lunes, 3 de marzo de 2025

Crudas verdades matutinas

¡Buenos días!

Es la pura verdad, casi que podría decirse que el crudo invierno ha vuelto por los madriles, muy especialmente ayer domingo, día desabrido... y ciertamente, hoy seguimos casi igual, eso sí, con temperaturas algo más templadas (6ºC al amanecer), cielos plomizamente grises y lluvia, lluvia y más lluvia, con una máxima prevista de 11ºC. Por lo demás, ya sabéis de mi pasión por estos matutinos, ¿verdad?, donde me encuentro como en familia, en un ambiente de lo más agradable, lejos de eventuales crudezas allende ellos, así que me pongo a la tarea, prácticamente cotidiana en mi vida, de tratar de empatizar con lo que me rodea gracias a ellos.

Este fin de semana estuve en el cine viendo "Mi única familia" ("Hard truths", 2024), de Mike Leigh, y con Marianne Jean-Baptiste, Michele Austin, David Webber, Tuwaine Barrett, Ani Nelson y Sophia Brown. De este veterano director británico había visto hasta ahora siete de sus anteriores películas, la mayoría sobresalientes y muy recomendables (los más recientes no tanto): "La tragedia de Peterloo" ("Peterloo", 2018), "Mr. Turner" (2014), "Another year" (2010), "Happy, un cuento sobre la felicidad" ("Happy-go-lucky", 2008), "El secreto de Vera Drake" ("Vera Drake", 2004), "Todo o nada" ("All or nothing", 2002), y "Secretos y mentiras" ("Secrets & lies", 1996).

Una mujer, casada y con un hijo veinteañero, maniática del orden y la limpieza, de carácter intratable y a la que todo le parece mal, está amargada, cabreada con todo y con todos, no aguanta a los demás, ni a ella misma, siempre enfadada y discutiendo. Su marido hace tiempo que abandonó todo intento por entenderla y ayudarla, aunque tampoco se dejaría, y su hijo se aísla en su propio mundo, sin hablar y deambulando por aquí y por allá por la ciudad. Su única hermana, la pequeña, que vive sola con sus dos hijas, es la única persona que hace por comprenderla.

Buena película (nota: 6), sin aderezos, si acaso con cierto deje cómico involuntario, de risas no premeditadas que se van torciendo conforme avanza el metraje, que mediante la historia de esta mujer, antipática y muy desagradable, que trata a todos con desprecio debido a sus heridas del pasado, que le siguen doliendo muchos años después (y paga con quien no debe), nos muestra estampas de su vida cotidiana y de su ásperas relaciones familiares y con cualquier otro que se cruce en su camino, también de la inmensa desesperanza y soledad que siente por mucho que esté rodeada de gente, por su gente, a quienes no soporta, lo que la tiene sumida en la depresión. También de dos familias, emparentadas y distintas, condicionadas por el opuesto carácter de las respectivas matriarcas, hermanas entre sí, y de cómo esto condiciona el modo de ser de los que conviven con ambas.

Bueno, sin más contemplaciones, llegó la sabiduría ajena con estas citas, espero que repletas de verdad y que añadiré a mi familia de ellas:

 - "¡Ay, qué larga es esta vida!
¡Qué duros estos destierros,
esta cárcel y estos hierros
en que está el alma metida!
Sólo esperar la salida
me causa un dolor tan fiero,
que muero porque no muero".  (Santa Teresa de Jesús).

 - "Cada día sin gozo no fue tuyo: fue sólo durar en él. Cuanto vivas sin gozarlo, no vives".  (Fernando Pessoa).

 - "Los corazones duros se vencen con súplicas blandas".  (Tiberio).

Besos y abrazos,

Don.

_____

No hay comentarios: