martes, 10 de abril de 2012

La cálida luz matutina

¡Buenos días!

Estos matutinos que me iluminan cada mañana y me dan calor cuando los necesito siguen por su tránsito primaveral buscando sus raíces, o andándose por las ramas las más de las veces, que les es irrelevante que llueva, haga frío, de suave invierno como en esta pasada semana santa, o que los días sean tibios, serenos y acogedores.

En los pasados días de torrijas y buen potaje estuve en el cine viendo "La fría luz del día" ("The cold light of day"), de Mabrouk El Mechri, y con Henry Cavill, Sigourney Weaver, Bruce Willis, y Verónica Echegui. La familia de un joven norteamericano es secuestrada cuando se encuentran de vacaciones en España y sólo dispondrá de unas pocas horas para encontrarlos, a la par que es perseguido a muerte y va descubriendo oscuros secretos de su padre, implicado en una conspiración gubernamental.

Un thriller de acción, regularcillo, nada original, muy trillado, para pasar un rato sin otras consideraciones. Tiene la particularidad de desarrollarse principalmente en Madrid, y también en la costa levantina, aunque para los que conocemos ambos lugares sorprende, por ejemplo, como se puede uno bajar del metro en Sol y de camino a la calle pasear por la estación (de tren) de Atocha, o entrar por una playa al mar y salir de él por otra a bastantes kilómetros en un parpadeo. Y esto reiterado casi infinitas veces con distintas localizaciones a lo largo del metraje. Supongo que será lo normal en otros films del estilo, donde no lo notas por ignorancia de los lugares de rodaje. Otra simpática curiosidad más: el actor que interpreta al jefe de los agentes secretos israelitas es de origen musulmán, como el propio director.

Ahora un poco de sabiduría ajena que nos aporte algo de luz en nuestras averiguaciones vitales:

 - "No hay cosa más fría que un consejo cuya aplicación sea imposible".  (Confucio).

 - "Los temores, las sospechas, la frialdad, la reserva, el odio, la traición, se esconden frecuentemente bajo ese velo uniforme y pérfido de la cortesía".  (Jean Jacques Rousseau).

 - "Vivimos en una ceguera total desde el día de nuestro nacimiento hasta el día de nuestra muerte y, en el breve intermedio que llamamos vida, somos incapaces de controlar nuestro entorno".  (Matilde Asensi).

 - "Desdichada cosa es caminar tan sin luz en el proceder que sean los aciertos debidos al acaso, y cosa natural los yerros".  (Francisco de Quevedo).

 - "Si das la luz para encender la vida de tu hermano, en ti brillará más esplendorosa".  (Albert Schweitzer).

Besos y abrazos,

Don.
_____

No hay comentarios: