miércoles, 1 de julio de 2015

Párvulo matutino

¡Buenos días!

Cual inocente infante, nada real pero muy real, cada vez que me sumerjo en estos matutinos, auténtico recreo para mí, lo hago para aprender lo que sea, y sobre todo para retozar por doquiera que mi mente quiera... y al final, casi sin haberlo deseado me ha salido un pareado, más bien prosaico, que los versos y yo no nos "ajuntamos" gran cosa. Pues no sé si atreverme a salir de estos cándidos matutinos, que la realidad de este verano es mucho más que cálida, es sofocantemente tórrida, de insomnes noches, y con máximas rondando por arriba y por abajo, más bien por arriba, los 40ºC, con un sol que pasada la hora de comer te caldea hasta desfallecer... y otro pareadillo más... ¡A ver si al final voy a acabar de abrocharme la bragueta... por poeta!

Ayer por la tarde, a la hora de la siesta, estuve en el cine viendo "La profesora de parvulario" ("Haganenet"), de Nadav Lapid, y con Sarit Larry y Avi Shnaidman. Es el primer largo que veo de este director israelí.

La profesora de una guardería, poeta amateur que acude regularmente a un seminario sobre creación poética, descubre estupefacta como uno de los niños, de cinco años, que allí acuden, es un prodigioso poeta que elabora hermosas composiciones con cierta regularidad y que más parecen escritas por un adulto con mucha vida a sus espaldas, cual si fuera un pequeño Mozart rapsoda. Huérfano de madre, con un padre más preocupado por sus boyantes negocios que por otra cosa, y una niñera que se aprovecha del chaval copiando sus poemas para lucirse en los castings de actores a los que se presenta, la profesora decide protegerle de su entorno e incentivar su innata creatividad, con la idea de que su brillante y precoz talento no se despilfarre para la posteridad.

Extraña y muy chocante película (nota: 4) que me tuvo perplejamente aburrido, o hastiadamente desconcertado, durante casi todo su excesivamente largo metraje, con pasajes inútiles, de tempo pausado, que me pareció bastante absurda, aunque con buenos aspectos formales, no obstante sus chirriantes ramalazos de artificiosidad, que partiendo de un muy insólito hecho nos retrata la peculiar relación entre esta profesora, poeta frustrada, bastante obsesiva y algo insatisfecha con su vida, y su muy especialito alumno que avisa antes de crear un poema, diciendo 'Tengo un poema', como si dijera tengo pis... o caca, y lo suelta, ¡plof!. La tesis del film, que conseguí entresacar de algunos de mis bostezos y cabezadas, me pareció que era la de que hay que proteger el arte, hay que darle un lugar en este mundanal bullicio que nos invade.

Ahora algo de sabiduría ajena, que nos tenga la mente plena, esbozos de un catón con el que espero aprendamos un montón:

 - "Le dijo julio al parvero: «Ya dormirás en enero»".  (Refrán).

 - "Los poetas son los hombres que han conservado sus ojos de niño".  (Alphonse Daudet).

 - "Sé que la poesía es indispensable, pero no sabría decir para qué".  (Jean Cocteau).

 - "El poeta que estuviera satisfecho del mundo en que vive, no sería poeta".  (Giovanni Papini).

Besos y abrazos,

Don.
_____

No hay comentarios: