jueves, 11 de octubre de 2012

Arbitrariedades matutinas nada fraudulentas

¡Buenos días!

No os engaño si os digo que los matutinos y yo hemos llegado al acuerdo de contar las cosas, por inverosímiles e imaginarias que puedan parecer, tal y como son, al menos como son desde mi punto de vista y creencias (pocas y no muy fervientes en general). Por lo demás, parece que tocan a su fin estos nada convencionales días de otoño, en realidad días de verano que pasaban por otoño. Estamos de transición hacia temperaturas máximas por debajo de los 20ºC (hoy 23ºC) y posibles lloviznas, quedando, ya sí, o al menos eso parece, al arbitrio del otoño canónico.

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo "El fraude" ("Arbitrage"), de Nicholas Jarecki, y con Richard Gere, Susan Sarandon, Tim Roth, y Brit Marling, entre otros. Es el debut en el largo de este director. Por cierto, a la guapísima Brit Marling la vi el año pasado en una buenísima película, en la que además de actriz era coguionista y productora, "Otra Tierra" ("Another Earth"), de Mike Cahill, en la que tanto ella como el director también debutaban.

Un magnate que está en la cima del éxito, no sólo profesional, sino también familiar, con una solícita esposa y una brillante hija, heredera de su imperio, en realidad está en verdaderos apuros intentando vender sus empresas a un banco antes de que se descubra el pufo, el gran maquillaje financiero-contable que ha ido engrosando a medida que iba tapando otros más pequeños, en una constante huida hacia adelante a ninguna parte (como les sucede a esas obsesas por la cirugía estética). Además, a escondidas, tiene como amante a una joven artista a la que trata de promocionar. Cuando ya casi ha conseguido consumar su fraude, un inoportuno accidente de coche con víctimas tal vez haga que se descubran todos sus engaños.

Una muy buena película, con estupenda factura y banda sonora, un thriller sobre la ambigüedad moral de un señor y señor truhán, imbuido de cierto grado de nihilismo. Se nos muestran las luces y sombras de este tipo de gente, la que con sus poderosas decisiones puede abocar a la miseria a los más débiles, saliendo casi siempre impunes de sus delitos (cuando lo son, que la mayoría de las veces corren por delante de las leyes), a base de maquillar cuentas, retocar pruebas, y demás maquinaciones. Tiene de trasfondo esta crisis financiera que nos azota, esa burbuja que creció como la espuma y se desinfló en humo incoloro, inodoro e insípido ... e invisible, humo que antes se nos vendía embotellado, y con caras burbujas (como también sucede con el 99% del ¿arte? moderno), dejando a unos cuantos en la ruina (casi nunca magnates).

Ahora, algo de sabiduría ajena que nos ayude a no dejarnos embaucar por el arbitrio de los fraudulentos:

 - "El hombre venturoso no espera nunca que algo le mude la fortuna".  (Orison S. Marden).

 - "En el origen de todas las fortunas hay cosas que hacen temblar".  (Louis Bourdaloue).

 - "Para amasar una fortuna no se requiere ingenio, lo preciso es carecer de delicadeza".  (Caballero de Bruix).

 - "Detrás de cada fortuna hay un delito".  (Honoré de Balzac).

 - "Los jueces no deben ser árbitros que decidan en las disputas con arreglo a sus propios criterios; son simplemente funcionarios a los cuales se les ha encomendado el deber de aplicar las leyes con la mayor rectitud".  (Ramiro de Maeztu).

 - "Las cifras no mienten, pero los mentirosos también usan cifras".  (Anónimo).

 - "Todo el estudio de los políticos se emplea en cubrirle el rostro a la mentira para que parezca verdad, disimulando el engaño y disfrazando los designios".  (Diego de Saavedra Fajardo).

 - "Es desconsolador pensar cuánta gente se asombra de la honradez y cuán pocos se escandalizan por el fraude".  (Noel Coward).

 - "Cuando la estafa es enorme ya toma un nombre decente".  (Ramón Pérez de Ayala).

Besos y abrazos,

Don.
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