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lunes, 11 de octubre de 2021

Matutino por la tangente

¡Buenos días!

Ya no recuerdo bien cual era el tema sobre el que hoy quería desvariar, rozó mis neuronas, tocó y se me quedó en la punta de la lengua... tal vez sea un episodio pasajero de desmemoria no imputable a mi edad sino más bien a la casualidad, no sé. Así que, a bote pronto, tendré que desparramar sobre otra cosa, sin nada en común con la anterior, aunque quizá ambas contacten al final de la aparente línea del horizonte, o eso quiero ver, o creer. Por lo demás, estos días de otoño de calendario corren en paralelo a un ambiente tirando a veranillo o tranquila primavera, con reconfortante calorcito cual amor de madre en las horas centrales del día, sol, algunas nubes, y 24ºC de máxima prevista por los madriles.

Este fin de semana estuve en el cine viendo "Madres paralelas" (2021), de Pedro Almodóvar, y con Penélope Cruz, Milena Smit, Israel Elejalde, y Aitana Sánchez-Gijón. De este director he visto casi todas sus películas, salvo cuatro de las rodadas en los años 80, y por tanto todas las de este siglo, a saber: "La voz humana" ("The human voice", 2020), "Dolor y gloria" (2019), "Julieta" (2016), "Los amantes pasajeros" (2013), "La piel que habito" (2011), "Los abrazos rotos" (2009), "Volver" (2006), "La mala educación" (2004), y "Hable con ella" (2002).

Dos mujeres coinciden en la misma habitación de un hospital porque van a dar a luz el mismo día. Ambas son madres solteras que quedaron embarazadas accidentalmente, sin haberlo deseado. La una, cumplidos los 40, está contenta con ello y lo desea, pero la otra, a poco de cumplir los 18, se encuentra aterrada. La primera intenta animar a la segunda mientras esperan el momento de sus respectivos partos, lo que creará un vínculo especial entre las dos.

Una buena película (nota: 6) con la que apenas conecté como se debe, es decir, que me atravesara corazón e intelecto, cosa que consiguió muy pocas veces y con poca intensidad. Además, las habitualmente estupendas y muy cuidadas maneras formales de Almodóvar en esta ocasión se me deshilacharon un poquito. Más que las madres del título, los dos temas de la película, la maternidad y la memoria histórica, fueron los que me parecieron los paralelos, y no muy bien tramados. Respecto de las actuaciones muchos alaban la de Penélope pero, sin desmerecer ésta, muy buena, a mí me cautivó la de Milena, y casi que también la menos protagónica de Aitana.

Bueno, pues ya que hemos llegado hasta aquí ya solo nos queda tocar, una vez, a la puerta de la sabiduría ajena, y no pasar de largo:

 - "Los que no pueden recordar el pasado están condenados a repetirlo".  (George Santayana).

 - "La vida de los muertos está en la memoria de los vivos".  (Cicerón).

 - "Siempre las madres tienen ese encanto secreto de tratarlo a uno como un niño".  (Reinaldo Arenas).

Besos y abrazos,

Don.

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