miércoles, 21 de enero de 2009

Docencia matutina

¡Buenos días!

Pues sí, el sempiterno alumno que soy yo, siempre deseoso de instruirme y formarme, no cesa de aprender de esta ribera y de cualesquiera otros entornos, y una vez hecho esto, tratar de mostrarlo en estos matutinos o por el medio que se tercie. No sé si lo haré bien, vosotros diréis. Por lo demás, la naturaleza y la meteorología no cesan de enseñarnos su sabiduría que, como decía Heráclito, "nada es, todo fluye", y vamos pasando de suaves temperaturas otoñales del fin de semana, a frío invernal de estos días, de sol a nubes, con o sin lluvia, y viceversa; y siempre con el más etéreo de todos los fluidos naturales, el aire, soplando inmisericorde en estos gélidos días. Por cierto, hablando de frío, que mis docentes hadas y ninfas andan escondidas, ellas y sus encantos, de los rigores climáticos, con lo que no me enseñan el más leve escote ... ;-) ...

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo "La clase" ("Entre les murs"), de Laurent Cantet, con François Bégaudeau, e inspirada en la novela homónima (respecto al título original) de este profesor de instituto metido a novelista y actor eventual. Antes que nada, os recomiendo encarecidamente que veáis esta sobresaliente película, merecedora incluso de una matrícula de honor o de un "cum laude". Es un film, rodado con actores no profesionales que prácticamente interpretan cameos, a medio camino de la ficción y el docudrama, que se desarrolla durante un curso escolar en una clase de chavales de unos 14 ó 15 años en un instituto público de secundaria sito en un barrio multicultural y conflictivo de París, sin una trama definida, y en la que se dialoga mucho, mucho.

Se nos retrata un microcosmos, metáfora de la sociedad francesa actual (y de la de tantos otros países), en el que se debate sobre igualdad de oportunidades, integración o exclusión social, sobre profesores que luchan contra el desaliento de su, a veces, ingrata labor, y sobre alumnos que no vislumbran otra cosa que un futuro poco prometedor y a los que es difícil encauzar.

Esta película me recordó mucho a otra maravilla que también os recomiendo encarecidamente, el film documental, también francés, del año 2002, "Ser y tener" ("Être et avoir"), de Nicolas Philibert (ved su matutino más abajo, sobre todo por las citas). Mientras que en "Ser y tener" se nos retrata una escuela rural de primaria, de esas en las que un único profesor educaba conjuntamente a niños de diversas edades (entre 4 y 10 años) y niveles, y que estaban en vías de extinción, ahora, en "La clase", se trata de un instituto público de secundaria, como una especie de continuación, pero en el que hay grandes cambios sociológicos de por medio, especialmente la sociedad urbana en lugar de la rural, la emigración y la multiculturalidad que ello conlleva.

Ya estamos en la sección de sabiduría ajena, en la que muy bien podrían servir bastantes de las citas del matutino de antes de ayer, lunes 19 de enero, pero sobre todo, porque encajan como un guante de seda, las del matutino de más abajo sobre "Ser y tener", y algunas más que os pongo ahora, que seguro nos enseñarán a mejor aprender y enseñar:

- "Lo bien aprendido nunca es perdido". (refrán).

- "Un erudito que no sea serio no inspirará respeto y su sabiduría, por lo tanto, carecerá de estabilidad". (Confucio).

- "Ya no tengo ninguna esperanza en el futuro de nuestro país si la juventud de hoy toma mañana el poder, porque esa juventud es insoportable, desenfrenada, simplemente horrible". (Hesiodo, año 720 a.C.).

Como véis, no es un problema actual, sino universal en el espacio y en el tiempo.

- "No se preocupen por sus dificultades en matemáticas, les aseguro que las mías son mayores". (Albert Einstein).

Einstein, modélico ejemplo de niño inadaptado y con problemas escolares que llegó a donde llegó.

- "Aquél que pregunta parecerá un tonto por un rato, pero el que no pregunta lo será para siempre". (Proverbio chino).

- "No hay malas hierbas ni hombres malos, solo hay malos cultivadores". (Víctor Hugo).

- "La sociedad paga bien caro el abandono en que deja a sus hijos, como todos los padres que no educan a los suyos". (Concepción Arenal).

Besos y abrazos,

Don.

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Matutino pedagógico
(Lunes, 26 de enero de 2004)

¡Buenos días!

Estos habituales matutinos me enseñan constantemente lo hermoso de todas las cosas, y hoy muy especialmente, pues aunque los meteorólogos anunciaban fuertes vientos y lluvias para hoy, hace un sol radiante, aunque a ratos soplan fuertes rachas de viento. Sol que infunde una arrobadora luminosidad al paisaje de la ribera del Arlanzón, tan oscura en las últimas semanas debido a las nubes y neblinas, y sol que también empapa mis ojos de esa misma luminosidad con la que ver mejor las bellezas del mundo ... ya me empaparé de lluvia cuando se cumplan los agoreros presagios de los meteorólogos.

Pues en este fin de semana he estado en una sesión intensiva de aprendizaje cinéfilo, pues he visto tres películas. En realidad, solo una me ha entusiasmado realmente; las otras dos tuvieron sus más y sus menos.

La primera, por orden cronológico, y también de bondad, fue "Ser y tener", de Nicolás Philibert, espléndida película documental francesa sobre la cotidianidad de un profesor y unos niños en una escuela rural francesa. Una delicia de película que nos muestra estupendamente como bien enseñar a nuestros hijos. Os la recomiendo encarecidamente.

Después vi "Pegado a ti", de los hermanos Farrelly, y con Matt Damon y Greg Kinnear. Una comedia con un argumento original, con algunos gags y detalles que me hicieron reir y que me gustaron, y otras partes que me dejaron algo frío.

Y por último, ayer, estuve viendo "Titus", de Julie Taymor, y con Anthony Hopkins, Jessica Lange, y Alan Cumming. Está basada en la obra de William Shakespeare "Titus Andronicus", un drama negro y oscuro sobre la venganza y el odio. Sabia disección de Shakespeare sobre ese tema, aunque tuvo algunas escenas escabrosas que no fueron de mi agrado (esto supongo que será una licencia que se tomo la directora del film).

Rematando, para aprender un poquito más de esta procelosa vida, ahí va otra racioncita de sabiduría ajena:

- "Estudiar con la misma aplicación las asignaturas de la instrucción primaria y del bachillerato, y hacerlo con el deseo primordial de conseguir notas brillantes es, en efecto, la manera más infalible de no ser nada en este mundo". (Gregorio Marañón).

- "Muchos adquieren la opinión de doctos, no por lo que efectivamente saben, sino por el concepto que forma de ellos la ignorancia de los demás". (Leandro Fernández de Moratín).

- "Los que se basan en la práctica sin usar la ciencia es como el piloto que toma un navío sin timón ni brújula, de modo que nunca tiene seguridad de la ruta seguida. La práctica debe ser edificada sobre una sólida teoría". (Leonardo da Vinci).

- "La meta principal de la educación es desarrollar hombres que sean capaces de hacer cosas nuevas, no simplemente repetir lo que otras generaciones han hecho; hombres que sean creativos, inventores y descubridores. La segunda meta de la educación es la de formar mentes que sean críticas, que puedan verificar y no aceptar todo lo que se les ofrece". (Jean Piaget).

- "Educar es lo mismo que poner un motor a una barca; hay que medir, pensar, equilibrar; y poner todo en marcha. Pero para eso uno tiene que llevar en el alma un poco de marino, un poco de pirata, un poco de poeta ... y un kilo y medio de paciencia concentrada. Pero es consolador soñar, mientras uno trabaja, que ese barco, que ese niño, irá muy lejos por el agua. Soñar que ese navío llevará nuestra carga de palabras hacia puertos distantes, hacia islas lejanas. Soñar que cuando un día esté durmiendo nuestra propia barca, en barcos nuevos seguirá nuestra bandera enarbolada". (Gabriel Celaya).

Solo un poeta como Gabriel Celaya puede enseñarnos esto de la pedagogía de un modo tan hermosamente poético.

Besos y abrazos,

Don.
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