chica guapa".  (Charles Chaplin).

 - "Mirada de cerca, la vida es una tragedia, pero vista de lejos, parece una comedia".  (Charles Chaplin).

 - "A mí, esto de llegar a hombre me planteó serios problemas. Vamos a ver: de pantalón largo, ¿se puede dar patadas a los cubos de la basura?, ¿se puede andar a pedradas con los chicos de otro barrio?".  (Camilo José Cela).

Besos y abrazos,

Don.

_____

No hay comentarios: