Matutino enamorado

¡Buenos días!

Estado casi perpetuo en el que me encuentro, el enamoramiento de todo lo que me rodea, exacerbado en estos días de plácida primavera, cada vez más soleada y calurosa, y permanentemente manifestado en este mundillo matutino, totalmente inmune a emponzoñados puñetazos de allende sus límites, desde donde reflexiono con calma.

Este fin de semana estuve en el cine viendo "Alacrán enamorado", de Santiago A. Zannou, y con Álex González, Miguel Ángel Silvestre, Carlos Bardem (también coguionista con el director, y autor de la novela homónima en la que está basado el film), Judith Diakhate, Hovik Keuchkerian, y Javier Bardem. Es el segundo largo de su director, tras "El truco del manco" (2008).

Un chico de extrarradio urbano, lleno de rabia y odio, integrante de una banda de skins, y cuyo mejor amigo es el líder del grupo violento, que se dedica a apalear mendigos e inmigrantes por órdenes de un dirigente ultraderechista, frecuenta un gimnasio de boxeo donde gracias a la disciplina y ética deportiva, y a su enamoramiento de una joven mulata, irá cambiando de mentalidad, replanteándose su vida, y alejándose de sus antiguos colegas. Pero su amigo no está dispuesto a permitir que deje el grupo.

Una muy buena película, sobre la manipulación de algunos jóvenes de familias disfuncionales, que carecen de futuro, carne de cañón de líderes mesiánicos, que más miran por su bolsillo que por las ideas que escupen, y que incitan a la xenofobia. Y sobre la redención y superación personal que a través del deporte o del amor logran algunos de ellos, librándose de las férreas cadenas que les ataban a la cerril y descerebrada estupidez, que no les permiten ver más allá que lo que sus burras orejeras les permite, por lo cual son manipulados ... pues es duro pensar por uno mismo, es fácil que te lo den hecho puré, haciendo papilla la capacidad de discernimiento.

Ahora algo de sabiduría ajena que nos haga amar lo que nos rodea y sirva de antídoto contra venenosas obcecaciones con una única y disparatada idea:

 - "El odio que engendra más odio todavía es la cadena más pesada, a la vez que abyecta, con la que el hombre puede atarse a otro hombre, porque sus eslabones están entrelazados por la cólera, por el temor, y sobre todo por la envidia".  (Ugo Foscolo).

 - "Por lo común, tan sólo odiamos a los que no podemos despreciar".  (Mme. D'Arconville).

 - "«Puedo perdonar, pero no olvidar», es sólo otra forma de decir «no puedo perdonar»".  (Henry Ward Beecher).

 - "Las masas humanas más peligrosas son aquellas en cuyas venas ha sido inyectado el veneno del miedo.... del miedo al cambio".  (Octavio Paz).

 - "Estar enamorados de la paz y juntos. Amar cada uno la paz del otro. Dormir en paz, juntos".  (Eugene O'Neill).

Besos y abrazos,

Don.
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