martes, 29 de noviembre de 2011

Alocadas apariciones matutinas

¡Buenos días!

Como cada mañana de estos últimos días, el sol aparece sobre el horizonte, y lo hace con tal intensidad que cualquier atolondrada nube que osa velarlo desaparece rápidamente, huyendo despavorida quien sabe donde, antes de ser evaporada por el propio sol o por su propia huida.

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo "El gato desaparece", de Carlos Sorín, y con Luis Luque y Beatriz Spelzini. Es el cuarto film que veo de los siete de este director argentino, comenzando por la maravillosa y recomendabilísima "Historias mínimas" (2002), y siguiendo por "Bombón, el perro" (2004) y "La ventana" (2008).

Un prestigioso profesor universitario, que ha estado internado durante varios meses por un inesperado y violento brote psicótico contra un colega, regresa a casa junto a su mujer pues los médicos le creen curado. Su esposa se encuentra intranquila porque el gato familiar ataca al marido al regreso y se escapa, y porque tiene miedo de que vuelva a recaer. Tiene dificultades en adaptarse al regreso de su marido, recela de todo, el ambiente le parece agobiante y enrarecido, y le ve como a un extraño, aunque se esfuerza por aparentar normalidad. Por la noche es asaltada por continuas pesadillas.

Una buena película, una de inquietante suspense de aires hitchcockianos, con socarrón final, toda una rareza en la filmografía de este director, especializado en historías mínimas pobladas de actores no profesionales. Nos habla de locura, de sus límites, que siempre va por barrios y todos coqueteamos con ella de uno u otro modo, y en uno u otro momento. Asistimos a como esa mujer se asoma a sus abismos, rozando la paranoia, preocupada y atemorizada por la recaída de su marido, tan solo por su sospecha de ello.

Ahora, hace acto de presencia la sabiduría ajena, que seguro nos aporta algo de sensatez y lucidez:

 - "Cuando el Sol se eclipsa para desaparecer, se ve mejor su grandeza".  (Séneca).

 - "Todos los problemas tienen la misma raíz: el miedo, que desaparece gracias al amor; pero el amor nos da miedo".  (Anónimo).

 - "Cuando un loco parece totalmente sensato, es ya el momento, en efecto, de ponerle la camisa de fuerza".  (Edgar Allan Poe).

 - "Las locuras del loco son conocidas del mundo y desconocidas para él. Las del sabio son conocidas por él y desconocidas para el mundo".  (Charles C. Colton).

 - "Yo debo de ser un loco; en todo caso, si estoy cuerdo, los demás no deberían tampoco andar sueltos".  (George Bernard Shaw).

Besos y abrazos,

Don.
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