¡Buenos días!
Fresca mañana, que no pasamos de los 10ºC, de primavera tenemos hoy a la vera del Arlanzón, con nubes rotas y que, conforme avanza, van viajando a lomos de Eolo, quién sabe dónde, a repartir con equidad sus benefactoras lágrimas. Viento que también me empuja, con celeridad, a pasar ya mismo a glosaros el film que vi ayer por la tarde en el Aula de Cine de la Universidad de Burgos.
Se trató de "El último viaje del juez Feng" ("Mabei shang de fating"), de Liu Jie, y con Li Baotian, Yang Yaning y Lu Yulai. En una remota provincia montañosa de la China porfunda, en estos primeros años del s.XXI, el viejo juez Feng (una especie de juez de paz itinerante) recorre las más recónditas aldeas, de diversas etnias locales, impartiendo la justicia estatal con la ayuda de una secretaria y a lomos de un caballo, sobre el que lleva los artilugios (expedientes y emblemas de dignidad) de su precario tribunal, tratando de resolver casos pendientes desde la última visita. Según una nueva reglamentación, la justicia solo puede ser ejercida por titulados, y él y su secretaria no lo están, con lo que serán prejubilados y sustituidos por gente de universidad. Inician ambos su último viaje con la compañía de un joven aprendiz (titulado).
Vemos el choque entre los criterios de la justicia estatal y la establecida en ancestrales tradiciones y costumbres locales, así como la disparidad de criterios entre el adoctrinado aprendiz y el viejo juez, ya empapado de tradiciones locales y que aplica hibridadas, con muy buen criterio, con la justicia de las leyes estatales. Es más, más que impartir solemne justicia, lo pone fácil para tratar de que los litigantes lleguen a acuerdos mutuos. Una película naturalista, cercana al documental, pintoresca y simpática, básicamente por los casos que se presentan al juez, a medio camino entre lo absurdo y lo naif.
Ahora, a lomos de la sabiduría ajena, por medio de las siguientes citas, trataremos de ser más justos:
- "El arte de dirigir consiste en saber cuando hay que abandonar la batuta para no molestar a la orquesta". (Herbert von Karajan).
- "Gobernar demasiado es el mayor peligro de los gobiernos". (Mirabeau).
- "Sé justo antes de ser generoso, sé humano antes de ser justo". (Fernán Caballero).
- "No es necesario alzar la voz cuando se tiene la razón". (Proverbio chino).
- "Conseguir con alguien un entendimiento total es en todo caso un enorme privilegio. Para mí tiene un precio literalmente infinito". (Simone de Beauvoir).
- "En la vida no hay premios ni castigos, sino consecuencias". (Ingersoll).
- "Los recursos que pedimos al cielo se hallan en nuestras manos la mayor parte de las veces". (William Shakespeare).
- "Envejecer es como escalar una enorme montaña: mientras subimos, las fuerzas disminuyen, pero la mirada es más libre, la vista más amplia y serena". (Ingmar Bergman).
Besos y abrazos,
Don.
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