Reconciliación matutina

¡Buenos días!

El clima ribereño parece que momentáneamente se ha reconciliado con nosotros a base de suavizar las inclemencias invernales, sin heladas nocturnas, con sol y nubes esta mañanita, nada de viento, y temperaturas que seguro pasarán de los 5ºC pasado el mediodía. Apenas queda ya nieve acumulada de pasadas nevadas. Comparado con anteriores jornadas, se está realmente a gusto paseando por la ribera y alrededores, y en estas condiciones de bondad climática se le perdonan pasados zafarranchos que me originaron algún que otro inconveniente viral. Así es la vida.

Ayer por la tarde estuve viendo otro de los films que se programan en el Aula de Cine de la Universidad de Burgos, siempre en versión original subtitulada, y durante este mes dentro de un ciclo dedicado al cine africano. Esta vez se trató de la producción nigeriana (también de Bélgica, Francia y Austria) "Ezra", de Newton Aduaka, y con Mamoudu Turay Kamara. Aún a pesar de rezumar la película cierto toque amateur, las historia es espléndida, tremenda, dura y desabrida a ratos, y que, aunque os la recomiendo encarecidamente, probablemente no podáis ver por ahí, pues este tipo de cine generalmente solo se ve en festivales y sitios similares ... una verdadera lástima en este caso.

Nos cuenta, a saltos temporales, la historia de Ezra, un antiguo niño soldado, secuestrado de un colegio por un grupo rebelde para adiestrarlo y combatir en una asoladora guerra civil entre varias facciones por el control del comercio de diamantes en Sierra Leona. Se forma un tribunal en el que se le juzga ... ¿juzgar?, bueno, no, en realidad no se le juzga, que es una especie de tribunal de reconciliación nacional, auspiciado por la ONU, con el fin de comprender lo sucedido (recuerdo haber visto hace bastantes años un reportaje de "Informe Semanal", en TVE, sobre la cuestión). Tiene que enfrentarse a que en uno de los asaltos a una aldea, a su aldea natal, murieron sus padres, aunque él no recuerde nada, debido a que los niños soldado eran drogados con anfetaminas para combatir con mayor ardor guerrero ... es decir, más despiadadamente y sin generar remordimientos posteriores. Se les convierte en auténticos robots de guerra, desalmadas máquinas de matar y mutilar.

Pues para mejor reconciliarnos con los disgustos que nos da la vida, nada como un poquito de sabiduría ajena:

- "La guerra es una masacre entre gentes que no se conocen para provecho de gentes que sí se conocen pero que no se masacran". (Paul Valéry).

- "Uno cree que muere por la patria y muere por los industriales". (Anatole France).

- "No se puede ganar una guerra, como tampoco se puede ganar un terremoto". (Jeannette Rankin).

- "La violencia llama a la violencia y la justifica". (Théophile Gautier).

- "Desesperado de hacer la justicia fuerte, se pretende hacer la fuerza justa". (Concepción Arenal).

- "Toda reforma impuesta por la violencia no corregirá nada el mal: el buen juicio no necesita de la violencia". (León Tolstoi).

- "Andan siempre asidas de la mano la clemencia y la justicia. Usa de la una con tal arte que la otra no quede ofendida". (Diego de Saavedra Fajardo).

- "Antes de juzgar al prójimo, pongámosle a él en nuestro lugar y a nosotros en el suyo, y a buen seguro que será entonces nuestro juicio recto y caritativo". (San Francisco de Sales).

- "La última y definitiva justicia es el perdón". (Miguel de Unamuno).

- "Fue en aquellos largos y solitarios años donde mi hambre por la libertad de mi propio pueblo se convirtió en hambre por la libertad de todos, blancos y negros. Yo sabía que el opresor tiene que ser liberado de la misma manera que el oprimido. Un hombre que restringe de esa forma la libertad de otro ser humano es un prisionero del odio, del prejuicio y la estrechez mental. Tanto el opresor como el oprimido ven robada su humanidad". (Nelson Mandela).

Besos y abrazos,

Don.
_____