¡Buenos días!
Hoy, día de San Miguel, estamos de veranillo homónimo, especie de sucedáneo del verano-verano. Temperaturas rondando los 25ºC, nubes y claros, fresca brisa que alivia los ardores solares, tampoco excesivos, especialmente en la gratificante sombra, y ligero aplatanamiento, que invita al sedentario hedonismo por la ribera, cuajada de coquetas hadas y ninfas.
Ayer por la tarde estuve en el cine viendo "Los sustitutos" ("Surrogates"), de Jonathan Mostow, y con Bruce Willis. Basada en un cómic, nos plantea un mundo, nada inverosímil, que ya mismo estamos empezando a bordear, en el que la mayoría de la gente interaccionará virtualmente con el resto, desde sus casas, controlando mentalmente desde un diván a unos robots o replicantes, de impecable apariencia física, que les sustituyen en todas sus tareas cotidianas. Por esto de los replicantes, tiene ciertas reminiscencias con esa obra maestra que es "Blade runner", de Ridley Scott (su matutino pinchando aquí).
Un policía, por un accidente de su replicante, se ve obligado a investigar en persona (con torpeza física) varios extraños crímenes en los que aparecen asesinados tanto las personas como sus sustitutos. Una película entretenida, que se ve fácil, con buenos y no tan buenos momentos, que reflexiona de refilón sobre a qué nos puede llevar el sedentarismo y las relaciones virtuales (chats y demás), que acaban convirtiéndose en una especie de droga que anula las relaciones personales.
Ahora un poquito de sabiduría ajena, para mejor saber distinguir entre lo sucedáneo y lo original:
- "La tecnología nos acerca a los más lejanos y nos distancia de los más próximos". (Michele Norsa).
- "Vivimos en una sociedad profundamente dependiente de la ciencia y de la tecnología y en la que nadie sabe nada de estos temas. Ello constituye una fórmula segura para el desastre". (Carl Sagan).
- "El punto donde se detiene la ciencia empieza la imaginación". (Jules Gaultier).
- "El hombre se adentra en la multitud para ahogar el clamor de su propio silencio". (Rabindranath Tagore).
- "Las personas no son ridículas sino cuando quieren parecer o ser lo que no son". (Giacomo Leopardi).
Besos y abrazos,
Don.
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