miércoles, 14 de abril de 2010

Matutino de vida y muerte

¡Buenos días!

Ya sabéis que vivo y me desvivo por esta esplendorosa ribera del Arlanzón y esas deliciosas hadas y ninfas que la habitan, que están de muerte y que me dan la vida con su mera presencia. Hoy tenemos otro día de primavera que parece no acaba de estallar en su plenitud, a pesar de que han mejorado los ásperos y ventosos días pasados, subiendo algo la bondad térmica. Sigue habiendo grises nubes que acechan y dominan al sol, pero él sabe que su momento de victoria llegará antes o después, haciendo florecer a la primavera para que nos deje atónitos ante su belleza.

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo una muy excelente película, que os recomiendo si no os importa sufrir de lo lindo (no oí el más leve suspiro, entre el sobrecogido auditorio, en las más de dos horas de duración del film, que se me pasaron en un suspiro). Se trató de "Ciudad de vida y muerte" ("Nanjing! Nanjing!"), de Lu Chuan, y con Hideo Nakaizumi, Gao Yuanyuan, Fan Wei, Liu Ye, entre muchos otros y otras. Nos relata la muy cruenta batalla, y ocupación, de Nankin, la entonces capital de China, que tuvo lugar entre 1937 y 1938, durante la guerra chino-japonesa que precedió a la II Guerra Mundial. En ella, el ejército japonés perpetró un auténtico genocidio, cometiendo atrocidades sin fin, con unos 300.000 muertos, entre soldados y civiles chinos (la mayoría asesinados tras la batalla), y unas 20.000 violaciones de mujeres.

Este estremecedor e impresionante film recuerda, no solo por estar rodado en un hermoso blanco y negro, a dos de Steven Spielberg: "Salvar al soldado Ryan" y "La lista de Schindler". Arranca, de modo impactante, con el asedio y toma de la ciudad por las tropas japonesas, al estilo del desembarco de "Salvar al soldado Ryan" y poco a poco nos va narrando la historia desde los diversos puntos de vista de dos soldados japoneses y de otros soldados y civiles chinos. Nos muestra como los refugiados tratan de sobrevivir al horror desatado en esa ciudad, en la que en esos días vivir era más difícil que morir. Con momentos de una gran belleza, a pesar del horror, nos muestra la estética y la ética de éste, ya que tanto víctimas como verdugos tienen y ven robada su humanidad como consecuencia de las crueldades sin sentido de toda guerra.

Ahora, algo de vida para nuestras neuronas, en forma de sabiduría ajena:

- "En la pelea se conoce al soldado; sólo en la victoria se conoce al caballero". (Jacinto Benavente).

- "La guerra vuelve estúpido al vencedor y rencoroso al vencido". (Nietzsche).

- "La guerra es un juego que los reyes, si sus súbditos fueran inteligentes, no jugarían jamás". (William Cowper).

- "El hombre ha nacido para luchar, y es como se le define mejor, diciendo que es un guerrero nato y que su vida, desde el principio al fin, no es sino una batalla". (Thomas Carlyle).

- "Una vida que tiene que luchar constantemente por la vida no es una vida". (Menandro).

- "El hombre teme la muerte porque ama la vida". (F. Dostoievski).

- "Hay una cosa tan inevitable como la muerte: la vida". (Charlie Chaplin).

- "Incierto es el lugar donde la muerte te espera; espérala, pues, en todo lugar". (Séneca).

- "En esta vida es fácil morir. Construir la vida es mucho más difícil". (Vladimir Maiakovski).

Besos y abrazos,

Don.
_____

No hay comentarios: