¡Buenos días!
Vuelve a amanecer el cielo con nubes muy grises, que no se contienen a la hora de derramar sus remordimientos por contener tanta agua en si mismas y no regarla con generosidad por doquier. La máxima prevista para hoy por los madriles será de unos 10ºC. Tampoco me contengo yo a la hora de desparramar mi incontinencia verborreica, casi siempre orientada por la cosa cinéfila, en esta especie de constructo matutino no demasiado acotado en cuanto a lo que es capaz de englobar... porque ¿quién puede ponerle puertas al campo?... aunque trate de construirlo palabra a palabra con ventanas a la interpretación de cada cual.
Este fin de semana estuve en el cine viendo "Kontinental '25" (2025), de Radu Jude, y con Eszter Tompa, Gabriel Spahiu, Adonis Tanta, Serban Pavlu, Oana Mardare, Annamaria Biluska, Adrian Sitaru y Marius Damian. Es la primera película que veo de este director rumano.
Una mujer, que trabaja como alguacil, acude un día a ejecutar una orden judicial de desahucio contra un vagabundo que vive en el cuarto de calderas, en el sótano de un viejo edificio deshabitado que va a ser reconstruido como un pequeño hotel de lujo, en Cluj (la principal ciudad de Transilvania). Mientras le dan tiempo para que saque sus pertenencias, se suicida. La mujer, afectadísima, aunque sabe que no es responsable legalmente, siente una enorme culpa moral que no sabe como gestionar. Muy desanimada e incapaz de irse de vacaciones con su familia, le dice a su marido que se vaya él con sus dos hijos, porque ella necesita estar sola para procesar lo ocurrido. Deambulará por la ciudad, charlando con unos y con otros para intentar descargar sus remordimientos.
Buena película (nota: 6), este drama con bastante retranca, sorna e ironía, un puntito de desasosiego, y un sentido del humor latente con cierto aire de absurdo que no llega a levantar ni sonrisas ni, por supuesto, risas. También sátira sociopolítica con largos y discursivos diálogos, con momentos muy lúcidos, en la que se reflexiona y critica la cada vez mayor brecha social entre ricos y pobres, por mucho que aumente la riqueza general, la especulación inmobiliaria y el despiadado capitalismo, pero también la banalidad de las piadosas recetas religiosas (o de otro tipo) para redimir las culpas, o los ridículos nacionalismos. Todo a través de la infructuosa búsqueda de redención de su protagonista, atormentada por una culpa que ella misma se impone, metáfora de la que deberíamos sentir todos como sociedad y tratamos hipócritamente de esconder.
Ahora, en la sabiduría ajena, ahí os dejo estas citas, que espero contengan buena parte de la esencia de lo narrado en la película hoy glosada:
- "Bajo el capitalismo, el hombre explota al hombre. Bajo el comunismo, es justo al contrario". (John Kenneth Galbraith).
- "El nacionalismo es la chifladura de exaltados echados a perder por indigestiones de mala historia". (Miguel de Unamuno).
- "La religión sirve para ayudarnos y consolarnos ante unos problemas que no tendríamos si no existiese la religión". (Jaume Perich).
- "He ahí al hombre íntegro arremetiendo contra su calzado, cuando el culpable es el pie". (Samuel Beckett).
- "Qué graciosa es la vida, ese misterioso trato de despiadada lógica para un vano propósito. Lo más que puede esperarse de ella es un cierto conocimiento de uno mismo, que llega demasiado tarde, y montones de disculpas que nunca se acaban". (Joseph Conrad).
Besos y abrazos,
Don.
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